Jorge Sampaoli llegó en abril al Flamengo con el objetivo de retener el título en la Copa Libertadores, pero este jueves sufrió una dura derrota 3-1 ante Olimpia en Asunción y quedó eliminado en los octavos de final. Fue una noche de furia para el entrenador argentino en el Estadio Defensores del Chaco, ya que fue expulsado luego de varias discusiones con un rival del equipo paraguayo y luego la paciencia se le agotó al árbitro Wilmar Alexander Roldán Pérez que le sacó la roja.
En el mítico recinto paraguayo, Olimpia debió remontar el 1-0 del partido de ida en el Río de Janeiro. Todo arrancó a pedir del equipo carioca que a los 8 minutos se puso en ventaja con el tanto de Bruno Henrique. Los guaraníes estaban 2-0 abajo, pero con el apoyo de 44 mil espectadores se enchufaron para dar vuelta la historia.
Fue así que Iván Torres concretó el empate a los 12 minutos y el elenco de Francisco Arce ganó en confianza y comenzó a controlar las acciones, pero con el cuidado del manejo de la pelota del rival con jugadores de buen pie como Everton Ribeiro, Giorgian de Arrascaeta y el siempre peligroso Gabriel Barbosa, más conocido como Gabigol.
En el epílogo de la primera mitad, Olimpia volvió a arrimarse y Sampaoli fue más enérgico con sus protestas. El juez se le acercó y le pidió que respetara los límites del corralito para dar sus indicaciones, pero el estratega de Casilda no se calmó y fue amonestado. El ex DT de la selección argentina se enojó por la expulsión de un colaborador suyo y luego apuntó a alguien ubicado en el banco de suplentes de Olimpia, al que a puro grito le advirtió “¡Ey!, te querés pasar de vivo conmigo, ahora te voy a buscar”.
En el amanecer de la segunda mitad, Sampaoli no se tranquilizó y siguió reclamando. Tan solo duró seis minutos en el complemento ya que tras pedir un lateral, Roldán Pérez se cansó y le sacó la tarjeta roja.
Flamengo ya había perdido el rumbo y Olimpia logró convertir el segundo tanto que lo firmó Richard Ortiz, que cabeceó entre cuatro jugadores del Flamengo y a los 69 minutos venció la débil resistencia del arquero Matheus Cunha (Agustín Rossi estuvo en el banco). Con ese resultado los paraguayos habían igualado la serie y el sueño de otro tanto creció.
A falta de diez minutos, nuevamente el conjunto brasileño defendió mal a la salida de un tiro de esquina y Facundo Bruera ganó de arriba y cabeceó solo para concretar el tercer tanto que valió la clasificación.
Pero de la euforia por haber revertido la serie el dramatismo se hizo presente en el Defensores del Chaco ya que en el cuarto minuto adicionado Víctor Hugo la mandó adentro del arco y ese descuento obligaba a una definición por penales, pero el gol fue anulado por una posición adelantada de Gabigol.
En la última del encuentro, otra vez Víctor Hugo tuvo la chance, pero perdió en el mano a mano con el guardameta Juan Espínola.
El triunfo fue para Olimpia que en los cuartos de final se medirá contra otro gigante de Brasil y de Río de Janeiro, Fluminense, que dejó en el camino a Argentinos Juniors luego de vencerlo 2-0 en la vuelta. En la ida igualaron 1-1 en La Paternal.
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