Jorge Brito ganó las elecciones en diciembre de 2021 por amplio margen. Previamente fue Vicepresidente durante los ocho años de la gestión exitosa de Rodolfo D’Onofrio, participando activamente en el proceso de transformación histórico que se llevó adelante. Tras un año y medio de mandato ha demostrado temple, firmeza e inteligencia. Su figura se consolida como el gran hacedor de un crecimiento institucional sin precedentes.
Algunos de sus logros hablan por sí solos:
- Una facturación récord, proyectada para el año 2023, de más de 220 millones de dólares.
- Más de 335.000 socios, que superan largamente el promedio histórico de 80 mil asociados.
- La democratización y simplificación del acceso al estadio con un resultado de cuarenta partidos consecutivos con entradas agotadas.
-La generación de nuevas lineas de ingresos por contratos innovadores como consecuencia de una década de coherencia y previsibilidad.
- El mejor balance de los últimos treinta años, con un superávit de $2.862 millones, sin deudas con clubes ni entidades financieras. Incluyó una suba de los activos en un 40% y un gran crecimiento del patrimonio neto.
- La incorporación de procesos de transparencia y la aprobación por primera vez de un Código de Ética que regula la toma de decisiones de la Comisión Directiva y los funcionarios del Club.
- La obra de remodelación mas importante desde la fundación del Más Monumental en 1938, alcanzando una capacidad para 86.000 personas y convirtiéndose en el Estadio más importante de América.
- La incorporación de siete hectáreas próximas a las actuales instalaciones, duplicando su superficie en Nuñez y actuando con una visión estratégica para el futuro del Club.
Lo descripto son hitos de solo una parte de los logros de estos primeros meses de su gobierno. River es naturalmente fútbol y su equipo acaba de consagrarse campeón con una solidez, buen juego y eficacia reconocidos por propios y extraños.
Indudablemente, resultó ser un desafío complejo reemplazar a Marcelo Gallardo, quien ya se ha impuesto como la figura más importante de la historia del Club y cuya impronta y legado resultan inconmensurables y eternos. Sin embargo, la contratación de un nuevo equipo técnico encabezado por Martín Demichelis fue un nuevo acierto del Presidente Brito. Hombre de la casa, preparado, metódico y con experiencia europea.
El apoyo con los refuerzos solicitados responden también a la salud económica del Club. Los resultados están a la vista. Si bien es cierto que todo lo logrado responde al trabajo de directivos, empleados, socios e hinchas por su apoyo permanente, también es imprescindible remitirse al liderazgo de Jorge Brito. El presidente del Club, sin demagogia, grandilocuencia, promesas vacuas ni soluciones mágicas, ha construido una nueva realidad que genera el orgullo de todos los riverplatenses. Nada es casual.
En las decisiones del presidente del Club, prevalece hacer siempre lo correcto por sobre lo que conviene políticamente o las bondades del corto plazo. Esas decisiones revalidan una verdad histórica: que River está hecho de la visión y los sueños de varias generaciones de dirigentes, del esfuerzo y el talento individual de sus miles de deportistas y del amor y la pasión inconmensurable de más de 20 millones de hinchas repartidos a lo largo y ancho de la Argentina y el mundo.
River se consolida como un fenómeno popular sin precedentes. Su gente desborda todo rincón del país. Se advierte una marea indetenible en materia de convocatoria y aliento incondicional.
El presente es de satisfacción. El futuro genera ilusión y optimismo. River Plate está en buenas manos.
Seguir leyendo: