En el vuelo de Ezeiza a Emiratos Árabes que partió con dos planteles que competirán en horas por un título de copa nacional pudo haberse registrado algo de incomodidad. Por el inusual itinerario compartido entre jugadores de Boca y de Racing, pero también internamente en el Xeneize por la inclusión de quien hasta fines del año pasado ha sido una de las figuras del equipo. Agustín Rossi, integrado en la nómina de convocados, no será utilizado por Hugo Ibarra ante la Academia. Entonces, ¿por qué viajó para presenciar la Supercopa Internacional?
El cuerpo técnico comandado por Ibarra tiene claro -obviamente en consenso con el Consejo de Fútbol- que Rossi dejó de ser prioridad en el equipo desde que firmó su contrato con Flamengo de Brasil tras la negociación trunca por la renovación de su vínculo. Las asperezas que datan de hace largo rato no se llegaron a limar y el 1° de julio de 2023, el golero de 27 años quedará libre de acción para volar a Río de Janeiro y ponerse el buzo del Fla.
Así como el Consejo de Boca presionó a su representante con la contratación de Sergio Romero cuando todavía quedaba un año para resolver la continuidad de Rossi, también tuvo muy claro desde que se rompieron las tratativas que el guardameta salvapartidos iba a seguir entrenándose normalmente con el plantel profesional. Y es que existe un motivo legal que es el de permitirle desarrollar su trabajo normalmente hasta que acabe su vínculo. Después, las cuestiones tácticas y estratégicas, quedarán a cargo del técnico de turno.
Lo mismo había ocurrido con Pol Fernández (antes de su retorno desde Cruz Azul), Julio Buffarini, Sebastián Villa (cuando incumplió y se fue intempestivamente a Colombia) y Cristian Pavón, por citar a los casos más resonantes. La diferencia en este ámbito es con Agustín Almendra, quien ya firmó un preacuerdo con el Rayo Vallecano de España y también se marchará de la institución a partir de julio. “Lo de él es diferente porque insultó a un entrenador”, le advirtieron desde Ezeiza a Infobae.
El desplante de Almendra con Sebastián Battaglia a principios del año pasado no solo lo llevó a ser separado del plantel profesional, sino que prácticamente lo condujo a la puerta de salida. El diálogo por la renovación del contrato que expira el próximo 30 de junio no prosperó y así el ex Selección Sub 20 continuará entrenándose apartado del grupo.
Por el contrario, ni de parte de la directiva ni de ninguno de los cuerpos técnicos que lo dirigieron tuvieron quejas de Rossi. Más allá de las diferencias contractuales, lo consideran un profesional con todas las letras y es por eso que lo subieron al avión rumbo a Emiratos a pesar de que corre desde atrás con Chiquito Romero, Leandro Brey y Javier García. Sí, Ibarra concentró a cuatro arqueros para un partido que a lo sumo puede llegar a extenderse a 120 minutos si hay empate en tiempo reglamentario.
El ex Racing y selección argentina mostró solvencia y seguridad en la que fue su presentación en el arco azul y oro, en el amistoso frente a Everton de Chile (0-0): “Fue una buena decisión volver al fútbol argentino. El club es espectacular. Trabajando semana a semana, día a día, las cosas van a salir bien. Esperamos empezar de la mejor manera”. Y además, le hizo un guiño al Consejo de Fútbol por la paciencia que le tuvo para recuperarse de la lesión que le impidió debutar en 2022: “Me dieron tranquilidad, que me ponga bien. Nadie me apuraba. Román, Cascini, el Chelo, el Patrón en su momento cuando se enteraron cuando se me soltó un pedacito de cartílago. Estoy contento, el trato fue espectacular desde que llegué”.
A partir de ahora, Rossi será utilizado de rueda de auxilio. Correrá de atrás en la consideración del DT, pero trabajará con el resto de sus compañeros y solamente será requerido en caso de urgencia. La era de Romero acaba de iniciarse y sus resguardos serán la experiencia de Javier García y la proyección de Leandro Brey.
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