Agustín Calleri: “Ganar la Copa Davis es un sueño, pero para que eso ocurra primero hay que invertir abajo”

El ex tenista va por un nuevo mandato al frente de la Asociación Argentina de Tenis. Cómo fue surfear la pandemia, el perdón a la gestión anterior y su relación con Orsanic y José Luis Clerc

Guardar

Sin oponentes del otro lado de la red, los ex “legionarios” del tenis comenzaron su nuevo período de gestión. Sin demasiados cuestionamientos internos, pero con algunos punteos en la columna del Debe, la dupla Calleri-Zabaleta permanecerá cuatro años más al frente del Consejo Directivo de la Asociación Argentina de Tenis.

“Es un momento en el que se repasa lo que se hizo en los cuatro años de gestión y se piensa en los cuatro años que se vienen”, comenta a modo de reflexión el presidente de la AAT. “Van a ser muy distintos estos cuatro a los anteriores -continúa-, porque cuando asumimos la Asociación de tenis no estaba en su mejor momento ni en lo social ni en lo administrativo. ¡Y ni qué hablar en lo económico! Hubo que empezar a ordenar todas las áreas internas y lo funcional, no fue fácil. Encima, después tuvimos más de un año de pandemia que nos frenó un poco todos los objetivos que habíamos apuntado, pero igual, así y todo, yo creo que se hizo un gran trabajo”, ejercita a modo de balance.

El primer gran objetivo que tenían planteado era que la AAT ya no tuviera un rojo permanente, algo que recién lograron en la segunda mitad de mandato. “La Asociación ya casi no es deficitaria, eso es importante, porque antes tenían un déficit de 3 millones de pesos mensuales. Empezamos la gestión contando las moneditas día a día, pagando los juicios de la gestión anterior y, hoy, se puede proyectar a seis meses”, reconoce Calleri, en cuanto a lo económico. Esta apreciación hace suponer que la AAT dejó de ser “Copa Davis dependiente”, “exactamente -asiente el ex tenista-, ya no se precisa esperar a jugar series o finales por la Ensaladera de Plata para tener las cuentas en orden. Hoy no dependemos más de la Copa Davis, era un objetivo nuestro. Como decíamos con Zabala, podemos jugarla o no, que no dependemos de esos ingresos. Eso lo generamos sumando empresas importantes que comenzaron a trabajar con nosotros, porque vieron que el tenis es una buena opción y que la Asociación es, ahora, seria, transparente y respetada. Esto genera que las empresas se acerquen sin que las hayamos ido a buscar”.

Sin embargo, y a pesar de lo que dice el presidente, una de las pocas críticas que se hacen es, justamente, sobre la falta de sponsors o demora en conseguirlos, “se suponía que los chicos de la Legión podrían conseguir más plata, porque ellos son las caras de nuestro tenis. ¿Si no la consiguen ellos, quién?”, se preguntan.

Agustín Calleri, presidente de la
Agustín Calleri, presidente de la AAT, y Mariano Zabaleta, vicepresidente

Pero Agustín mantiene su posición y argumenta: “Se consiguieron algunos y otros que estaban de muchos años se fueron. Tenemos una aseguradora nueva, se bajó una prestadora de salud, pero ingresó otra con una pauta mayor, volvió YPF, se sumó una bebida, hay un Banco que ya quiere estar y otras empresas que se van acercando. Pero, también, hay que tener en cuenta que hubo dos años de pandemia. ¡Era difícil conseguir sponsors! Nosotros golpeamos puertas, pero la pandemia y la crisis económica nos jugó en contra. Ahora es distinto, ya ven al tenis como una organización más seria, con convocatoria y son las empresas las que están pretendiendo participar”.

En esta expresión, Calleri deja escapar un diferencial sobre la situación con la que se encontraron al asumir en 2018, por lo que el nuevo Consejo solicitó una auditoría sobre el estado de la AAT al estudio PricewaterhouseCoopers, “que es uno de los estudios más respetables”, reconoce el presidente del ente rector del tenis argentino. PwC es una destacada empresa que presta servicios de auditoría, consultoría y finanzas corporativas con sede en varios países.

Aunque las suspicacias sobre el manejo del presupuesto y los gastos parecieron surgir a comienzos del mandato de Calleri, en realidad, todo había empezado un año antes, cuando durante la Asamblea anual, Alejandro Lareo (Ferrocarril San Martín), con Balance de la AAT y algunas facturas de gastos en mano, pidió explicaciones acerca de esos documentos. “Este año no hay elecciones, pero el año próximo voy a volver con más preguntas que van a tener que responder”, contaban que les dijo el representante de San Martín por la disconformidad generada por los gastos adjudicados a familiares del presidente y de otros consejeros de ese momento a la final de Copa Davis de Zagreb y que fueran costeados por la institución.

