Este miércoles Mauro Zárate fue protagonista de un tenso momento televisivo cuando, a través de un llamado telefónico, irrumpió en el programa Desayuno Americano para pelar con el periodista Flavio Azzaro, quien llevaba varios minutos discutiendo con su esposa, Natalie Weber.
El conflicto se desató en el programa que se emite por la señal de América debido a un debate sobre el protagonismo que toman ciertos comunicadores. En este contexto, Weber, panelista del ciclo que conduce Pamela David, puso como ejemplo a Azzaro, invitado en el día de hoy: “Muchos mienten, tienen fruta, se creen con impunidad para hablar de jugadores y acá tenemos uno adelante”.
La acusación sorprendió a la conductora, quien desconocía esta interna que data de mediados de 2018, cuando el por entonces delantero de Vélez Sarsfield fue anunciado como refuerzo de Boca Juniors. Aquella transferencia generó una explosión en el conjunto de Liniers porque el delantero había asegurado que, en la Argentina, sólo jugaría en el Fortín y entonces lo tacharon del cuadro de ídolos de la institución.
“Mentiste un año sobre Mauro. Un año entero diciendo boludeces. Primero y principal dijiste que Vélez le había dado plata al padre de Mauro, dijiste que Mauro era un sorete, que era un mercenario, un mal hermano, mal tipo, mal hijo, pesetero, mal marido y mal amigo”, le enumeró Weber al periodista. Además, pidió que pusieran al aire un archivo en donde se veía al por entonces conductor de Canal 26 espetando alguna de esas descalificaciones que hasta ese momento negaba haber dicho.
“Hay cosas que son de interpretación. Ella puede interpretar que yo miento y bueno, es difícil charlar así”, respondió Azzaro, quien en un momento se cansó de las acusaciones y disparó: “Tu marido (Zárate) no jugaba afuera, sino no hubiese vuelto nunca a Vélez”, y agregó: “Si tanto amaba a Vélez ¿por qué se fue a Boca?”.
Cabe recordar que el delantero surgido del elenco de Liniers regresó al club en 2018 tras su breve paso por el Al Nasr de los Emiratos Árabes, en un momento en el que el club estaba peleando por mantener la categoría. Luego, en el siguiente mercado de pases, se unió a Boca Juniors.
“Tu marido es un mercenario y un traidor”, gritó Azzaro ante Weber, e insistió: “Tu marido está enamorado de la plata”.
La situación decantó en el llamado del propio Zárate, quien pidió salir al aire para frenar la pelea. Pero, con sus primeras palabras dio un anticipo de que no iba a haber calma en el estudio: “Nati sabe que no tiene que hablar con este pelotudo. Es un pobre tipo que no tiene nada”. Y arremetió directamente contra el periodista: “Vos sos un cagón, te estoy mirando por la tele, vos sos un cagón. Yo me junto con vos y si nos tenemos que agarrar a trompadas nos agarramos a trompadas”.
El futbolista que ahora juega en el Cosenza de la segunda división de Italia se mostró furioso porque Azzaro estaba criticando a su esposa y a su familia y sostuvo que el estilo del periodista se basa en la difamación: “Este tipo sale en un programa diciendo pelotudeces de la gente y de los jugadores, es lo único que sabe hacer”.
Desde la conducción de Pamela intentaron buscar un acuerdo entre los dos protagonistas de la discusión, pero la situación era demasiado tensa: “Yo quiero que mi mujer no hable con este tipo, me parece vergonzoso que hayan llevado a un tipo así al programa”, arremetió Zárate, antes de acusarlo de que “no va a poder llegar a nada porque lo echan de todos lados”.
El ida y vuelta fue subiendo de tono y ninguno de los panelistas logró que haya paz. Incluso, cuando parecía que la pelea apaciguaba, Azzaro acusó al futbolista y a su esposa de haber “armado” este cruce para atacarlo. “Es obvio, lo armó ella con el marido esto”.
La pelea siguió escalando, y el ex jugador de Boca Juniors reconoció que si hubiese sabido que el periodista estaba en el programa, él no le hubiese permitido a su pareja que fuese. “Ah, entonces vos manejás la vida de tu mujer? Lindo mensaje este”, respondió Azzaro, quien poco después volvió a recordar su transferencia a Boca: “Todo lo que haces lo hacés, por plata”.
Fue entonces que el ex Vélez le remarcó que en su regreso al club acordó no cobrar dinero hasta asegurar la permanencia del Fortín y en medio de los gritos entre uno y otro, cerró la comunicación: “Me voy contento porque te cerré el orto”.
Más allá de las buenas intenciones de los panelistas del ciclo, Azzaro no le pidió perdón a Zárate, incluso sí atinó a disculparse con Weber, entendiendo que ella podría sentirse dolida por sus dichos debido a que es la esposa de Mauro, pero negó que debiera hacerlo con el jugador.
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