Lionel Messi montó un verdadero show en su segundo partido como jugador del Inter Miami. El delantero argentino, de 36 años, anotó los dos primeros goles y regaló una asistencia (además de participar en la otra conquista) en el triunfo por 4-0 de la franquicia ante Atlanta United por la Leagues Cup. Obsequió dos grandes definiciones, se combinó con Busquets, Cremaschi y Taylor, regateó y se animó a varios lujos. Tal fue su actuación que, cuando fue reemplazado, parte del público que colmó las graderías del estadio DRV PNK Stadium decidió marcharse, repleto de fútbol.
La imagen resultó curiosa, máxime ante el resultado abultado del equipo: se trata de una escena más común cuando el equipo alentado va perdiendo por mucha diferencia. Muchos de los espectadores optaron por pararse en sus ubicaciones y emprender lentamente la retirada, ya con el astro en el banco de suplentes.
Fue a los 78 minutos cuando el Tata Martino decidió reemplazarlo por Robbie Robinson. El capitán de la selección argentina se quitó la cinta, se abrazó con Thiago Almada (campeón del mundo con él en la Albiceleste y rival esta noche), saludó a sus compañeros y saboreó la ovación.
“No me di cuenta cuando la gente dejó el estadio, hubiese esperado que la gente se quede hasta el final para aplaudir al equipo, pero entiendo que pueda ser así”, dijo Gerardo Martino sobre la actitud consultado en conferencia de prensa. “Fue una buena actuación del equipo, la gente está feliz”, añadió.
Para muchos de los presentes en el estadio, la salida de Messi fue la caída del telón. Sólo se perdieron el penal dilapidado por Thiago Almada. Y el epílogo de la fiesta, con aplausos para todo el equipo y una nueva ovación al ídolo, que había debutado el viernes con un épico gol de tiro libre en el último minuto para la victoria 2-1 contra Cruz Azul por la misma competencia.
Con el triunfo, nuevamente ante la tierna mirada de sus hijos Thiago, Mateo y Ciro, de su esposa Antonela Roccuzzo, y de su mamá Celia, Messi consiguió que su equipo clasifique a los 16avos de final de la Leagues Cup. Volverá a jugar el miércoles 2 de agosto contra el líder de la Zona Sur 2 (Orlando City, Houston Dynamo o Santos Laguna).
Será la oportunidad para Messi de continuar haciendo historia con Las Garzas.Dos partidos le alcanzaron para robarse el show... Y el interés pleno de los aficionados.
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