Sería demasiado afirmar que la negativa de Gerardo Martino fue un golpe imprevisto a las aspiraciones del Consejo de Fútbol de Boca Juniors. En Ezeiza no tenían dudas en que el Tata era el indicado para hacerse cargo de un plantel que necesita recuperar terreno cuanto antes en la Liga Profesional y está a punto de arrancar su periplo por la Libertadores. Sin embargo, es válido aseverar que ese Plan A que simbolizaba el rosarino estaba muy distante de las otras opciones.
No por nada Chicho Serna, tras confirmar oficialmente la salida de Hugo Ibarra, mencionó que “en un club como este no es fácil conseguir un cuerpo técnico. Necesitamos uno que se acomode a este plantel de futbolistas que tenemos. Estamos trabajando en las verdaderas opciones”. Para Juan Román Riquelme y compañía, la búsqueda de un entrenador no se basa en llenar el puesto que quedó vacante sino en convencerse de que el sustituto del Negro Ibarra va a estar a la altura. “No traerán por traer”.
Desde que Martino le advirtió al Consejo boquense que no iba a ser opción para el banquillo azul y oro, en el búnker de Ezeiza se tomaron unas horas para barajar y dar de nuevo. Puede que hayan existido algunos sondeos informales con los candidatos que andan dando vueltas, pero una fuente confiable le aseguró a Infobae que desde ayer no se entabló comunicación con ningún otro entrenador.
Quizás ya no sea novedad a esta altura que Diego Martínez, técnico de Tigre, es una de las debilidades que Riquelme. La buena relación entre las instituciones, sumada a la estrecha amistad que mantienen Román y Sergio Massa, hombre histórico en el Matador, puede acercar al estratega de 44 años que pasó por las inferiores de Boca y llevó al cuadro de Victoria a Primera. No obstante, la buena vibra que circula entre las partes no implica que Martínez sea liberado en el corto plazo (más aún teniendo en cuenta que Tigre debutará el próximo jueves por la Sudamericana ante San Pablo).
¿Entonces? En Boca seguramente especularán con el resultado y rendimiento del equipo mañana, durante la visita a Barracas Central por la novena fecha del campeonato (arrancará a las 15:30). Allí la lupa estará puesta sobre los jugadores, que no exhibieron su mejor nivel en las últimas presentaciones y se sienten en deuda con el hincha. Si el Xeneize saca un buen resultado frente al Guapo, el Consejo de Fútbol tomará aire y ganará tiempo para cerrar a un nuevo entrenador.
Lo concreto es que Herrón se hará cargo del plantel en los siguientes dos compromisos (también comandará en Venezuela el jueves que viene ante Monagas), por lo que si la directiva cierra a un DT recién debutará el domingo 9 de abril -desde las 21:30- ante Colón de Santa Fe en la Bombonera. Si los directivos ven que los jugadores aportan las respuestas que no hallaron en el último tramo del ciclo de Ibarra, no será descabellado pensar en la extensión del interinato del ex mediocampista de Argentinos Juniors y ayudante de campo de Miguel Ángel Russo y Sebastián Battaglia.
El Consejo de Fútbol pretende un nuevo entrenador, sí. Pero no a cualquiera ni tampoco a cualquier precio.
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