La impactante volea desde afuera del área con la que Matías Suárez cerró la goleada de River Plate ante Gimnasia: la historia detrás de sus lágrimas

El delantero volvió a convertir tras 179 días con un remate excelso que bajó la persiana del triunfo del líder de la Liga Profesional

Guardar

La contra letal, a los 44 minutos del segundo tiempo, terminó en la red. Miguel Borja pivoteó y le lanzó de espaldas el balón a la carrera a Matías Suárez quien, en el borde del área, sobre el vértice izquierdo, dejó picar y sacó una impactante volea de zurda que vulneró al arquero Nelson Insfrán y se transformó en el 3-0 de River Plate ante Gimnasia La Plata, por la onceava fecha de la Liga Profesional. El estadio Monumental repleto sabía que estaba siendo testigo de un momento especial. Las lágrimas del autor de la conquista lo confirmaron.

El delantero, de 34 años, volvió a convertir tras 179 días de sequía. Su último gol había sido el 16 de octubre de 2022, en la derrota de su equipo 2-1 ante Rosario Central. En el medio, la lesión que hasta puso en duda su continuidad en la institución. Por eso, no pudo evitar emocionarse ante la alegría mientras sigue luchando para alcanzar su mejor forma física. Si hasta el club lo homenajeó en las redes con una imagen suya besándose el escudo. “Día internacional del beso”, fue la frase que acompañó la foto en la cuenta de Twitter del Millonario.

El cordobés había vuelto a jugar el pasado 20 de marzo, en ocasión de la victoria 2-0 ante Sarmiento. A los 37 minutos del segundo tiempo, ingresó por Ignacio Fernández ¿Cuál es la dolencia que lo postergó? Sufre una sinovitis en la rodilla derecha. La lesión le suele generar líquido en esa zona y eso le produce dolor. “Ahora está mucho mejor que en el arranque del año, pero hay días en los que convive con un nivel de molestia que por suerte es tolerable”, le dijo a Infobae un compañero de Suárez hace un mes. El futbolista tiene vínculo hasta 2024. Pero su futuro dependerá de su estado físico.

El reconicimiento de River a
El reconicimiento de River a Suárez

En el medio, Belgrano, el club que lo vio surgir, hizo el intento por repatriarlo. Suárez apostó por demostrar que podía seguir brillando en River. Martín Demichelis lo esperó y empezó a pagar la confianza con gritos. “Es muy lindo poder entrar a la cancha y devolver la confianza que me dan cada día. Uno lo trata de agradecer de alguna manera. En estos momentos, cuando uno marca, trata de devolverle ese cariño a la gente, que siempre me apoyó. Le debo mucho a este club y a esa gente por lo que me da cada día. Quise que se sintieran parte, también. Lo sentí así y me salió del corazón, se lo agredecí a la gente y me toqué el escudo”, explicó ya en los vestuarios.

“Hacer un gol es una sensación única, para mí como para cualquier delantero. Las veces que me toque jugar aportaré lo mejor para el equipo y mis compañeros. Siempre con mis compañeros, chicos y grandes, tenemos charlas y hablamos. A los más jóvenes les digo que sean lo más profesionales que puedan, para que el día de mañana no tengan problemas y jueguen. Yo siempre lo fui y me tocó lo de la rodilla, pero bueno, estas cosas pueden pasar. Siendo profesional tenés menos posibilidades de sufrir lesión”, añadió.

Lucas Beltrán abrió el marcador de penal. Rodrigo Aliendro, de cabeza, firmó el 2-0. Y Suárez redondeó una noche a pura emoción en un River que está cada vez más firme en la cima de la tabla de posiciones de la Liga Profesional, con 27 puntos, cuatro más que el escolta San Lorenzo.

Seguir leyendo:

Guardar