Erling Haaland ha dejado de ser una promesa y a los 22 años se ha transformado en una realidad. El delantero noruego está nominado a mejor futbolista en los premios The Best de FIFA y desde su arribo a la Premier League ha demostrado que sus grandes actuaciones en la Bundesliga y en la liga de Austria no eran una casualidad. Ahora, en una profunda entrevista, el artillero desnuda todos sus secretos.
Su 1,94 de altura, velocidad y capacidad goleadora lo han convertido en foco de atención de la prensa y de las redes sociales muy rápidamente, incluso antes que de los grandes clubes se fijaran en él. Pero, el momento en el que él se dio cuenta de que se había transformado en un jugador de elite fue en septiembre de 2019 cuando jugando para el RB Salzburg le marcó tres goles en el primer tiempo al Genk en la UEFA Champions League.
“Fue una noche loquísima”, recordó Haaland en diálogo con la revista GQ. “Después de jugar pensaba, ‘¿y ahora qué?’ No puedo parar ahora. La gente ha empezado a fijarse en mí, tengo que estar a la altura”. Y no paró.
Es es para ese entonces, Erling tenía 19 años y hacía mucho tiempo que se venía preparando para ese momento. Hijo de Gry Marita Braut, excampeona de heptatlón, y de Alfie Haaland, ex futbolista noruego que defendió los colores del Nottingham Forest, Leeds United y Manchester City en Inglaterra, el joven noruego parecía estar destinado a triunfar. Por eso, desde niño trabajó para eso.
Alf Ingve Berntsen, quien se desempeñó como director técnico del Bryne FK del país nórdico y entrenó a Haaland en las categorías inferiores, contó en el mismo artículo que su mayor cualidad en aquel entonces era su velocidad y su inteligencia: “Jugaba contra dos centrales que eran fuertes y rápidos, así que tenía que ser listo con sus movimientos, o de lo contrario se lo habrían comido”. Incluso, el propio futbolista sostiene que en la actualidad sigue realizando las mismas maniobras: “Intento hacer lo mismo que cuando tenía 13 años y jugaba en mi ciudad. Hago exactamente los mismos sprints. Si te enseño vídeos de cuando tenía 13 años, verás exactamente lo mismo”.
Aunque hoy en día es difícil de creer, hubo un tiempo en el que el físico del pequeño Erling era un problema, porque tardó en pegar el estirón y era uno de los jugadores más pequeños de su equipo: “Nos dimos cuenta de que Erling era muy bueno con lo técnico, lo táctico y lo mental, así que la parte que le faltaba a los 13 o 14 años era la física”, contó Berntsen en diálogo con GQ. “Cuando estaba deprimido, se lo decía una y otra vez. ‘Ten paciencia, en cuatro o cinco años, serás más grande y fuerte que ellos. Relájate”. Y así fue.
Hoy en día Haaland es uno de los goleadores más temidos del planeta, pese a que tiene apenas 22 años. Y entre sus grandes cualidades, además de su velocidad y potencia, se encuentra su cabezazo, algo que increíblemente desarrolló demasiado tarde, cuando ya era profesional en el Molde. Allí fue dirigido nada menos que por el ex Manchester United Ole Gunnar Solskjaer quien le propuso un plan de dos años para mejorar su testazo.
“Creo que lo primero que me dijo fue ‘No tienes ni idea de cómo se remata de cabeza. Tenemos que trabajar en eso’”, recordó Haaland. “Eso es lo que hicimos durante dos años, el tiempo que estuve en el Molde. Y fue algo positivo, porque no sabía golpear el balón, y ahora marco goles rematando de cabeza. Gracias a ellos”.
En las redes sociales, han tildado al rubio de 1,94 de cyborg o androide (aunque él elige ignorar todos esos motes, pese a que le parecen divertidos) y como toda maquina, necesita apagarse. Es por eso que ha implementado un método para poder descansar en paz y abstraerse de la realidad. Su padre aseguró que a su hijo “le interesa mucho todo lo que le ayuda a mejorar, incluso en lo que no tiene nada que ver con el fútbol”, y así ha optado por utilizar lentes antiluz azul, para evitar que las pantallas le arruinen el sueño, o incluso por la noche desconecta el Wi-Fi.
“Me preocupa mucho dormir bien. Creo que para mí lo más importante en la vida es dormir. No solo dormir mucho, sino dormir bien”, explicó el goleador del Manchester City cuyo festejo tradicional después de marcar un gol es colocarse en la postura del loto y cerrar los ojos como si estuviese meditando. Con respecto a esto, explicó que siempre busca “relajarse, intentar no pensar demasiado”. “El estrés no es bueno para nadie. Odio estar estresado, y procuro no llegar a ese punto. Pero el concepto de meditación radica en apartar ese tipo de pensamientos. Es algo personal, pero a mí me ha funcionado muy bien”. Incluso, Haaland reveló que los días anteriores a cada partido intenta no pensar en absoluto en el juego, para así poder descansar y llegar de la mejor manera al encuentro.
Con 22 años, el noruego ya está nominado como mejor futbolista de 2022 a los premios The Best de FIFA, pero su gran objetivo es ganar la Champions League con Manchester City y poder clasificarse a un Mundial con Noruega, una selección menor que ahora cuenta con una camada de jóvenes que buscará meterse en la cita de 2026, a celebrarse en México, Estados Unidos y Canadá.
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