Con una triste imagen amanecieron este viernes el Estadio Juan Carmelo Zerillo y sus inmediaciones producto de los graves incidentes que se originaron durante el inicio del partido entre Gimnasia y Esgrima La Plata y Boca Juniors, en el marco de la fecha 23 de la Liga Profesional. Lo que debía ser una fiesta en las tribunas y un partido trascendental para el campeonato terminó en tragedia, con un hincha del Lobo muerto y varios heridos.
Solamente llegaron a disputarse 9 minutos del encuentro entre el club platense y el Xeneize, ya que una nube de gas lacrimógeno producto del accionar policial en las afueras del Bosque invadió el campo de juego, por lo que el árbitro Hernán Mastrángelo decretó su interrupción y 45 minutos después, la suspensión.
En ESPN mostraron imágenes de cómo amaneció el Bosque tras la represión de las fuerzas de seguridad contra los simpatizantes del Tripero. Además de una camioneta blanca prendida fuego frente al estadio, en la filmación se pudo observar con claridad varias vallas de contención caídas, casquillos de balas de goma en el suelo y diversas piedras que fueron utilizadas como proyectiles.
Una de las primeras hipótesis marca que una probable sobreventa de entradas fue lo que motivó a los hinchas que quedaron sin su ticket a intentar forzar el ingreso (las puertas se cerraron aproximadamente una hora antes del inicio del juego). Esto provocó la desesperación de los aficionados que querían entrar igual porque habían pagado sus boletos. La policía empezó a contenerlos con postas de goma y gases lacrimógenos, que desde las inmediaciones del estadio ingresaron afectando a varios jugadores, integrantes del cuerpo técnico y el propio público que entró en pánico.
En las redes sociales también se viralizaron las falencias que hubo en los controles y cómo un grupo de simpatizantes de Gimnasia y Esgrima de La Plata se filtró a una de las tribunas del estadio utilizando una escalera. Al percatarse de lo acontecido, los oficiales intervinieron; pero ya era demasiado tarde.
Una vez suspendido el partido, TyC Sports mostró cómo durante la represión de la policía varias de las balas de goma impactaron en un auto que se encontraba estacionado a unos metros del estadio. El dueño del vehículo era uno de los empleados del buffet de la institución. “Soy hincha del Lobo, y esto no lo hizo la gente del Lobo. Estos son tiros, son tiros de la policía. Los piedrazos puede ser esto, pero estos son tiros”, manifestó. Y luego, añadió: “Tengo impotencia, pero hay gente que la pasó peor”.
ASÍ QUEDÓ EL ESTADIO DE GIMNASIA:
FOTOS: Aglaplata
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