Cada cuatro años, el mundo se detiene. El fútbol pasa a ser el centro de todo. Los mundiales rigen el calendario interno de millones de personas en todo el planeta. Hay muchos momentos eternos. Grandes partidos, emociones extremas, derrotas que provocan un dolor insoportable, hechos insólitos e increíbles. Esta es una lista, que pretende ser un muestrario, de tantos posibles, un juego para que el lector disfrute y también para que discuta y arme su propio ranking.
40.- Brasil 1- Suecia 1. Argentina 1978
Ese equipo de Brasil, el del 78, no era un gran equipo. Le faltaban –como a todo el Mundial- grandes estrellas. Sólo Rivelino pero estaba cansado y sentado en el banco. De todas maneras, tenía sus cracks: Dirceu, Zico y Nelinho los más evidentes. El debut fue contra Suecia, en especial contra su gran arquero, Ronnie Hellstrom. Los escandinavos complicaron a los brasileños. Se pusieron en ventaja y Brasil recién empató al final del primer tiempo: a los 45 minutos 40 segundos. Ese dato tendrá su importancia. El segundo tiempo intentó ponerse en ventaja pero no pudo doblegar a Hellstrom. La última esperanza fue un córner. A los 45 minutos 5 segundos lo ejecutó Dirceu y Zico entró por el primer palo y de cabeza puso el 2 a 1. Pero el referí terminó el partido con la pelota en el aire, apenas unos metros antes de que llegara a la cabeza del crack. Y el gol fue invalidado. A pesar del gol agónico, los que se agarraban la cabeza incrédulos y doloridos eran los brasileños y los que festejaron fueron los suecos.
39.- Brasil 3- Zaire 0. Alemania 1974
En Copas del Mundo con solo 16 equipos llegar por África era muy difícil. Uno solo clasificaba. Para Alemania lo hizo Zaire. Suponemos que ayudado por una localía en la que ya no salir con un punto sino con vida era una especie de hazaña. Mobutu, el dictador zaireño, había tomado a la selección de fútbol como proyecto personal. La expectativa por su participación mundialista era enorme. El debut fue con una derrota digna frente a Escocia. Pero en el segundo partido llegó la catástrofe: 9 a 0 frente a Yugoslavia. Parecía que faltaba lo peor porque el último era contra Brasil. Los brasileños, caminando, ganaron 3-0. Pero lo más llamativo fue cuando ante un tiro libre en contra, Ilunga perdió la paciencia ante los amagues y despejó la pelota antes de que los rivales patearan. Una escena surrealista. Al volver a su país varios jugadores fueron detenidos y torturados por el régimen por la supuesta ignominia que hicieron sufrir a su gente. De esa selección, tal vez, el que se ganó la inmortalidad fue Mwanza Mukombo: la figurita difícil del álbum Crack de ese Mundial
38.- Argentina 2- Nigeria 1. Estados Unidos 1994.
Era el último baile. Y empezó con la orquesta sonando a todo volumen. Después del Mundial 90, los problemas de Diego Maradona con las drogas se habían hecho públicos. Primero un doping positivo en el Calcio. Después la detención en Buenos Aires, motorizada por el menemismo para que ese tema tapara los escándalos de corrupción. Parecía que los días de Diego con la Selección habían terminado. Pero después de la derrota como local contra Colombia por 5 a 0 por las eliminatorias, Maradona regresó y condujo al equipo hacia Usa 94. Tras una exhibición y un gol extraordinario en el debut frente a Grecia, Diego deslumbró en el segundo partido, también con triunfo, frente a Nigeria. Después la imagen de él de la mano de la enfermera, el control antodoping, las noticias que enmudecieron a un país. Julio Grondona presidente de la AFA claudicó enseguida. Y ese fue el comienzo de su escalada hasta la cima de la FIFA y de los grandes negocios. Mientras Argentina jugaba contra Bulgaria, un partido al que nadie parecía prestarle atención, Diego dio una entrevista y con su habilidad para los grandes one liners resumió: “Me cortaron las piernas”. Así se fue de los Mundiales.
37.- Italia 3- Alemania 1. España 1982
Italia había pasado la primera rueda con tres empates. Pero en la segunda derrotó a Argentina y a Brasil. En las semis venció a Polonia y llegó a definir el torneo contra una granítica Alemania. A mitad del segundo tiempo y con Italia ganando 1 a 0, Marco Tardelli, el volante todoterreno de la Azurra, tomó la pelota en la puerta del aérea y cayéndose sacó un fuerte zurdazo que dejó parado a Harald Schumacher. Sin embargo, el momento inolvidable vino después. El grito de gol de Tardelli con los brazos desplegados al costado del cuerpo, la carrera desbocada, la cara transformada por la emoción. El llanto y la alegría se fijan en esa postal. Tardelli supo en ese momento que se había ganado la inmortalidad.
