Los primeros días del mes de julio de 2003 será recordado como uno de los momentos que generó más impacto en la historia del Real Madrid. Es que después de las llegadas de Figo (2000), Zinedine Zidane (2001) y Ronaldo (2002), el presidente del club Florentino Pérez había tomado la decisión de agregar al cuarto integrantes de los recordados Galácticos, jugadores de reconocimiento mundial que llegaron a la Casa Blanca.
Hace 20 años, el fútbol español vibró como pocas veces con la llegada de David Beckham a uno de los clubes más poderosos del mundo. Tras 11 temporadas en el Manchester United, el Spice Boy generó una revolución desde el preciso momento en que aterrizó en la capital de España. Quien fuera su asesor en sus primeras horas en Madrid contó detalles de cómo el astro inglés vivió su desembarco.
“Es muy complicado encontrar las palabras exactas para describir esa locura. Era como una película de James Bond”, fueron las palabras que utilizó Andy Bernal para describir lo que fue el arribo de Beckham al aeropuerto madrileño. Según cuenta la leyenda, fueron varios los periódicos que contrataron a motociclistas expertos en eventos como el Tour de Francia para seguir al futbolista inglés.
La llegada al Real Madrid del ex emblema del United provocó el asedio de la prensa durante sus primeras horas en el país ibérico. Centenares de periodistas y decenas de cámaras de TV estuvieron en la presentación del mediocampista, que mostró su camiseta con el icónico número 23 en la espalda.
“Nos seguían las 24 horas, dormían fuera del hotel, dentro, motos, coches... Ya el primer día en Madrid pasó por mi cabeza que David y yo íbamos a morir como Lady Di. Recuerdo hablar con mi madre por teléfono y decirle que todo ese lío me recordaba mucho a lo que ocurrió con Diana”, recordó la mano derecha del ya retirado jugador en diálogo con Relevo.
Vestido con una camisa blanca y un traje de color celeste, la imagen de Beckham iluminó el corazón de todos los aficionados del Merengue. Acompañado en el escenario por Florentino y el histórico Alfredo Di Stéfano, presidente honorario, se hizo el anuncio oficial. Y luego de eso, el jugador se vistió con la indumentaria del Real Madrid para mostrarse ante los socios y fanáticos en la ya desaparecida Ciudad Deportiva. Allí fue donde un pequeño pudo burlar a la seguridad y se filtró para recibir el saludo especial de su nuevo ídolo.
Más allá de lo estrictamente futbolístico, Beckham no viajó solo a España. Lo hizo junto a su esposa, Victoria, integrante de la la banda ícono del pop británico Spice Girls, y que además era un mujer del mundo de la moda. ¿Cómo fue programar el cuidado de dos estrellas en sus primeros días en Madrid? “Contratamos a dos guardaespaldas cubanos, ex espías de Fidel Castro, también teníamos dos comandos de militares ingleses... Inspeccionaban debajo de los coches o apuntaban rutas de escape de emergencia. Era como un ejercicio militar todos los días”, explicó Bernal.
“Al ir al entrenamiento y a los partidos. Nos venía un coche por delante, otro por detrás, una moto por aquí, otra por allí. Mil coches y motos de paparazzi y nosotros, con cinco o seis. Era muy difícil. Yo creo que ellos iban buscando la foto de un choque o un accidente. A cualquier sitio que nos desplazábamos, aparecían detrás. Se infiltraban dentro del hotel Santo Mauro, donde vivíamos…”, agregó sobre las primeras horas del futbolista que permaneció en la Casa Blanca hasta 2007.
Por último, la mano derecha de Beckham no pudo obviar en la charla el percance que un día tuvo el volante inglés antes de llegar a un entrenamiento del primer equipo. “Recuerdo que el día del primer entrenamiento de Beckham nos persiguieron como a 200 kilómetros por hora y, nada más cruzar la puerta de la Ciudad Deportiva, David paró el coche y vomitó. A esa persecución hay que añadirle los nervios...”.
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