La resistencia de Marruecos a lo largo de los 120 minutos valió la pena. La última selección africana en carrera en el Mundial Qatar 2022 planteó una táctica defensiva para resistir la posesión de España y llegar a la definición por penales, en la que sacó a relucir toda su jerarquía individual. Con dos atajadas de Bono y un exquisito cierre por parte de Achraf Hakimi, los dirigidos por Walid Regragui rompieron su barrera histórica en una Copa del Mundo y ya esperan en cuartos de final al ganador entre Portugal y Suiza.
Romain Saiss ganó el sorteo liderado por Fernando Rapallini y seleccionó patear primero. Abdelhamid Sabiri se acercó al arco defendido por Unai Simón y abrió su pie derecho para estrenar la cuenta a favor del combinado africano. La Roja eligió a Pablo Sarabia para igualar el marcador pero su remate se estampó en la base del palo izquierdo y Marruecos tomó una ventaja temprana. Hakim Ziyech fue a lo seguro con un zurdazo fuerte al medio y puso el 2-0 que presionó a España.
Yassine Bounou, guardameta del Sevilla, sacó a relucir toda su experiencia y bloqueó el disparo de Carlos Soler. Badr Benoun tuvo la oportunidad de hundir al conjunto europeo, pero el golero del Athletic de Bilbao adivinó sus intenciones para mantener la diferencia. Sin embargo, Sergio Busquets cruzó su definición con poca potencia y una vez más Bono se convirtió en héroe para darle a su país la posibilidad de hacer historia con el pase a los cuartos de final de la Copa del Mundo.
Si alguien estaba destinado a escribir la página dorada en el combinado marroquí, ese era Achraf Hakimi. El lateral del París Saint Germain fue una pieza fundamental en todo el proceso y realizó la caminata hacia el punto del penal con hambre de gloria: miró al arquero español y picó sutilmente su remate para meter a su nación entre las mejores ocho del planeta. Además, se dio vuelta y realizó un festejo en forma de pingüino para dedicárselo a su mejor amigo, Kylian Mbappé.
Las lágrimas se hicieron visibles tanto en el campo de juego como en las tribunas. Los españoles, por nuevamente quedar eliminados de un Mundial de manera temprana a través de una definición por penales, al igual que en Rusia 2018, y los de Marruecos por seguir vivos en el máximo evento del fútbol. El combinado africano buscará seguir haciendo historia contra el seleccionado europeo que le toque enfrentar en cuartos de final.
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