36.- Uruguay 1 (4)- Ghana 1 (2). Sudáfrica 2010
‘’No es la mano de dios, no es la mano de dios, es la mano de Suárez lpmqlp’'. Se jugaba el último minuto del segundo tiempo suplementario y Luis Suárez, primero con su rodilla izquierda y luego con sus manos, como un jugador de vóley en un bloqueo, salvó a Uruguay de la derrota. Asamoah Gyan, que había convertido 3 de los 5 goles de su selección en el torneo, tuvo el triunfo en sus pies, pero la pelota pegó en el travesaño y salió. Tiempo después el ghanés expresó: “El día anterior al partido había pateado 20 penales contra nuestro arquero en el entrenamiento y había anotado los 20″. En la tanda de penales el Loco Abreu quedó en la historia, picando el penal definitorio, que le dio la clasificación a Uruguay a semifinales después de 40 años. En este mundial el morbo se renueva: el viernes 2 de diciembre Uruguay y Ghana volverán a enfrentarse, por la última fecha de la fase de grupos.
35.- Francia 4- Kuwait 1. España 1982
Fue la primera aparición de un equipo empujado por los dólares del petróleo en un Mundial .Eran tiempos en los que un Mundial en Qatar parecía inverosímil (aunque hoy lo siga pareciendo pese a las evidencias). El partido no tenía equivalencias. Excepto por una goleada demasiado abultada nadie hubiera creído que ese partido podía quedar en la historia. Pero en el momento en el que Francia hizo el cuarto gol ante una defensa rival estática se desató el escándalo. Los kuwaitíes se quejaron de que un silbatazo partido de la tribuna los había confundido, creyeron que la jugada había sido invalidada. Ahí empezó el show. Desde el palco el jeque protestaba con amargura y en un momento le exigió a sus jugadores con gestos ostentosos e inequívocos que dejaran el campo de juego. Hasta que él mismo bajó, discutió con los de seguridad, con el referí y logró lo imposible: que el gol fuera anulado.
34.- Francia 4- Argentina 3. Rusia 2018
Un entrenador argentino dijo una vez ‘’Nada pasa por casualidad, si pasa es porque lo buscamos’'. Quienes sostienen esa teoría, si Argentina le ganaba a Francia, hubiesen tenido que admitir que es falible. Pero se dio la lógica y Argentina, que se clasificó a octavos en el último minuto, perdió solo por un gol -y ganaba por uno hasta los 57′- frente al futuro campeón, el día que Mbappé se consagró como uno de los mejores del mundo. Siempre presenciar la aparición de un crack, aunque se la sufra, constituye un privilegio.
Fue tan alto el nivel de Kylian y bajo el de ¿los de Sampaoli? -mal parados y sin defender en bloque-, que en algunos momentos pareció que los argentinos -en el penal especialmente pero también en algunas jugadas más- no eran de primer nivel.
33.- Brasil 2- Alemania 0. Corea-Japón 2002
Brasil, con dos goles de Ronaldo, se transformó en el único pentacampeón. Incluyendo los de la final, Ronaldo marcó 8 goles en el torneo, redimiéndose de lo ocurrido cuatro años antes y convirtiéndose, sin lugar a dudas, en la gran figura del certamen.
Alemania llegó al partido definitorio con un solo gol en contra y con Oliver Kahn como mejor arquero del campeonato. Sin embargo, en el momento cúlmine, cometió un error clave: a los 22 minutos del segundo tiempo, con el partido 0 a 0, Kahn dio un rebote largo a un tiro de Rivaldo y le dejó la pelota servida a Ronaldo, que puso el 1 a 0.
La Canarinha, que además tenía a Cafú, Roberto Carlos, Ronaldinho y Rivaldo -entre otros-, ganó todos los partidos que jugó (7), siendo la única selección en la historia en hacerlo (también lo lograron Italia en 1938, pero en aquel momento eran menos equipos y ganó sus cuatro encuentros, y Brasil en 1970, ganando 6).
32.- Argentina 6, Serbia y Montenegro 0. Alemania 2006
El 16 de junio en Gelsenkirchen, por la segunda fecha de la fase de grupos, Argentina le ganó 6 a 0 a Serbia y Montenegro, que venía de perder por la mínima con Holanda. Maxi Rodríguez hizo dos goles, Tevez marcó uno, Crespo otro, y también anotó el Cuchu Cambiasso, después de una maravillosa jugada colectiva que tuvo 25 pases.
Sin embargo, en la historia quedó otro suceso: a falta de 15 minutos para la finalización del encuentro, y a sus 18 años, Lionel Messi debutó en los mundiales. El rosarino hizo un gol y dio una asistencia a Crespo. En este ranking aparecerá otro partido en el que Argentina hizo seis goles. Pero ese partido fue algo más polémico que este.
