Lionel Messi no para de asombrar a todos en el fútbol de los Estados Unidos. En el duelo contra el Orlando City por la Leagues Cup, el astro rosarino volvió a ser la figura del Inter Miami y del encuentro: convirtió dos goles para el 3-1 de su equipo, que avanzó de ronda y sigue con el sueño latente de festejar el primer título de su corta historia.
Pero más allá del fútbol que desplegó el capitán de la selección argentina, a Messi se lo vio muy metido en los duelos que se produjeron a lo largo del encuentro. Tuvo un encontronazo con el peruano Wilder Cartagena y hasta le cedió el penal para que lo ejecute el venezolano Josef Martínez. Además de esto, el número 10 del equipo de Gerardo Martino volvió a tener un duelo particular con otro futbolista del clásico rival.
Todo comenzó cuando, antes del final de la primera etapa, el conjunto local tenía el balón y Messi se sacó de encima a un rival. ¿Con una gambeta? No, lo desacomodó con el brazo. Así fue como César Araujo, volante del Orlando City, salió despedido. Acto seguido, el 5 del equipo de la MLS intentó quitarle el balón y el árbitro cobró una infracción en favor de Inter.
Cuando pareció que la situación había terminado, una vez que se terminó el primer tiempo, fueron los dos autores del empate 1-1 parcial los que protagonizaron un tenso cruce cuando iban caminando hacia la zona del túnel para dirigirse a los vestuarios. En el intercambio, se pudo ver que Messi siempre se tapaba la boca mientras hablaba, para no ser tomado por las cámaras de la transmisión oficial. Todo lo contrario sucedió con el mediocampista charrúa.
“Pero, ¿por qué?... No, ¡estás loco, vos!”, se le pudieron leer los labios al uruguayo de 22 años durante el cruce. Es más, cuando Messi caminaba, un asistente técnico le ofreció agua, a lo que el argentino se negó para poder continuar con la discusión. Es más, hasta en un instante, le hizo el famoso gesto con una de sus manos de “qué me estás diciendo”. Luego de eso, Araujo volvió a repetir “Pero, ¿por qué?”, mientras el astro rosarino lo miraba con cara de pocos amigos.
La secuencia terminó cuando, ya con otros jugadores del Inter Miami y el Orlando City listos para ingresar al túnel, el cuarto árbitro del partido intercedió para calmar los ánimos. Una vez que se acabó el encuentro, Araujo habló con los medios en zona mixta y se refirió a lo sucedido con el histórico número 10. “No hay ninguna fórmula de cómo parar a Messi”, dijo.
“Cosas de partido que quedan ahí. Nada, nada”, contestó el uruguayo cuando le preguntaron por el diálogo que tuvieron en el final de la etapa inicial. “Nosotros íbamos fuerte, normal, no pasó absolutamente nada”, concluyó sobre el tema.
Tras un áspero primer tiempo en el DRV PNK Stadium, el equipo de Martino pudo sacar la ventaja en la segunda etapa de la mano de un gol de penal de Martínez y, a falta de menos de 20 minutos para el cierre, una asistencia del ex jugador del Atlanta United dejó solo a la Pulga para que este convirtiera su segundo tanto de la noche y el quinto en tres partidos con la camiseta rosa.
De esta manera, Inter Miami se clasificó a los octavos de final de la Leagues Cup, por ende, está entre los mejores 16 equipos del torneo que reúne a las franquicias de la Major League Soccer con los de la Liga MX de México. El próximo domingo 6 de agosto, Messi y compañía volverán a saltar al campo de juego, esta vez como visitantes -la primera vez para el astro rosarino desde su llegada a los Estados Unidos- para enfrentarse al FC Dallas por el pase a los cuartos de final.
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