La histórica clasificación de Marruecos para semifinales del Mundial de Qatar fue festejada por miles de personas en el sector de los Campos Elíseos de París, donde hubo diversos incidentes que se saldaron con decenas personas arrestadas, según el último balance de la Policía.
Un fuerte dispositivo policial con 1.220 agentes fue desplegado en la zona con motivo de los dos partidos de cuartos final de este sábado, entre Marruecos y Portugal y Francia contra Inglaterra.
Marruecos venció a Portugal y se convirtió en el primer país africano que alcanza las semifinales de un Mundial de fútbol, donde se medirá contra Francia, que busca su segunda final consecutiva.
Poco después de la victoria de los franceses ante Inglaterra (2-1), los aficionados, con banderas francesas y marroquíes, se encontraron en la larga avenida de los Campos Elíseos de París, haciendo sonar los cláxones de los coches y lanzando cánticos de alegría. Según la prefectura de policía de París, unas 20.000 personas se congregaron en los Campos Elíseos.
Los festejos iniciales dieron lugar a algunos disturbios, como la quema de dos motos en las calles adyacentes a la turística avenida de los Campos Elíseos.
A ambos lados de la avenida y en los cruces de calles había desplegadas fuerzas del orden, con cascos y escudos antidisturbios
A pesar del ambiente festivo, “al final de la noche, sobre las 22.30, grupos hostiles buscaron el enfrentamiento con las fuerzas del orden, que los dispersaron sistemáticamente”, dijo a la AFP la prefectura. En tanto, algunos videos muestran a los agentes dispersar a manifestantes que celebraban sin violencia.
Hacia medianoche se habían producido “74 detenciones”, principalmente por lanzamientos de fuegos de artificio y proyectiles, y se había dispersado toda la multitud con el uso de gases lacrimógenos.
Imágenes de Reuters TV mostraron a gente destrozando fachadas de tiendas y peleas con la policía. También pudieron verse algunos incendios en la avenida de Friedland, cerca de los Campos Elíseos.
Las celebraciones continuaron por todas partes a pesar de las nubes de gas lacrimógeno que flotaban con frecuencia entre el tráfico y la multitud eufórica.
Expectativa por la semifinal
El cruce del miércoles “será como si mi padre jugara contra mi madre”, decía satisfecha Lilia, una franco-marroquí de 36 años que se unió a la fiesta de sus “dos equipos”.
“No esperábamos esta victoria (marroquí). Todo el mundo está orgulloso: he visto banderas argelinas, egipcias... ¡Es normal, es la primera vez!”, decía Amel Abdeljalil, de 28 años, desabrochándose la chaqueta para mostrar su camiseta.
Los Leones del Atlas son efectivamente el primer combinado nacional africano en alcanzar las semifinales de un Mundial, tras los intentos fallidos de Camerún en 1990, Senegal en 2002 y Ghana en 2010.
Llegado con su nieto para festejar la victoria francesa y con la bandera tricolor en el bolsillo de su abrigo, Jean Barbier, de 67 años, se va cruzando con quienes serán sus próximos rivales.
Pero el miércoles ya habrá tiempo para la rivalidad. De momento, mientras se acerca al Arco del Triunfo, los aficionados rivales chocan amistosamente la mano de su nieto.
(Con información de AFP, EFE, Reuters)
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