31.- Dinamarca 6- Uruguay 1. México 1986
Mientras Argentina y Maradona se encaminaban a la gloria, Uruguay repleto de grandes nombres (Francescoli. Alzamendi, Rubén Paz) penaba en la primera rueda. Dinamarca de la mano de Laudrup y Larssen, la arrolló en una demostración grupal sobresaliente. Los daneses parecían invencibles. Un juego rápido, potente y bello que buscaba el arco de enfrente. Eran tiempos en que los partidos se veían por TV con el volumen bajo y el relato de fondo de Víctor Hugo: después del sexto gol se le escaparon unas lágrimas de dolor por el fútbol de su país.
Sin embargo, los daneses después serían goleados por España en octavos de final. Quedaron eliminados en la misma instancia que Uruguay que sucumbió ante el genio de Diego y otra de sus actuaciones prodigiosas.
30.- Francia 1 (3)- Italia 1 (5). Alemania 2006.
El 9 de julio en el Estadio Olímpico de Berlín, Italia se consagró campeón del mundo por cuarta vez en su historia. Pero el partido arrancó mejor para Francia, que tenía a un genio como capitán. Solamente un fuera de serie puede hacer lo que hizo Zidane a los 7 minutos: definir a lo Panenka un penal en una final de un Mundial. A pesar del gol tempranero, Italia se repuso rápido -antes de los 20′- y Materazzi, que había hecho el penal, se redimió y empató el partido de cabeza.
Hasta que llegó la acción más recordada del torneo. En su libro “Marco Materazzi, una vita da guerriero”, que se publicó en 2007, el defensor italiano cuenta su visión de los hechos: Zidane le dijo “Si querés tanto mi camiseta, te la doy cuando terminé el partido”. Y Marco le respondió: “Preferisco la puttana di tua sorella”. El árbitro argentino, Horacio Elizondo -que no vio el cabezazo y se apoyó en el cuarto, el español Medina Cantalejo- expulsó a Zizou, en el último partido como futbolista profesional.
29.- Brasil 3- Checoslovaquia 1. Chile 1962
Brasil llegó a Chile como campeón del mundo. Pero apenas comenzó el torneo todo pareció complicarse con la lesión de Pelé. No importó porque Garrincha seguía siendo Garrincha. Enloqueció a sus rivales desde la punta derecha. Y, como se trataba de Brasil, a Pelé lo reemplazó otro crack. Amarildo se hizo cargo y llevó a su país a conquistar su segundo título del mundo consecutivo. El primer tiempo de la final fue parejo. Checoslovaquia hasta se puso en ventaja. Pero después, el peso de las figuras brasileñas se impuso a fuerza de gambetas, pases cortos y talento. Didí, Vavá, Zagallo, Zito y Djalma Santos eran otros de los fenómenos que integraban ese equipo.
28.- Italia 4, Alemania 3. México 70.
El 17 de junio, en el Azteca, Italia derrotó 4 a 3 a Alemania Federal en el Partido del Siglo. La Azzurra arrancó ganando a los 8 minutos pero a los 90 empató Alemania. En el alargue, Gerd Müller puso el 2 a 1 pero Italia lo dio vuelta y el primer tiempo extra terminó 3 a 2. En el segundo suplementario otro gol de Müller igualó el partido. Faltaba más: un minuto después Gianni Rivera marcó el 4 a 3 definitivo, que le permitió a Italia acceder a una final después de 32 años. En el Estadio Azteca hay una placa conmemorativa del partido, que tiene grabada en mayúsculas la siguiente frase: ‘’El Estadio Azteca, rinde homenaje a las selecciones de Italia (4) y Alemania (3), protagonistas en el Mundial de 1970 del Partido del Siglo”.
27.- Brasil 0 (3)- Italia 0 (2). Estados Unidos 1994.
El 17 de julio en el Rose Bowl de Los Ángeles y ante casi 95.000 personas se jugó la única final de la historia en la que no hubo goles. Luego de empatar en los 90 y en el tiempo suplementario, fueron a penales, instancia en la que Brasil ganó 3 a 2 y se consagró -tras 20 años de sequía- campeón del mundo por cuarta vez.
Con cinco goles y dos asistencias, Romario fue la gran figura del torneo. Además, junto a Bebeto, formó una de las mejores duplas de ataque de los mundiales: entre los dos marcaron 8 de los 11 goles de Brasil. Roberto Biaggio, uno de los tres italianos en errar su penal -la tiró arriba del travesaño-, era considerado en ese momento uno de los mejores jugadores del mundo. Los cracks también se equivocan.
26.- Alemania 1- Argentina 0. Italia 1990/Brasil 2014
Dos partidos hermanados por los protagonistas, la instancia, el resultado final y el dolor que provocaron a los argentinos. Lo que los diferenció fue el trámite. En el de Italia, Argentina ni siquiera intentó atacar. Apostó a durar y a no ser vulnerada. El penal cobrado por Codesal sobre el final del encuentro marcó el final del sueño de un equipo que tuvo varios momentos de pesadilla. Las lágrimas de Diego al final son la postal (que rompe el corazón) de esa jornada. La final del 2014 dolió mucho más. El Maracaná, el campeonato que merece Messi, el gran plan táctico, los goles errados. Götze faltando muy poco para que llegaran los penales le dio el título a los alemanes.
