Lewis Hamilton cerró una temporada para el olvido en la Fórmula 1. Nunca logró pelear por su octavo título frente al campeón Max Verstappen y el piloto de Mercedes inició un viaje para renovar energías, con el foco puesto en la primera carrera del 5 de marzo en Bahréin. Esta excursión lo trajo a la Argentina y Chile, pero su destino final será la Antártida para darle la bienvenida al 2023 a bordo de un crucero privado que lo llevará a ese continente.
El británico de 37 años sorprendió a todos cuando realizó distintas publicaciones en su cuenta oficial de Instagram con videos de su estadía en el país corriendo por los alrededores de la escalinata hacia la Facultad de Derecho, ubicada en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Las imágenes visualizaban a Hamilton con un pañuelo en su cabeza, además de portar unos lentes que tapaban gran parte de su rostro para pasar desapercibido. “Primera vez en Argentina, hermoso lugar”, fue el mensaje que escribió desde sus stories para mostrar este paso relámpago por el país.
Su llegada pudo haber sucedido semanas atrás con motivo del homenaje realizado a Juan Manuel Fangio, pero el calendario ajustado en los últimos días de competencia impidió su presencia. “Hicimos un video, hay un saludo muy especial a este evento de Lewis Hamilton, pero tiene una agenda muy complicada, el campeonato, México, Brasil, la próxima fecha, por lo cual son deportistas de alta performance. Hubiese querido estar porque es un gran admirador de Fangio y lo sé personalmente, pero lamentablemente por un tema de agenda no pudo estar acá”, explicó por entonces el CEO de Mercedes-Benz Argentina, César Mantilla, sobre las razones por las que no vino.
Su recorrida lo llevó por distintos puntos icónicos de la Capital Federal como la Floralis Genérica, la escultura construida por el artista Eduardo Catalano que está a metros de la universidad en el barrio porteño de Recoleta. Los posteos que realizó en su perfil contaron con imágenes de los Bosques de Palermo, mientras contemplaba el horizonte en medio de una calurosa Buenos Aires. Esta visita finalizó en las últimas horas porque el heptacampeón del mundo de Fórmula 1 recaló en el aeropuerto chileno de la ciudad austral Punta Arenas para iniciar su travesía hacía la Antártida.
El piloto abordaría un crucero privado, que resguardará su privacidad y la de todos los tripulantes de la embarcación. El mejor momento para realizar este viaje es entre noviembre y marzo por las temperaturas amenas que se exhiben en esta época del año dentro de ese territorio, pero los costos son un privilegio que pueden afrontar pocas personas. Los valores parten de una base estipulada en los USD 6.400 para estadías que van de 12 a 15 días, pero pueden aumentar a USD 18.000 a cambio de 35 jornadas.
Su llegada se dio en un marco turístico porque Hamilton nunca corrió en el país. Tenía solamente 13 años cuando se largó el último Gran Premio de Fórmula 1 disputado en el Autódromo Oscar y Alfredo Gálvez en 1998. El ganador de esa carrera fue el alemán Michael Schumacher, con Ferrari, con quien comparte el cetro de máximo campeón de la categoría con 7 títulos cada uno.
Horas antes de estas publicaciones, se sumó a los mensajes que dieron decenas de personalidades mundiales por el fallecimiento de Pelé a los 82 años en San Pablo, a causa de un avanzado cáncer de colon. “Hoy perdí una leyenda. Gracias por compartir tu talento. El legado de Pelé nos inspirará por siempre y para siempre”, escribió junto a una imagen que tenía al astro con las tres Copas del Mundo ganadas con Brasil.
Pero no fue el único piloto que recorrió la Argentina recientemente, porque su excompañero en Mercedes, Valtteri Bottas, llegó en la antesala al Gran Premio de Brasil disputado en noviembre pasado. El finlandés había contado detalles de su arribo a Mendoza: “Estoy acá por el malbec”.
“El domingo después de México, volé a Mendoza y exploré un poco. Disfruté de los vinos, bodegas muy hermosas. Y también están los Andes, obviamente al lado de Mendoza, la gran cadena montañosa, que es impresionante y también tuve un poco de caminata allí”, contó el nórdico, quien se mostró en el Valle de Uco y visitó la bodega Pulenta Estate en Luján de Cuyo junto a su su pareja, la ciclista olímpica australiana, Tiffany Cromwell.
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