La verdad detrás de la región de India que se proclama maradoniana y fanatiza por Argentina: “No tienen ni idea de lo locos que estamos”

La clasificación mundial de la FIFA ordena, desde agosto de 1993, a las 211 selecciones afiliadas en el ente rector del fútbol profesional. La lista comienza con la mejor y cierra con la peor: el ranking obedece a un algoritmo que se sostiene en una ecuación matemática que mide resultados, competiciones y disparidades en el enfrentamiento. La lidera Brasil con vigencia desde el 31 de marzo de 2022. La termina San Marino, ininterrumpidamente desde el 16 de septiembre de 2021. En la mitad del último ordenamiento, en el puesto 106, está la India.

“Por supuesto que somos hinchas de la selección india de fútbol, pero si nos preguntan cuál es nuestra selección favorita decimos Argentina. Así que aún dudamos de lo que haríamos si en el futuro se produjera un partido entre Argentina e India”. Los que hablan son Muhammed Anees y Sajeesh Mohan, nacidos hace 32 y 28 años en Kerala, un estado bañado por el mar Arábigo en el extremo suroccidental de la India. No habían nacido cuando su selección favorita y la selección de su país compitieron por única vez en la historia: fue 1 a 0 para Argentina con gol de Ricardo Gareca a los 79 minutos el 14 de enero de 1984 en el marco de la tercera edición de la Copa Nehru.

El ciclo de Carlos Salvador Bilardo al frente de la selección argentina tenía apenas diez meses de vida: había nacido el 12 de marzo de 1983 en un empate 2 a 2 ante Chile. La era que se coronó tres años después es el embrión de un fanatismo extrapolado, síntoma de una globalización precoz. Todo radica ahí, todo se explica ahí: en ese año, en esa cita, en esa obra. Que haya indios o bangladesíes devotos de la selección argentina tiene la raíz en la simbiosis que engendraron Diego Maradona y el estadio Azteca. El resto fue contagio.

Los primeros televisores en blanco y negro que se democratizaron en el sur asiático enseñaron la historia, la aventura y la epopeya de un futbolista de origen humilde capaz de hacer feliz a un pueblo. A más de un pueblo. La performance individual más sublime en una Copa del Mundo fue uno de los primeros documentos fílmicos que sintonizaron los hogares pobres de la India. Significó una revelación, una epifanía, el descubrimiento de algo mágico. Ese manifiesto futbolístico se vio potenciado por las condiciones de la gesta: el derrotado fue Inglaterra, nación que sostuvo su dominio imperialista en India desde comienzos del siglo XIX hasta 1947, cuando los movimientos independentistas de las colonias británicas aprovecharon la atención bélica en la Segunda Guerra Mundial para rebelarse.

“Nuestro amor por Argentina comenzó alrededor de 1986. Una generación anterior vio la carrera soñada de Maradona contra Inglaterra en el ‘86 en televisores en blanco y negro. A partir de ahí, empezó todo”, precisan. Todo es lo que se ve, lo que se percibe y lo que se contabiliza. Muhammed y Sajeesh nunca se vieron en persona. En Kerala viven más de treinta millones de personas. Junto a otros veinte miembros distribuidos por la provincia administran un grupo que se llama “Argentina Fans Kerala”, con 280 mil seguidores en Facebook y 250 mil en Instagram. Desde ahí coordinan y organizan la masividad de un fervor nacionalizado: cientos de miles de fanáticos se juntan a ver los partidos de Argentina, fabrican monumentos gigantes de Messi, decoran las calles con referencias celestes y blancas, visten los caminos con gigantografías de futbolistas nacidos 16 mil kilómetros al oeste.

Zainab Jahsh tiene un año y sonríe cuando elige, entre la ropa colgada del tender, la camiseta de Argentina con la 10 de Messi en la espalda. Agarra la suya y la de su hermana y las abraza. Su madre, Ami Mehar, le dice que todavía están húmedas. La niña llora y vuelve a calmarse cuando las aprieta. El video está subido en las redes sociales de los fanáticos argentinos oriundos de Kerala. Es una hendija para visualizar el fanatismo. Las otras publicaciones enseñan la magnitud de la veneración: la información relacionada a la selección se mezcla entre videos de celebraciones, de tributos, de homenajes. Hay gente autoconvocada, hay autos y casas pintadas, hay calles ambientadas, hay niños disfrazados de futbolistas argentinos, hay murales y gigantografías. Hay casamientos con novios e invitados vestidos con remeras de Messi, hay una canción del artista local Sadique Pandallur tributo a la selección argentina.

Pero por qué, cómo, cuál es el sentido, la naturaleza, qué pasó para que personas criadas en un estado costero de la India vibren por el país más austral del mundo. El diálogo fluye en los intercambios de emails. Las respuestas las escribió uno y las aprobaron todos. No es la voz de una persona, sino el clamor de muchos. El entusiasmo por la selección nacional se percibe también por correo electrónico y Whatsapp. Las palabras parecen amontonarse en el relato. El largo de las contestaciones son las evidencias de un cariño vertiginoso.

-¿Por qué hay gente en India que quiere que Argentina gane un partido de fútbol?

-¿Por dónde deberíamos empezar? ¿Por Mario Kempes o por el eterno Diego Maradona? Los indios siempre hemos sido entusiastas del deporte y, cuando se trata de fútbol, estamos locos, especialmente la gente de estados como Kerala, Goa y Bengala Occidental. En nuestro país todavía hay ancianos que vieron a Maradona en sus mejores momentos y son hinchas acérrimos de Argentina. La generación actual creció con las impresionantes historias de la Albiceleste de 1986 y las deslumbrantes emociones del fútbol latinoamericano.

Messi tomó la batuta y contagió mucho más el amor argentino en las nuevas generaciones. Incluso los que luchamos contra la depresión nos emocionamos y volvemos a la vida cuando vemos a Lionel Messi y la Albiceleste en la cancha. Es un amor indefinible a través de las fronteras y, como todos sabemos, el fútbol no conoce fronteras. Los indios somos tan apasionados por el fútbol como los argentinos. Quizá por eso nos llevamos tan bien y clamamos por la misma camiseta y la misma gloria.

Pasaron 36 años desde que Argentina ganó una Copa del Mundo. Eso es mucho tiempo y ahora sabemos cómo se siente ser campeones después de la Copa América 2021. Todos queremos volver a vivir el mismo éxtasis. Y tiene que ser Messi, porque no hemos oído ni visto a ningún otro jugador que merezca el título como él en nuestros tiempos. La copa más importante del mundo debe ser besada por el hombre que cura millones de corazones con la pelota.

-¿Cómo nace ese fanatismo por Argentina? ¿Cómo influyen Maradona y Messi en este apoyo?

-De las historias que se han transmitido de generación en generación. Kempes, Passerella, Ruggeri, Batistuta, Caniggia, Ortega, Riquelme. La lista continúa y la generación actual tomó el legado al pie de la letra e inició su apoyo con Messi en la cabeza. Messi es un salvavidas para la nueva generación. Sus toques mágicos y sus goles orgásmicos nos han ayudado a la mayoría de nosotros a superar los momentos más difíciles de nuestras vidas. La generación de más edad solía escuchar los comentarios por radio y ver los Mundiales en televisores en blanco y negro en los años 80, y hoy en día hemos avanzado mucho e incluso podemos ver todos los partidos de liga en nuestros teléfonos. El fútbol ya forma parte de nuestra vida y la selección argentina es como una familia.

El legado de Maradona ha creado aquí una generación apasionada y desde entonces la gente cree que el fútbol es más que un deporte. No solo la increíble carrera de Diego en la Copa del Mundo y en Nápoles, sino también su estilo de vida revolucionario ha inspirado a la gente aquí. En muchas personas mayores de los diversos rincones de Kerala continúa siendo un ídolo o un dios. Y cuando Batigol, Riquelme, Tevez y Messi tomaron la posta, una nueva generación esperaba la gloria de la Albiceleste. El fútbol y Argentina ya forman parte de nuestro aliento y, en concreto, Messi y esta nueva selección de Scaloni son nuestra terapia. La gente necesita algo en lo que fijarse cuando pierde la paz interior. Y Messi es un placer de ver y adorar, algo que nos hace avanzar y nos hace creer en nosotros mismos sin importar lo difícil que se pongan las cosas.

-Dijiste que el estilo de vida revolucionario de Maradona inspiró a la gente de la India, ¿cuánto influyen sus goles en cuartos de final de México ‘86, el colonialismo británico y la rivalidad con Inglaterra?

-Maradona siempre ha sido un símbolo de rebeldía contra la aristocracia del fútbol. De Argentina a Nápoles, lideró la revolución y consiguió representar la victoria de los “pobres” contra los ricos. India fue un país colonizado por los británicos y en los años 80 el odio hacia Gran Bretaña aún era palpable en la generación de nuestros antepasados. La generación joven de la India, ya inspirada por Maradona y Kempes, quería que Diego venciera a Inglaterra a cualquier precio. Los hinchas argentinos indios celebraron la Mano de Dios de Maradona y su gol del siglo como la mejor respuesta a la serie de injusticias históricas de Gran Bretaña, de las que nunca se arrepintieron. Esto también convirtió a Maradona en un símbolo del guerrero en los corazones de la gente. La magia de Maradona puede haber representado o no la furia de la Guerra de las Malvinas, pero su imagen cambió por completo, pasando de ser un súper talentoso joven de 25 años a un superhéroe que salva a millones de personas en todo el mundo que claman justicia, también en la India desde aquel partido de cuartos de final de 1986.

En cuanto al estilo de vida, intentamos reforzar nuestro amor por el estilo de vida futbolístico de Maradona más que por su persona. Motivó a una pequeña ciudad como Nápoles y a su gente, que luchaba contra toda la discriminación, y los llevó de la suciedad a la gloria. Volvió para Argentina cuando el equipo lo necesitó, incluso cuando estaba fuera de forma para el Mundial del 94. Utilizó su imagen de ícono del fútbol para difundir el amor por todo el mundo y defendió la humanidad y el antiimperialismo. Los indios siempre han amado a los íconos revolucionarios y a la gente que se opone al imperialismo. Y cuando esto lo hace un dios del fútbol, es obvio cuánto ha contribuido al amor argentino en la India. Maradona representaba la revolución, el sacrificio, la justicia, los pobres, la sociedad trabajadora, la guerra y el amor propio. Incluso los carteles de Diego fumando puros y sus peinados inspiraron a la generación más joven. Su actitud decidida y su sobrecogedor amor por la nación y los oprimidos pueden haber motivado a generaciones en la India, quizá más que algunos iconos políticos.

-¿Argentina es, entonces, un refugio de alegría para la gente vulnerable de Kerala?

-Este mundo es todo caos y problemas. El fútbol es lo que creo que podría salvarnos de este dilema mental. Incluso después de años de amor incondicional, somos conscientes de la preocupación que supone el hecho de que Argentina no haya ganado un Mundial desde 1986. Eso nunca mermó en nosotros el amor por el fútbol argentino. Somos parte de la familia albiceleste.

Desde el COVID-19, el mundo sufre sobre todo de salud mental. Ver a Messi y al resto de los jugadores argentinos rendir al máximo en los partidos nos permite dormir tranquilos. Messi ha pasado por los momentos más difíciles de su vida y, sin embargo, ha conseguido resurgir de sus cenizas y llevar a nuestra querida Argentina a la gloria. Es un modelo para los jóvenes de todo el mundo, incluidos nosotros. Encarna la famosa frase “no se trata de que te derriben, sino de que te vuelvas a levantar”. Messi es esperanza y Argentina es fe.

La mayoría de nosotros creemos que el fútbol nos da algo de felicidad cuando la vida se pone más dura. Eso es lo que todos esperábamos hasta la Copa América. Messi nos hizo creer que la esperanza es algo bueno y que nada bueno muere nunca. Por eso los pobres, los tristes y los débiles esperan que traiga la gloria a Argentina, incluso aquí, en Kerala y en la India.

-Pero, ¿por qué Argentina y no otros países? ¿Hay en la India un apoyo masivo a otras selecciones?

-Por supuesto. India es una nación enorme con una gran diversidad. Aunque el críquet es el deporte principal aquí, el fútbol ha ganado mucha popularidad a lo largo de los años, especialmente después de 1986. La Superliga india es el ejemplo más reciente de ello. El objetivo de la Superliga india es promover el fútbol en la India y aprovechar la enorme afición por el fútbol para fortalecer el fútbol nacional indio. También tenemos muchos seguidores de otras selecciones nacionales, como Brasil, Alemania, Francia y, sobre todo, España e Inglaterra, porque aquí en la India hay una gran afición a la Premier League inglesa y a la La Liga. Pero ninguno puede igualar a la afición argentina.

Nuestro amor por Argentina comenzó alrededor de 1986. Una generación anterior vio la carrera soñada de Maradona en el ‘86 en televisores en blanco y negro. Todo esto ha hecho que la gente de Kerala y de la India apoye a Argentina. Jugadores como Maradona, Burruchaga, Goycochea, Batistuta o Crespo han inspirado a los aficionados indios durante décadas. Y la pasión que estos jugadores argentinos sienten por el fútbol es asombrosa y emocionante, independientemente de los resultados. No hemos visto eso en ningún otro país o selección. Esa es la razón por la que amamos a Argentina más que a ninguna otra cosa. Porque los indios son tan emocionales como los latinoamericanos cuando se trata de deportes. Somos reactivos y revolucionarios. Y cada vez que vemos a los jugadores argentinos con su selección, sentimos que juegan por pasión y amor, no por dinero o fama.

Desde la era Messi, el amor por Argentina ha aumentado. Este pequeño mago lleva más de 15 años motivándonos. Así que nunca tuvimos que dudar de nuestro amor por la Albiceleste y la selección argentina ya se ha convertido en parte de nuestra vida. Un punto en común que pude notar entre India y Argentina son los problemas políticos y sociales. En medio de este caos, el fútbol ha sido la principal fuente de alegría y motivación para la mayoría de los jóvenes. Tal vez por eso el amor por Argentina y el fútbol crea una hermosa e invisible conexión entre ambas naciones. Puede que le sorprenda, pero lo cierto es que los aficionados argentinos de la India aman a la selección argentina y a Messi tanto como los propios argentinos.