25.- Francia 3- Brasil 0. Francia 1998
Por sexta vez el anfitrión se quedó con el título, tras ganar 3 a 0 con dos goles de uno de los ¿diez? mejores jugadores de la historia: Zinedine Zidane. Pero no puede hablarse de esa final sin mencionar el colapso de Ronaldo, el mejor jugador del mundo del momento.
El crack brasileño sufrió convulsiones el día del partido y lo llevaron al hospital para realizarle unos tests neurológicos. Nadie pensaba que iba a jugar, pero los resultados de los estudios, según dijeron, dieron bien y el crack (dañado) fue parte del once de Brasil.
Con el tiempo surgieron diferentes rumores: una posible venta de la final de Brasil a la FIFA a cambio de 23 millones de dólares y de organizar un mundial próximamente; la presión de Nike para que su estrella juegue; un posible escándalo sexual; o una inyección maldita. Más de 20 años después, Ronaldo declaró: ‘’Lo único que puedo relacionar con una convulsión el día de la final de la Copa del Mundo es realmente este estrés, un estrés muy alto, bajo presión y sin ningún tipo de preparación’'
24.- Argentina 0- Camerun 1. Italia 1990/ Francia 0- Senegal 1. Corea- Japón 2002
Durante varias ediciones al Mundial lo abrían los campeones vigentes y no el equipo local. Por lo general eran partidos anodinos, como si al campeonato le costara entrar en calor. Pero hubo dos partidos inaugurales que se convirtieron en sorpresas enormes, que terminaron con resultados que ninguno había previsto. En el Mundial 90 Argentina, con Maradona, debutaba contra Camerún. El equipo de Bilardo no llegaba bien, pero nadie creía que podía caer. Camerún con un gol de cabeza de Omam Biyik, tras un salto de atleta olímpico y un error de Nery Pumpido, se puso en ventaja. Después un festival de patadas para frenar al ingresado Caniggia pero el equipo africano dio el batacazo. En Corea-Japón 2002, la historia se repitió. Francia, el campeón, fue superado por Senegal. Un campeón relajado vencido por un recién llegado con ambición y orden.
23.- España 1- Países Bajos 0. Sudáfrica 2010.
‘’La piel de gallina recordando el gol de Iniesta’', dice la canción más conocida del dueto catalán Arnau Griso. España, que llegaba al mundial como campeona de Europa, arrancó perdiendo con Suiza en el debut pero luego ganó todos sus partidos por un gol, menos a Honduras que lo hizo por dos.
Con siete jugadores del Barcelona y tres del Real Madrid entre los titulares en la final, con Iker Casillas apareciendo siempre que se lo necesitó, atajando un penal a Tacuara Cardozo en cuartos y un mano a mano a Robben en la final y con David Villa anotando 5 de los 8 goles del equipo, España venció a los Países bajos con gol de Iniesta a los 116′ y se consagró campeona del mundo por primera y única vez. La final pese a la calidad de sus intérpretes no tuvo un buen nivel. Además del gol agónico y definitivo, lo más memorable resultó un planchazo criminal de De Jong al pecho de un rival que el juez sólo sancionó con amarilla.
22.- Argentina 1, Brasil 0. Italia 90.
‘’Maradona; Alemão que no; Sigue Diego, sigue Diego, picó Caniggia, vamos Diego, ¡lo estaban agarrando!; Caniggia, la ley de la ventaja, Caniggia, ¡ahora o nunca!, el triunfo Caniggia, gol’'.
Ni el fútbol son 22 tipos corriendo detrás de una pelota, ni la escritura un conjunto de letras desparramadas. Tampoco la música es la sumatoria de voces y sonidos, es mucho más, es lo intangible. Y el relato de Marcelo Araujo de ese gol tiene música propia.
A pesar de ser Argentina el vigente campeón del mundo, el favorito era Brasil, que había ganado los tres partidos. Argentina, en cambio, ganó uno solo y pasó como mejor tercero. El equipo parecía caerse a pedazos. El primer tiempo fue un monólogo repleto de situaciones de gol para la Canarinha, pero los palos, Goycochea y la mala puntería dejaron el marcador igualado en cero.
Muy conocidas son las historias sobre el bidón de Branco y la charla de Bilardo en el entretiempo –'’si les seguimos dando la pelota a los de amarillo, vamos a perder”-, pero en la historia quedará por siempre la jugada de Maradona y la definición de Caniggia a los 80 minutos, que le dio el triunfo a Argentina y la clasificación a los cuartos de final.
