Rafael Di Zeo y Mauro Martín Lse están frotando las manos. Después que el mes pasado la Justicia los absolviera de las sendas causas judiciales que afrontaban, contaban los días para volver a a Bombonera. Y tal como había anticipado Infobae el 23 de febrero, ayer dieron el primer paso en el operativo retorno: presentaron sus recursos al Ministerio de Seguridad de la Nación para que los saquen del derecho de admisión al certificar que ninguno de los dos tiene procesos abiertos en Tribunales. Es más, fuentes de La Doce anticipan que habrá una bandera especial festejando el retorno de los jefes al lugar central de la segunda bandeja que da a Casa Amarilla. Pero sus situaciones no son similares y aunque pretenden estar ya mismo en lo que denominan el patio de su casa el próximo 19 de marzo cuando Boca vuelva a jugar de local en este caso ante Instituto de Córdoba, hay aún algunos caminos por explorar.
En la nota presentada por ambos, cada uno patrocinados por letrados diferentes, Diego Storto en el caso de Di Zeo y Rodrigo González en el de Mauro Martín, piden el levantamiento inmediato de la medida restrictiva que los aleja de los estadios argentinos desde marzo de 2016, cuando les fue impuesta la prohibición por quienes entonces manejaban la Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich como ministra y Guillermo Madero como jefe de Seguridad Deportiva. Ese impedimento se les renovó durante el mandato de Alberto Fernández como presidente que tuvo primero a Sabrina Frederic como ministra y después a Aníbal Fernández, cuyos asesores letrados lograron abortar un intento judicial de salir del derecho de admisión en septiembre de 2022, cuando un juez civil de primera instancia, Walter Lara Correa, había dicho contra toda la doctrina imperante que sólo el club podía ejercer la prohibición y la Cámara, tras la apelación del ministerio, confirmó que si tenían causas abiertas, el Gobierno estaba en facultad de decidir sobre ellos.
Claro que esa realidad se modificó. Primero cuando el 10 de febrero el fiscal Marcelo Colombo dijo no tener pruebas para acusar de encubrimiento agravado a Di Zeo, Martín y otros 10 barras y la jueza Sabrina Namer los sobreseyó. Después cuando el 26 de ese mismo mes el Tribunal Oral 13 absolvió a Di Zeo en el juicio por dos crímenes producidos en 2013 en el marco de la interna de la barra. Con esos argumentos se presentaron ante el Ministerio: señores, no tenemos causas, deben sacarnos del derecho de admisión. Para eso tomaron un antecedente de este mismo año: 39 hinchas de Vélez lograron salir de la lista negra cuando probaron que habían quedado fuera de la causa judicial donde estaban imputados por agresión en el partido de Copa Libertadores contra Talleres de Córdoba de agosto de 2022. Y desde el mes pasado volvieron a la cancha sin ningún problema. Y aunque éstos no sean famosos y Di Zeo y Martín sí, la ley debe ser pareja para todos.
Así las cosas, los jefes de La Doce fueron por todo. Pero siempre hay un pero. Legalmente la prohibición se les vence el 3 de abril. Según pudo averiguar Infobae de fuentes del Ministerio de Seguridad, la causa va a tener un trámite tan lento en el sector legales que recién saldría favorable oh casualidad el 4 de abril, cuando ya no haya motivos para renovarles una medida que lleva siete años. Pero eso en el caso de Mauro Martín y de los otros 10 barras de la cúpula que están con la restricción. Di Zeo, en cambio, quedó en manos del fiscal Aldo De la Fuente. ¿Por qué? Porque los fundamentos de su absolución en el juicio por los dos homicidios se conocerán recién el jueves 23. Y de ahí el fiscal tiene 10 días hábiles para apelar. Si no lo hace, Di Zeo quedará en condiciones de regresar a la cancha el 10 de abril dado que en el medio está semana santa. Pero si recurre el fallo ante la Cámara, se considerará que la sentencia no está firme y en el Ministerio le afirmaron a Infobae que se tomarán de ese argumento para no tener la foto del popular Rafa en el centro del paravalancha justo en un año electoral. Porque además la Cámara no suele dar su veredicto antes de los seis meses y generalmente lo hace en un plazo mucho mayor. ¿Qué hará el fiscal? El día que terminó el juicio le aseguró a este portal que iba a esperar los fundamentos pero que estaba convecido de apelar. Se verá.
En el medio de todo esto también juega Boca, que puede pedir que se les mantenga la restricción aún cuando no tengan causas judiciales por considerarlos hinchas no deseables, algo similar a lo que hace River con Los Borrachos del Tablón. Y si bien esto no parece probable, en el Ministerio le harán la consulta correspondiente a la institución para que sea Boca el que pague el costo de volver a tenerlos en la cancha. Después habrá que ver cómo justifican que pasan el filtro del 80 por ciento de presencias en los últimos partidos del equipo, requisito indispensable para entrar a la Bombonera. Alguien en el club ya deslizó que eso podría no contar para la cúpula de la barra porque si no estuvieron presentes fue por causas ajenas a su voluntad. Hecha la ley, hecha la trampa. Lo cierto es que el primer paso ya lo dieron: Di Zeo y Martín fueron al Ministerio. Y mientras se frotan las manos, se prueban el traje para volver a dirigir a La Doce desde su verdadero centro de poder: La Bombonera.
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