Si bien toda la atención mediática deportiva se centra en la expectativa que genera el comienzo de la Copa del Mundo en Qatar, en Boca continúan trabajando en la planificación del Xeneize para la próxima temporada. En el planeta boquense no hay tiempo para distraerse con la Scaloneta, y Juan Román Riquelme, junto al Consejo de Fútbol, sacó la primera conclusión sobre el estratega que afrontará el desafío que tiene como máximo objetivo obtener la séptima Copa Libertadores.
La primera interrogante que se planteó fue sobre el líder que conducirá al plantel, dado que algunas hipótesis planteaban la idea de ir a buscar a un estratega de jerarquía y con experiencia. Los ejemplos de Ricardo Gareca y Gerardo Tata Martino, entre otros, entusiasmaron a un proyecto ambicioso que tiene como meta trascender del otro lado de las fronteras. Sin embargo, tanto el Tigre, sin equipo luego de su incursión por el seleccionado peruano, y el rosarino, quien dejará su cargo en el combinado mexicano luego de su participación en el país del Golfo, fueron descartados porque el que seguirá al frente del grupo será Hugo Benjamín Ibarra.
El ex lateral derecho hizo los méritos para continuar con su gestión. A pesar de que no haya convencido desde el aspecto estrictamente futbolístico, el Negro supo resolver conflictos internos como los que protagonizaron Darío Benedetto y Carlos Zambrano en la cancha de Racing, el día que se pelearon en el entretiempo, cuando el delantero le reprochó falta de actitud al central incaico. Además, los resultados acompañaron: a pesar de la derrota en semifinales frente a Patronato y la caída empañada por las siete expulsiones en el Trofeo de Campeones, el título correspondiente a la Liga Profesional contribuyó para que el ex lateral derecho obtenga el respaldo de los dirigentes y los jugadores.
“Ojalá esté mucho tiempo”, había dicho públicamente el propio Riquelme cuando le consultaron sobre su visión acerca de Hugo Ibarra. Naturalmente, la conformación del plantel será otro de los temas a analizar, dado que uno de los pilares del equipo podría emigrar al exterior. Incluso el presidente del Flamengo, Rodolfo Landim, recordó que su club tiene como prioridad incorporar a Agustín Rossi para reemplazar a Diego Alves, quien jugó su último partido con el elenco carioca.
“Ya hubo un proceso de acercamiento a Rossi y a Boca el año pasado, y sigue figurando entre los arqueros que nos interesan contratar para este 2023″, reveló el directivo en diálogo con ESPN Brasil. “Rossi es uno de los nombres que pretendemos para reemplazar a Alves, y en él estamos pensando para suplir esa ausencia que se produjo en nuestro plantel”, remarcó el titular de la entidad de Río de Janeiro.
De este modo, todos los caminos del ex Chacarita parecen apuntar definitivamente al país vecino si se tiene en cuenta que todavía no respondió al nuevo ofrecimiento económico que le llegó desde el Consejo de Fútbol boquense a instancias del vicepresidente, Juan Román Riquelme. A Rossi se le vence el contrato con la entidad porteña en junio del año próximo, por lo que el primero de enero de 2023 estará en condiciones de negociar con cualquier club. La incógnita permanecerá planteada si Ibarra se conformará con Sergio Chiquito Romero o peleará por la figura estelar que fue responsable de uno de los mayores éxitos de su gestión.
SEGUIR LEYENDO