21.- Inglaterra 1- Argentina 0. Inglaterra 1966
Un partido lleno de polémicas y mitos. El origen de las tarjetas rojas. En cuartos de final se enfrentaban Argentina con Inglaterra y Uruguay con Alemania. La FIFA, dominada por los europeos hasta la irrupción de Havelange, cruzó los árbitros. Un alemán al primero y un británico al segundo. Los europeos fueron beneficiados por varios fallos. Argentina dirigida por el Toto Lorenzo salió con una actitud de extrema cautela a pesar de tener grandes jugadores. A mediados del primer tiempo estalló el escándalo. Una discusión, gestos airados y el referí que le señala el vestuario a Rattín, el capitán argentino. La expulsión desató una pequeña batahola. Varios minutos después Rattín se fue estrujando la bandera inglesa del banderín del córner y generó el mito de la alfombra de la Reina. Esa tarde también nació el grito de “Animals, Animals”.
20.- Estados Unidos 2- Colombia 1. Estados Unidos 1994.
Colombia llegó como una de las favoritas al título; con jugadores como Valderrama, Rincón y Asprilla, menos de un año antes, había vencido 5 a 0 a Argentina en el Monumental. El 22 de junio, en el Rose Bowl de Los Ángeles y ante más de 90.000 espectadores, Colombia enfrentó al seleccionado local, en el partido que dictaminó el final de Andrés Escobar. Cuando iba 0 a 0, Escobar quiso despejar un centro pero involuntariamente metió la pelota dentro del arco, sin que Óscar Córdoba pudiera llegar.
El 2 de julio, el día que se jugaban los octavos de final, con Colombia ya eliminada, Escobar recibió insultos y burlas mientras se encontraba en un restaurante en Medellín. En el estacionamiento, los narcotraficantes David y Santiago Gallón Henao se le acercaron y se pusieron a discutir, hasta que el chofer de los delincuentes, Humberto Muñoz Castro, se acercó y sin palabras de por medio le disparó seis veces en la cabeza. El 29 de junio, días antes de ser asesinado, Escobar había publicado una columna en el diario El Tiempo, que cerró diciendo: ‘’Hasta pronto porque la vida no termina aquí'’. Lamentablemente, se equivocó.
19.- Argentina 3- Holanda 1. Argentina 1978/ Argentina 3- Alemania 2. México 1986
Los dos títulos mundiales de Argentina. El primero fue el que por fin concretó el viejo anhelo y rompió con el estigma de los campeones morales. Fillol, Passarella y Kempes condujeron al título a un equipo noble que buscó cada partido. El tiro en el palo de Rensenbrink en el minuto 90 pudo haber cambiado la historia. El título del 86 fue la coronación de un equipo que jugó un Mundial extraordinario y que tuvo, claro, al jugador más determinante de la historia. Menotti y Bilardo se consagraron campeones del mundo con ciclos que tuvieron más similitudes que diferencias. Equipos que atacaban, con jugadores de gran pie y cuatro años de trabajo detrás. Ni el del 78 es tan menottista como se cree, ni el del 86 tan bilardista como se recuerda. Después, cada uno se convirtió en caricatura de sí mismo y exageró los rasgos que se le atribuyeron.
18.- Austria 0 vs Alemania 1. España 1982
Alemania había empezado muy mal el Mundial de España. Argelia la había sorprendido y le había derrotado 2 a 1. Después de vencer a Chile, para pasar de ronda, debía ganarle a Austria. Ese fue el último Mundial en el que en la segunda fase se conformaban grupos (en este caso de 3). Austria llegó a ese partido clasificada. Y ambos equipos antes de entrar conocían el resultado de Argelia (3 a 2 sobre Chile). Así que una victoria germana por la mínima diferencia no sólo los hacía pasar de ronda a ambos, sino que ubicaba a Austria en un grupo accesible. En realidad en el más accesible: junto a Francia e Irlanda del Norte. A los 10 minutos hizo un gol el Tanque Hrubesch. Y eso fue todo. Ya no hubo tiros al arco, ni infracciones. La inacción era insultante. Los jugadores se movían en cámara lenta. Y hacia los costados. Fue un amaño tan evidente que el público empezó a silbar y a cantar “Que se besen, que se besen”. A partir de ese encuentro los equipos del mismo grupo en la tercera fecha de la primera fase juegan a la misma hora. Se recuerda a este partido como La Vergüenza de Gijón.
17.- Argentina 1- Checoslovaquia 6. Suecia 1958.
El Desastre de Suecia. Argentina volvía a los mundiales después de 24 años. Y lo hacía con la extraña convicción de que eran los mejores del mundo. Checoslovaquia les dio una lección inolvidable. Un equipo repleto de cracks aunque fuera de forma (Amadeo Carrizo, Pipo Rossi, Ángel Labruna, Sanfilippo, Pedro Dellacha), uno solo de los Carasucias del Sudamericano del 57, el Loco Corbatta (Sívori, Maschio y Angelillo habían emigrado a Italia) y una dirección técnica a cargo de una leyenda algo oxidada como el maestro Guillermo Stábile. Argentina había estado fuera del mundo futbolístico durante demasiado tiempo, no tenía referencia alguna. El fútbol se había transformado en otra cosa. Pagó muy caro ese desconocimiento y su soberbia. En el regreso a Ezeiza, el plantel fue recibido con una lluvia de monedazos.
