“Año 2006 y comiendo un sanguche de bondiola en la costanera con Linda Raff”. Esa frase que se viralizó hace algunos años marca cómo se puso en marcha la historia de amor que tiene como protagonistas a Alejandro Papu Gómez y su esposa, la arquitecta Linda Raff.
Ya se conocían del colegio cuando empezaron a salir como pareja. Era un época donde el futbolista tenía 17 años y comenzaba a posicionarse con su casi 1.70 metros en la primera de Arsenal de Sarandí. Con el paso de los años, el mediocampista no paró de crecer en su carrera deportiva. Tras ser clave en la histórica consagración en la Copa Sudamericana del Viaducto en 2007, llegó a San Lorenzo y en 2010 tuvo su primera experiencia internacional en el Catania italiano. Nunca más volvería al fútbol local y su trayectoria siempre iría en alza.
Y fue justo en un parate mientras estaba dando sus primeros pasos en el fútbol de Europa cuando se consumó la unión matrimonial. En 2012, Gómez y Raff se casaron para reafirmar su amor. Justo un año más tarde llegó Bautista (9) al que luego se le sumaron Constanza (6) y Milo (3). Esa foto de los cinco terminó de conformar una coraza muy especial para el jugador, porque como él mismo se encargó de decir, su familia es clave.
Más allá de la carrera de Papu, Linda también es destacada en su profesión. Es arquitecta y diseñadora de moda, y tiene su propia marca de trajes de baño. Además, tras la larga estadía de todos en la ciudad Bérgamo por su paso por Atalanta, pudo lograr convertirse en una empresaria del mundo de la gastronomía. Con la intención de hacer una parrilla argentina que tuviera platos típicos, la pareja le dedicó tiempo y trabajo a este proyecto. Y así fue como nació Boedo Restaurante, un lugar que sirve como un gran homenaje a la ciudad de Buenos Aires, Caminito y al club que lo potenció hacia el Viejo Continente y por el cual eligieron su nombre simbólico.
“Siempre tuve el sueño con mi mujer de poner una parrilla argentina en Bérgamo desde que llegamos a Italia. Ella es arquitecta y ya teníamos todo, el proyecto, la gente”, explicó hace un tiempo en diálogo con ESPN. Claro que, cuando todo parecía indicar que su vida familiar iba a perdurar en Italia, una pelea con el entrenador Gian Piero Gasperini dinamitó su calma idílica en Italia y su carrera sufrió un brusco cambio.
A pesar de que tener que irse del Atalanta a principios de 2021 fue un cimbronazo para Alejandro, él tuvo lo que esperaba. La contención de su esposa para atravesar un duro momento. “De un día para el otro, nos tuvimos que ir para Sevilla. Sin una gran mujer al lado, sería difícil”, manifestó Papu sobre el valor que tuvo su pareja para acompañarlo en la mudanza. Una más en su camino como familia.
Papu y Linda se muestran divertidos en las redes sociales. Es normal verlos compartir publicaciones graciosas y diferentes desafíos, pero también aprovechan su popularidad para mostrar mensajes positivos que les enseñan a sus tres pequeños. Uno muy claro fue cuando, en una casa de juego que instalaron en el jardín de su casa en España, dejaron varios mensajes optimistas como una especie de normas para sus hijos.
“Enfadarse muy poco; saber perdonar; gritar solo de alegría; reír a carcajadas; abrazarse muy fuerte; sonreír cada día; llorar solo de emoción…”, fueron algunas de las frases que estaban en unos carteles de madera.
Y en medio de los cambios familiares, apareció la versión más popular del mediocampista. Nació el Papu Dance, que se potenció con sus presencias en continuado en la selección argentina desde la llegada de Lionel Scaloni como entrenador. Y claro, la consagración histórica en la Copa América de Brasil con la victoria ante los locales en el mítico Maracaná potenció su imagen.
En ese interín, mientras Gómez festejaba con Lionel Messi, Rodrigo De Paul, Leandro Paredes, Giovani Lo Celso, Nicolás Otamendi y Ángel Di María en el vestuario después de cada partida, su familia lo esperaba. Y cuando se celebró el día del padre, su esposa le dejó un especial mensaje, pero con un pedido de que el reencuentro fuera postergado por una alegría que finalmente sucedió. “No somos de dar demasiada importancia a las fechas, siempre creemos que es todos los días el día especial, pero como esta vez estás lejos y todos te extrañamos, te queremos decir: ¡Feliz día, súper papá! Volvé pronto, pero no tan pronto. Te amamos. Bauti, Coti, Milo y yo”, fueron las palabras que usó Raff para con su esposo.
Y papá volvió con la copa, nada menos. Ese campeonato fue el salto definitivo para Papu en su deseo de jugar el próximo Mundial de Qatar. Más allá de ser parte de ese grupo que no para de divertirse y estar a pura sonrisa cuando se juntan, aquel chico que soñó con ser futbolista alguna vez, hoy demostró ser una pieza importante en el La Scaloneta gracias a sus goles y el juego asociado. Pero nada de eso podría funcionar sin el aporte de los que están día a día junto a él.
Papu Gómez sabe que el motor de su vida es su familia. Y su familia, la que forjó con Linda, también sabe que su esposo es alguien especial para ella y sus hijos. Así lo dejó saber en una publicación que hizo en la que, como casi una confesión, abrió su corazón y mostró lo que significa uno de los emblemas del seleccionado por carisma y calidez humana.
“Porque sos un luchador, uno que no llega a caerse que ya está en pie de nuevo, porque no hay día que vivas sin humildad, porque sos tan seguro de vos mismo que le deseas lo mejor a todos, porque en cada momento difícil siempre ves lo positivo, porque vivís con alegría cada día y transmitís al mundo alegría, pero sobre todo por la perseverancia y el compromiso que tenés con tu carrera, es que todo llega y que te mereces todo lo bueno que te pasa. Sos un gran profesional, pero sobre todo una excelente persona. Yo puedo solo estar orgullosa de compartir mi vida junto a vos”.
EL ÁLBUM DE FOTOS DE PAPU GÓMEZ Y LINDA RAFF
Seguir leyendo: