Luis Miguel Pulga Rodríguez fue operado con éxito este miércoles luego del accidente automovilístico que sufrió en la intersección de las rutas 157 y 308, a 120 kilómetros de San Miguel de Tucumán. Sin embargo, el pronóstico del futbolista de Central Córdoba de Santiago del Estero sigue siendo reservado, según informó el parte médico del sanatorio donde se encuentra internado.
“El paciente actualmente cursa el postoperatorio inmediato de una cirugía compleja maxilofacial. Fue intervenido por un equipo multidisciplinario a cargo del servicio de cabeza y cuello de nuestra Institución. Se encuentra estable, lúcido, con monitoreo permanente del equipo médico y en compañía de sus familiares. Pronóstico del paciente: reservado”, indica el comunicado del Sanatorio 9 de julio.
Según informó La Gaceta de Tucumán, la intervención duró cuatro horas. Manuel Usandivaras, jefe del servicio de cabeza y cuello del Sanatorio del Norte y quien estuvo a cargo de la operación, contó que “el golpe en el macizo facial (maxilar superior) generó una fractura que se llama fractura de Le Fort, que es de resolución quirúrgica. De igual manera esto no afectaría su desarrollo profesional; al ser un deportista de alto rendimiento, creemos que tendrá una buena recuperación”.
El mencionado añadió que “mueve todas sus extremidades, por la parte neurológica no tendrá problemas. El tener una masa muscular diferente y preparación física mejor hizo que soporte bien lo golpes. El tiempo de recuperación va a depender de la evolución, seguramente no será menos de tres semanas”.
El choque que sufrió el delantero fue en la intersección de las rutas 157 y 308, a 120 kilómetros de San Miguel de Tucumán. El siniestro ocurrió en la mañana del domingo después del partido que el sábado a la noche disputó su equipo, Central Córdoba, ante Instituto, en Córdoba. Una vez que el plantel del Ferroviario llegó a Santiago del Estero, Rodríguez abordó su camioneta para marcharse a Simoca, su pueblo, para ver a su familia.
En el accidente el Pulga salió despedido por el parabrisas de su camioneta, que quedó zanjada en un río seco al costado de la ruta y fue caminando a pedir ayuda. Los múltiples golpes en su cabeza, rostro y tórax obligaron a los médicos del Hospital Padilla a dejarlo internado en terapia intensiva hasta su posterior traslado hacia el Sanatorio 9 de Julio.
“Estamos más tranquilos. La última tomografía de cráneo que se le realizó estaba mejor. La de su cara estaba igual y requiere de una resolución quirúrgica que no es inmediata y puede ser diferida. La tomografía de tórax, que es lo que más nos preocupaba, está igual. No tiene ningún signo de complicación”, le explicó Jorge Valdecantos, director del nosocomio, a Infobae.
El facultativo entrevistado por este medio aclaró que “por suerte no tiene lesión en sus piernas. Está estable y va a recuperarse”. Los plazos para su regreso no cuentan con una fecha concreta y su evolución diaria será crucial. Aunque lo peor parece haber quedado en el pasado, es importante que el jugador continúe en reposo.
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