16.- Alemania 3 (5)- Francia 3 (4). España 1982.
Otro partido hermoso protagonizado por la Francia de Platini. Tras empatar uno a uno en los 90 e igualar en tres en el suplementario, Alemania derrotó a Francia por penales y accedió a su cuarta final. Lo sorprendente es que en los primeros ocho minutos del tiempo extra Francia convirtió dos goles y parecía quedarse con la victoria. Pero, con tantos a los 102′ y 108′, Alemania mandó el partido a los penales, donde ganó 5 a 4.
El partido también se recuerda por el grosero penal no cobrado de Schumacher a Battiston. El defensor galo, que había ingresado cinco minutos antes, quedó inconsciente, sufrió conmoción cerebral y la fractura de una de sus vértebras. Además, perdió tres dientes. La jugada tiene similitudes con la de Higuain y Neuer en el Maracaná, salvo por un detalle no menor: en este caso, a diferencia de 2014, el arquero alemán no fue a disputar la pelota.
15.- Corea del Sur 0 (5)- España 0 (3). Corea- Japón 2002
En el 2002, el Mundial llegó por primera vez a Asia. La sede compartida entre Japón y Corea del Sur hizo despertar de madrugada a muchos en la otra punta del mundo. Corea llegó a semifinales. Un gran campeonato de los locales. En el camino eliminó a Italia y a España. A estos últimos, en cuartos de final, los sacó por penales. Pero lo que la estadística no muestra es que en esos dos partidos fue escandalosamente favorecido por los arbitrajes. Goles anulados de manera ridícula a los rivales en momentos cumbres de los encuentros dejaron a Corea con vida. En este partido el árbitro fue egipcio y los jueces de líneas de Uganda y Trinidad y Tobago. Ser local siempre tuvo sus ventajas.
14.- Alemania 3- Hungría 2. Suiza 54.
En una de las sorpresas más grandes en la historia de los mundiales, conocido como el Milagro de Berna, Alemania Federal -en su primera participación tras la Segunda Guerra Mundial-, venció 3 a 2 a Hungría y se consagró campeón del mundo por segunda vez. Lo increíble -en un giro impensado en la actualidad-, es que catorce días antes se enfrentaron en la fase de grupos y Hungría ganó 8 a 3.
El Equipo de Oro, campeón olímpico en 1952, llevaba 33 partidos invicto y llegó a la final ganando todos sus partidos. Sin embargo, a pesar de ir perdiendo 2 a 0 a los ocho minutos, los germanos lo dieron vuelta y se quedaron con el título. El Milagro de Berna tal vez haya sido la piedra fundacional de la célebre frase deportiva ‘’Alemania es Alemania’'.
13.- Holanda 4- Argentina 0. Alemania 1974
Aviones contra carretas. Esa fue la diferencia. Una superioridad aplastante, casi humillante para una instancia tan avanzada de un Mundial. Ese partido puede haber sido el cénit de La Naranja Mecánica, el sorprendente y apabullante equipo holandés que comandado por Johan Cruyff deslumbró al mundo y se convirtió en el mejor de ese torneo (aunque no pudo coronar). El verdadero fútbol moderno. Un estado físico excepcional, ninguna posición fija, pressing, juego ofensivo, jugadores dotados técnicamente (Rensenbrink, Rep, Neeskens, Krol, Van Hanegem, entre otros) y las ideas revolucionarias de Rinus Michel.
12.- Suecia 2- Brasil 5. Suecia 1958.
Entre junio y agosto de 1958, Brasil dio a conocer al mundo a tres genios indiscutibles: Pelé, Garrincha y Joao Gilberto. Brasil buscaba con denuedo su primer título del mundo. La llave la tenían dos adolescentes que se convirtieron en las estrellas indiscutibles del torneo con su desparpajo, habilidad y genio. Suecia vio surgir a la primera corona del fútbol, al Rey Pelé. Y lo sufrió en la final. Pelé hizo dos goles. Uno con sombrerito incluido dentro del área y el otro con una de sus (tantas) armas letales: el cabezazo. Un defensor sueco, tras el partido, declaró: “Por momentos la impotencia me provocaba ganas de llorar. Por otros, la admiración me daba ganas de aplaudir”.
11.- Italia 2- Checoslovaquia 1. Italia 1934
Fue la primera vez en la que la política interactuó de manera desembozada con el deporte. Mussolini adoptó el torneo como un acto de gobierno que debía alimentar su imagen, al servicio de su demagogia. El fascismo en su apogeo se encolumnó detrás de la Selección que para conseguir el fin había nacionalizado a varios jugadores argentinos. Algunos de ellos, como Monti y Orsi, habían perdido la final del Mundial anterior. Vivieron la paradoja de que si ganaban en Montevideo su vida corría peligro. Pero si no lo hacían en Roma (el estadio se llamaba en ese momento Estadio del Partido Nacional Fascista) también corrían peligro por las amenazas del Duce. Orsi empató el partido y Schiavio en tiempo extra puso el 2 a 1 para que la Azzurra se quedara con el primero de sus cuatro títulos.
