Serán tiempos de cambio para Arturo Vidal. Es que el mediocampista chileno tiene prácticamente definida su salida del Flamengo para continuar su carrera en Athletico Paranaense, según informaron los medios brasileños. “Ready para lo que venga”, escribió el volante de La Roja en una historia publicada a través de su cuenta oficial de Instagram, acompañado de su representante Fernando Felicevich, que puso intriga con respecto a su futuro.
De acuerdo al portal chileno La Tercera, la figura que se coronó campeón de la Copa América con su país en 2015 y 2016 ya puso fin a su vínculo con el equipo de Río de Janeiro, luego de una relación distante con el entrenador Jorge Sampaoli, quien lo dirigió en la selección andina. incluso la pareja del futbolista, Sonia Isaza, le envió filosos dardos al estratega de Casilda mediante los mensajes que publicó en Instagram. “¿Por qué Vidal no juega?”, le preguntó un fanático carioca en las redes sociales y la novia del jugador respondió: “Porque hay un entrenador muy malo”.
Arturo Vidal, de confirmar su traspaso, jugará en uno de los 16 equipos clasificados a los octavos de final de Copa Libertadores, que enfrentará a Bolívar.
El ex jugador de Juventus, Inter, Barcelona, Bayern Múnich y Bayer Leverkusen no atravesaba su mejor momento con el Fla recibía constantes recriminaciones por parte de los fanáticos del Mengao y el entrenador de Casilda dejó de tenerlo en consideración.
El Flamengo, que era el gran candidato a adjudicarse el Grupo A de la Copa Libertadores, se clasificó en el segundo puesto detrás de Racing. Además, el Mengao perdió la Recopa Sudamericana ante Independiente del Valle de Ecuador y la final del torneo carioca con su clásico rival Fluminense. Además, se encuentra como escolta del líder Botafogo en el Brasileirao con 26 unidades, a 10 de distancia del puntero.
Como describió en sus redes sociales, el Rey Arturo afrontará un nuevo desafío en lo que será su octavo club a lo largo de su trayectoria. Tras exponer su talento en el Colo Colo, el volante emigró a Europa para afianzarse en la Bundesliga. El Bayer Leverkusen le abrió las puertas del Viejo Continente y luego continuó por la Vecchia Signora, el Bayern Múnich, el Barcelona y el Inter de Milán hasta llegar a Brasil.
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