Al Nassr necesitaba el triunfo e igualaba 0-0 ante el Al Ta’ee como visitante. Corrían 52 minutos del encuentro cuando Cristiano Ronaldo se hizo cargo de un penal cargado de tensión. Extrañamente, enfocó su mirada a un costado del campo, casi en el banderín del córner, mientras resoplaba. Casi ni observó al arquero rival. Inició su carrera y sacó un remate cruzado, inatajable para Victor Braga. Pero no hubo el típico salto en el festejo; tampoco el “siuuu” con los brazos abiertos y las palmas hacia adelante, gesto que imitan los niños que lo admiran. CR7, de 38 años, decidió celebrar su conquista de una manera totalmente inusual.
Tal vez en busca de mostrar una actitud de unión en el plantel, o para enterrar las críticas y versiones que lo venían rodeando a partir de situaciones en las que exteriorizó fastidio (contra su entrenador, contra un auxiliar adversario que le pidió una selfie y lo terminó empujando), el astro luso corrió directo hacia el rincón en el que calentaban sus compañeros suplentes y se unió en un abrazo colectivo. Hubo más: convocó con sus brazos al resto del plantel para que fuera lo más numeroso posible.
Al Nassr terminó venciendo 2-0 gracias al tanto de Anderson Talisca a los 80′ de acción. Y tuvo un guiño inesperado: Al Hilal le arrebató sobre el final un empate al líder Al Ittihad (finalizó 2-2), por lo que la escuadra de Cristiano retiene chances de pelear por el título en la Saudi Premier League. Quedó a tres puntos, con tres fechas por disputarse.
El delantero lleva 13 goles en desde su desembarco en Arabia Saudita y, más allá de los vaivenes, todavía cuenta con la chance de cerrar la campaña con una estrella. Su futuro aún es una incógnita, dado que arrecian los rumores respecto a que desea retornar a Europa para volver a pelear por cosas importantes en alguna de las ligas más poderosas. Se habló de un posible regreso al Real Madrid, aunque en el club le abrirían las puertas sólo como embajador deportivo. También se habló de un salto al Newcastle, alimentado por capitales árabes. Pero el orientador Eddie Howe bajó la persiana.
“Ahora no fichamos de esa manera. Financieramente, no podemos fichar de esa manera en este momento, pero también tenemos que traer a la gente adecuada y a los jugadores adecuados al grupo. El mercado de fichajes es muy complejo, no puedes elegir un nombre y traerlo. Hay que pensar mucho en lo que hacemos, tanto desde el punto de vista económico como deportivo”, alegó el DT del elenco de la Premier. No obstante, CR7 apuesta a demostrar su vigencia, aunque para eso sea necesario su tradicional festejo.
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