10.- Inglaterra 4- Alemania 2. Inglaterra 1966.
En la final, en Wembley y ante casi 100.000 espectadores, Inglaterra venció 4 a 2 a Alemania. En una de las polémicas más legendarias de la historia del fútbol -quizás la más recordada luego de la Mano de Dios-, Hurst convirtió su segundo gol -finalmente serían tres-, poniendo a Inglaterra 3 a 2 en ventaja en la prórroga. Hasta el día de hoy se discute si la pelota entró toda o si se trató de un gol fantasma. El árbitro, por si acaso, lo convalidó. En 1995 la Universidad de Oxford, tras realizar un estudio, informó que a la pelota le faltaban seis centímetros para pasar la línea. Sin embargo, en 2016, el programa británico Sky Sports Monday Night Football apeló a una simulación con realidad virtual y aseguró que la pelota había ingresado en su totalidad.
Un dato de color sobre un espectador peculiar de esa final: La copa Jules Rimet fue robada cuatro meses antes en el Westminster Central Hall. El trofeo fue recuperado gracias al olfato de Pickles, un perrito que la encontró en el jardín de una casa mientras paseaba con su dueño, David Corbett. Ambos estuvieron presentes en el partido inaugural y en la final. Además, Corbett recibió una recompensa de 6 mil libras esterlinas.
9.- Chile 2- Italia 0. Chile 1962
Los mundiales tienen varios partidos en los que la violencia fue protagonista. Acciones aisladas como el mordisco de Suárez, los codazos de Tassotti y Leonardo, el golpe criminal de Schumacher en el 82 o Gentile masacrando a Maradona. También juegos en los que ambos equipos se pegaron todo el tiempo: Brasil- Holanda del 74, Argentina- Brasil del 78 o el Holanda-Portugal. Pero nadie puede dudar de que el encuentro más violento de la historia fue el de Chile- Italia en 1962. Para que no queden dudas se lo conoce como La Batalla de Santiago. Hubo de todo. Foules arteros, patadas voladoras, codazos, tumultos, piñas, heridos. Carabineros arrestando jugadores en plena cancha. La primera falta fue a los 7 segundos. Cuando el partido –no se daban en vivo en ese momento- fue televisado en la televisión inglesa, el presentador lo introdujo con esta frase: “El partido que están por ver es la exhibición de fútbol más espantosa, estúpida, desagradable y vergonzosa, en la historia de este deporte”.
8.- Uruguay 4- Argentina 2. Uruguay 1930.
Y se hizo el Mundial. Todo empezó en Montevideo. Uruguay se ganó el derecho de organizar la primera Copa del Mundo luego de dominar al mundo del fútbol en los Juegos Olímpicos previos. Medalla dorada en el 24 y el 28 (venció a Argentina en la final). El estadio Centenario, Jules Rimet, una participación escasa e irregular de los europeos que tardaban varias semanas en llegar en barco. Pero lo importante es que dio comienzo al rito que ordena cada cuatro años nuestras vidas. La final fue rioplatense. Hubo tensión, amenazas previas, tensiones, violencia, intromisión política, escándalo, lindas jugadas, cambios en el resultado, jugadores extraordinarios, arbitraje dudoso, chauvinismo, grandes goles, mucha emoción, alegría desbordante, dolor lacerante. En fin, el fútbol.
7.- Italia 3- Brasil 2. España 1982
¿El partido ideal? No, todavía faltan algunas entradas para eso. Italia y Brasil definían el pase a semifinales. Los dos venían de derrotar a Argentina, a la de Maradona y Kempes. En Brasil jugaban Junior, Toninho Cerezo, Falcao, Socrates, Zico, Eder. Un equipo extraordinario: eficaz y lujoso. Italia había ido creciendo en el torneo. Bruno Conti era un pistón por la banda. Todavía no había despertado Paolo Rossi, el goleador que venía de cumplir una larga suspensión por corrupción en el Calcio. Pero esa tarde hizo tres goles. Brasil jugó, atacó, como si no supiera que el empate la clasificaba. El resultado cambió de manos varias veces. Hubo golazos y emoción. En un Mundial sin grandes partidos, Brasil presentó uno de sus grandes equipos. Pero fue vencido por su inocencia defensiva y la eficacia de Paolo. De todas maneras, los que vieron jugar a ese equipo todavía lo recuerdan con emoción y gratitud.
6.- Brasil 1- Alemania 7. Brasil 2014
El 8 de julio en el Mineirão se jugó uno de esos partidos que los futboleros siempre recordaremos dónde los vimos o qué estábamos haciendo en ese momento. Alemania le ganó 7 a 1 a Brasil en el -quizás-, partido más icónico de los mundiales desde el Argentina-Inglaterra del 86.
