Mauricio Pochettino ya empezó a trabajar para darle forma al nuevo Chelsea de cara a la próxima temporada, en la que su tarea será dar una vuelta de timón para reacomodar al equipo después de protagonizar una campaña muy mala al quedar en el puesto 12 de la Premier League y muy lejos de clasificar a competencias europeas.
Para eso, tanto él como la dirigencia, están exprimiendo cada día del período de transferencias que inició en julio y, a nueve días, ya se convirtieron en protagonistas del mercado al desprenderse de varias figuras como Mason Mount y Kai Havertz, entre otros.
Sin embargo, también quieren incorporar refuerzos y allí es donde el rosarino propuso algunos nombres. El último en sumarse a esa lista fue el cordobés campeón del mundo Paulo Dybala, figura en la Roma de José Mourinho en la última campaña.
Así lo confirmó el periódico italiano Corriere dello Sport, quien detalló que el conjunto Blue pagaría la cláusula de rescisión de 12 millones de euros que se estableció en su contrato para fichar por equipos no italianos. Esta sería una baja sensible para Mou, después de que la Joya completara 38 partidos (alcanzando la final de la Europa League) con 18 goles y 8 asistencias.
Esta no es la primera vez que Pochettino intentaría hacerse con los servicios de su compatriota, ya que después de proclamarse subcampeón de la Champions League en 2019 intentó incorporarlo al Tottenham. Por aquel entonces, la Juventus pidió 80 millones de euros y la operación se frustró.
Incluso un año antes, en febrero del 2018, se deshizo en elogios hacia el delantero argentino: “Pongo a Dybala en la categoría porque es un talento especial y verlo en la cancha es maravilloso, incluso si puede causar unos problemas para tu equipo”, aseguró a la RAI Sport en la previa del cruce contra la Vecchia Signora por los octavos de final de la Champions.
En el caso de que se concrete la operación, la de Dybala sería la tercera llegada de peso para el conjunto londinense después del arribo del delantero francés Christopher Alan Nkunku (60 millones de euros al Leipzig) y el senegalés Nicolas Jackson (37 millones al Villarreal).
Por el contrario, a las salidas de Mason Mount al Manchester United y de Kai Havertz al Arsenal, también se sumaron las de Mateo Kovacic (al Manchester City), Ruben Loftus-Cheek (Milan), N’Golo Kanté, Kalidou Koulibaly y Edouard Mendy (todos ellos a Arabia Saudita).
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