Independiente venció a Belgrano de Córdoba por 2 a 0 gracias a los penales que convirtió el uruguayo Martín Cauteruccio. El Rojo obtuvo su segunda victoria en el campeonato, alcanzó los 13 puntos y se alejó del último puesto que ocupa Unión de Santa Fe, mientras que el Pirata, que venía de cuatro éxitos en fila, sufrió la cuarta caída en el torneo y dejó pasar la chance de acercarse al líder River Plate.
El equipo de Ricardo Zielinski aprovechó las concesiones de su rival desde los doce pasos. Darío Herrera actuó perfectamente al sancionar la pena máxima, dado que en el primero no hubo dudas por la mano de Matias Ibacache y en el segundo fue para mirarlo con más detalles, pero fue penal.
Es que la pelota salió disparada hacia adelante, y eso se produjo porque hubo un “cortito” con la mano de Lucas Diarte, quien interpretó un gesto corporal voluntario. “Pasó algo que ya sabíamos íbamos a pasar, no sorprende. Herrera estuvo en el VAR en el clásico contra Racing y mandarlo acá fue un error”, expresó Vegetti luego del encuentro en declaraciones brindadas a ESPN.
“Nos hacemos cargo de lo nuestro. Lo tendríamos que haber ganado tranquilamente porque somos más equipo que ellos y no necesitamos que nos den un penal”, continuó el delantero en un tono fastidioso. Y concluyó: “Vinimos a otra cosa. Sabíamos que el empuje de la gente iba a ser clave y jugaron con eso, pero nos ganaron por penales. Fue medio raro”. Más allá de los reclamos del referente del combinado cordobés, el árbitro tomó las decisiones correctas.
Independiente, empujado por su gente, salió con todo y en los primeros minutos dispuso del remate del uruguayo Mateo Barcia, muy aplaudido por su entrega, que el arquero Nahuel Losada desvió al córner. La primera gran oportunidad del local la generó Alex Ibacache. El lateral chileno tocó la pelota con la mano y el árbitro Darío Herrera (silbado por los hinchas por su labor en el VAR durante el último clásico de Avellaneda) no dudó en sancionar la infracción.
Cauteruccio, con una buena definición, abrió el marcador y potenció la ilusión de la gente, que a esa altura no le importó la lluvia ni el frío. El grito del uruguayo dio fin a los 472 minutos de la valla invicta cordobesa.
Independiente, que no ganaba de local desde el 16 de octubre de 2022, explotó con el doblete de su delantero para su séptima conquista en el certamen, y se descargó luego de una semana especial.
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