Jugando como local, al igual que frente a Uruguay en la final del 50, Brasil, que antes de la media hora perdía 5 a 0, sufrió la derrota más humillante de su historia. Mientras los goles alemanes se sucedían, caían en cascada, inevitables, parecía estar viviéndose una historia de ficción, un sueño sin sustento real. Para los brasileños fue una auténtica pesadilla.
5.- Argentina 6- Perú 0. Argentina 1978
El partido más largo del mundo. Hace 44 años que se está jugando. Argentina debía ganar por cuatro goles para clasificar a la final. Hizo seis. Hubo un tiro en el palo de Fillol en los primeros cinco minutos y un mano a mano que salió muy cerca poco después. A partir de ese momento hubo sólo un equipo en la cancha. Argentina arrasó a los peruanos. Con los años las sospechas, acusaciones, teorías conspirativas y denuncias nunca probadas se multiplicaron. Se habló de soborno, de presiones de la Dictadura argentina, de acuerdo entre los dictadores sudamericanos, de envíos de trigo, de amenazas de muerte. Kempes, Bertoni, Luque y compañía aplastaron a Perú. Los que quieren sostener que fue un partido limpio tienen casi una decena de argumentos para sostenerlo. Los otros, los que creen que no lo fue, también pueden esgrimir los suyos. La discusión nunca se va a apagar.
4.- Brasil 4- Italia 1. México 70.
El domingo 21 de junio en el Estadio Azteca y ante casi 110.000 personas, Brasil derrotó 4 a 1 a Italia y ganó su tercer Mundial. El equipo que jugaba con cinco 10: Pelé, Rivelino, Gerson, Tostão y Clodoaldo, es considerado el mejor seleccionado de la historia. Además, ‘’O Rei’' se convirtió en el único jugador en salir campeón del mundo tres veces.
En el primer mundial con cambios habilitados -previamente solo se podía reemplazar al arquero por lesión- y con la implementación de las tarjetas -a pesar de esto no hubo expulsados-, Zagallo también alcanzó una marca: se transformó en el primer campeón como técnico y jugador.
PD: Desde 1930 hasta 1970 el trofeo se llamó ‘’Jules Rimet’', en honor al entonces presidente de la FIFA y promotor de los mundiales. A los campeones se les daba una réplica de la copa y solo podía llevarse la original quien alcanzara los tres títulos. Brasil se la quedó post México pero no la tuvo por siempre. En 1984 la copa fue robada -se cree que por un joyero argentino conocido por fundir y vender oro-.
3.- Brasil 1 (4) vs Francia 1 (5). México 1986
El Italia-Alemania de México 70 tuvo más emoción. Cambios en el resultado, siete goles, grandes cracks como Beckenbauer o Gerd Muller derrotados. Pero este partido tuvo todos los ingredientes agónicos de un cuarto de final resuelto en la tanda de penales. Y uno más, vital pero infrecuente: la belleza. Un partido jugado de manera excepcional. El equipo francés que se venía formando desde Argentina 78, con la madurez de Platini y el acompañamiento de Giresse y Tigana deslumbraba. Brasil era, como siempre, Brasil. Dos equipos magníficos y ofensivos. No hubo especulación. Sólo la búsqueda del arco rival. Después tuvo el penal errado de Zico durante el partido. Y como marco final otro grito de gol histórico: la carrera desbordada de Luis Fernandez y todos cantando ¡Viva, Viva, Viva Le Bleu como en aprendimos en Héroes.
2. Argentina 2- Inglaterra 1. México 1986
El Partido. En la previa ya tenía todos los ingredientes. Un cuarto de final, el antecedente reciente de la Guerra de Malvinas, el chauvinismo exacerbado, el encono futbolístico ente los dos países, Maradona, Lineker, Bilardo, Robson. De todas maneras, el juego superó esas expectativas desmesuradas. La Mano de Dios y el Gol de Todos los Tiempos. Diego haciendo lo que cualquiera soñó y nadie pudo hacer. El genio en su momento cumbre. El privilegio de ver la historia mientras sucede, de ver como un hombre de un talento único se convierte en un mito.
1. Brasil 1- Uruguay 2. Brasil 1950
No hay partido que haya generado más mitología que el Maracanazo. Fue mucho más que la final de un Mundial. Fue la derrota de un país. Una tragedia nacional. La soberbia del convencimiento de un triunfo seguro se pagó muy cara. Y fue, como contrapartida, una hazaña inesperada. Once hombres casi mitológicos con el liderazgo de Obdulio Varela. Es el partido que más frases célebres ha producido: “Los de afuera son de palo”; “Al Maracaná sólo lo logramos callar Sinatra, el Papa y yo” de Ghiggia; y los dolidos lamentos de Barbosa, el arquero brasileño, hablando de que su crimen, no atajar el tiro envenenado al primer palo del delantero charrúa, tenía una pena vitalicia, perpetua, que hasta los asesinos eran perdonados antes que él en su país. No habrá otro partido igual, con ese peso histórico y simbólico, con la posibilidad de aplastar a una nación y de convertir a once jugadores en héroes perpetuos.
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