-¿Cómo se organizan para ver los partidos de Argentina?

-No tienen ni idea de lo locos que estamos por la selección argentina. Creemos que las tiendas de deportes indias ganan la mayor parte de su dinero vendiendo camisetas y banderas argentinas. Comunidades como Argentina Fans Kerala y Messi Fans Kerala celebran reuniones cuando se acerca un partido importante. Nosotros (Argentina Fans Kerala) tenemos alrededor de 40 grupos de fans totalmente activos con un panel de administración detrás de nuestras páginas en redes sociales. Nuestras páginas de Facebook e Instagram suman más de medio millón de seguidores. Nos gusta el fútbol y queremos la unidad entre nuestros hinchas. Durante los Mundiales y la Copa América, decoramos nuestros pueblos y aldeas con recortes gigantes de Messi y banderas argentinas. Si un turista visitara nuestras calles durante estas fechas, podría dudar de que se tratara de una calle latinoamericana.

Hacemos concentraciones en playas o plazas donde mucha gente reunimos a mucha gente. Messi es algo más que un ídolo para casi todos nosotros. Crecimos escuchando los relatos de la generación de nuestros padres, sentados frente a la radio para oír los comentarios futbolísticos, y en esta época moderna les agradecemos que nos hayan inculcado esta pasión por este deporte..

-¿Cómo se preparan para el partido contra Países Bajos?

-Depende. La gente mayor prefiere ver la tele en casa, pero la mayoría de los jóvenes van a los parques o restaurantes comunes donde hay una gran pantalla para ver los partidos. Aquí, en Kerala, hay pantallas y proyectores en cada pueblo para ver los partidos de la Copa del Mundo. La gente se reúne con banderas, camisetas e incluso comidas para el almuerzo y la cena. A todos nos encanta este ambiente de celebración y es una experiencia inexplicable cuando juega Argentina.

El corazón late más rápido, pero está lleno de emoción y alegría. Estamos preparados para Países Bajos, un país con tanta herencia futbolística y algunos nuevos talentos asombrosos. Pero creemos en nuestros muchachos. Licha, Cuti, Enzo y todos los demás parecen muy motivados tras el partido contra México, y esperamos que Scaloni tenga alguna estrategia para superar a Países Bajos en el gran día. Cada rincón de Kerala estará cubierto de camisetas celestes y banderas albicelestes. Desde la perspectiva de un helicóptero, parecerá un océano de camisetas argentinas. Incluso en medio de la tensión, no perderemos la esperanza y ya hemos decidido celebrar el día como estamos acostumbrados, al margen de las preocupaciones por el resultado. Sólo hay un Mundial en cuatro años.

-¿Vieron las celebraciones en Bangladesh e Indonesia? ¿Cómo se explica tanto amor por Argentina estando tan lejos?

-Sí, Bangladesh e Indonesia también colman de amor por Messi y Argentina. Nos gusta ver eso porque todos pertenecemos a la misma familia y esperamos la misma gloria. Si quiere que le expliquemos la razón de este amor mundial, la palabra es “Messi”. Argentina ya no es un equipo que dependa de Messi. Las estrategias y la confianza de Scaloni han dado forma a un equipo argentino fuerte, con algunos talentos impresionantes como De Paul y Emiliano Martínez. Así que todos sabemos que este equipo puede hacer algo por Leo Messi, y la Copa América fue sólo el principio. Si el equipo que le rodea juega bien, Leo Messi podría obrar un milagro como el que vimos en La Finalissima. Y si Leo Messi está en el campo de fútbol, ¿qué más necesitamos? Como dijo Peter Drury (comentarista británico): “Disfruten de él mientras esté ahí”.

¿Con qué frecuencia produce el mundo un talento o, digamos, “un ser humano” como Lionel Messi? Rara vez. Es una gran persona, muy humilde y con un talento excepcional. Es el mejor de todos los tiempos. Todos queremos que Leo Messi gane este Mundial porque será el último. Estamos a punto de perdernos una de las más bellas fuentes de felicidad, así que ¡por qué no derramar todas nuestras bendiciones y nuestro amor por él y por su equipo!

No sabemos si Messi tendrá la suerte de ganar el Mundial. Ni siquiera estamos completamente seguros de que lleguemos a la fase final. Pero si nos preguntan qué significan “Messi” y “Argentina” para nosotros en la vida, es algo que va más allá de los goles y las asistencias. Tal vez algo que nos hace sonreír y avanzar en nuestras vidas. Algo misterioso, indefinible. Llamemos de momento a esta palabra “esperanza”. Y eso debería dar la gloria a la Albiceleste. Creemos en Scaloni. ¡Vamos Argentina!

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