En la auditoría, además, se encontraron gastos personales realizados por dirigentes y parte del cuerpo técnico del equipo de Copa Davis con la tarjeta de crédito corporativa. “Reparación de autos particulares, adquisición de productos y servicios varios” figuran en los resúmenes de esas tarjetas, cuentan quienes tuvieron acceso a esa documentación. Sin embargo, la decisión del Consejo fue poner un manto de silencio sobre esa situación y otras irregularidades encontradas.

Por eso, Infobae quiso saber si existió un acuerdo o un perdón hacia la gestión anterior. “En realidad, fue un decir, bueno, acá llegamos y desde acá empezamos a trabajar nosotros. O sea, somos todos del mundo del tenis y todos conocemos la verdad. Por eso hubo una revisión de cuentas de los libros y de todo lo actuado a cargo de PwC y tuvimos que marcar un antes y un después, porque sabíamos que el balance que ellos presentaban en el 2018 no era real y cuando nosotros lo auditamos nos confirmó que no era real. Pero bueno, ahí fueron manejos contables que se hicieron para que dé un balance positivo, cuando terminó siendo de 20 millones en rojo. Y reitero, 20 millones en 2018 (u$s 1.063.829,78, al cierre del Balance 29/12/2017) que hoy sería mucho más. Pero nosotros tampoco nos queríamos encerrar en algo así, porque nuestro objetivo era otro: sacar a flote a la Asociación, haciendo el trabajo que nosotros creíamos que había que hacer”. De todas maneras, los miembros del Consejo reconocieron el gesto de Daniel Orsanic, quien no les hizo ningún problema ni reclamo por el pago pendiente de honorarios que les llevó varios períodos cancelarlo.

La pandemia fue el tramo más duro de la gestión, según sostiene Agustín Calleri, porque veían que el tenis era el primer deporte que se estaba liberando a nivel mundial y que acá, “mientras se permitían algunos deportes de contacto, no le daban espacio al tenis. Fueron peleas con gobiernos, con ministerios de salud provinciales o de la nación y con mucha exposición mediática. A mí no me gusta esa exposición, pero me tocaba defender a los clubes, a las federaciones y a la industria del tenis, porque muchas familias viven del tenis”, recordaba el presidente.

Calleri alcanzó el puesto N°16
Calleri alcanzó el puesto N°16 del ranking durante el año 2003.

A partir de allí, según los miembros del Consejo, se hicieron varios cambios, entre ellos, conseguir que los afiliados pagaran con regularidad, “porque antes lo hacían un mes sí y otro no. Era imposible tener previsibilidad, hoy sabemos que todos los meses entra un flujo constante y te permite pensar en los trabajos. Otro de los puntos importantes fue la regionalización del tenis, que ayudó al sector de menores y permitió incrementar la participación de ellos en un 48%. Le estamos prestando mucha atención a los menores, tenemos torneos nacionales Sub 10, que antes no se hacían, se consiguió que todas las categorías clasifiquen a los Mundiales, hubo 3 chicas en la categoría Junior de Roland Garros, son cosas que no pasaban y que hoy están sucediendo y nosotros tenemos que estar muy presentes en todo eso”, aseguran con un dejo de orgullo, pero afirman que deben seguir trabajando en lo que tienen pendiente: llevar el tenis a las escuelas, porque saben que si el tenis ingresa en la currícula escolar va a hacer crecer mucho más el deporte.

“En 2020 íbamos a empezar con el tenis en 30 escuelas públicas de la ciudad de Buenos Aires y estábamos hablando con los ministros de educación de otros gobiernos provinciales para poder llevarlo a cabo y la pandemia nos cortó en ese sentido. Era una apuesta fuerte, brindar la primera herramienta sin necesidad de ir a una cancha de tenis, pudiéndolo hacer en un playón deportivo, usando mini red, con pelotas de baja presión, capacitando a profesores de educación física para que, después, esos chicos empiecen a gustar de este deporte y a darse cuenta de que es divertido de practicar. Esto nos iba a permitir retroalimentar a los clubes, que es el objetivo maestro”, cuenta el cordobés.

Otro de los puntos criticados de la gestión de los ex tenistas es que hay poca cantidad de torneos en la Argentina. “Este segundo semestre del año, como siempre, tendrá un calendario mucho más apretado, adonde hay una mayor cantidad de torneos que en los primeros 6 meses. Tenemos la posibilidad de hacer 10 torneos, 5 femeninos y otros 5 masculinos, de 15 y 25 mil dólares. Sabemos que tenemos que hacer, por pedido, más torneos de 15, habrá 5 challengers, más el del Racket. A eso hay que sumarle los 2 ATP del verano, es un buen número de torneos y no sé cuántos países en Sudamérica tienen esa cantidad. Hemos logrado una muy buena relación con la ATP con ITF, es cuestión de levantar el teléfono y hablar directamente con el presidente de cada una, y estamos dentro de la mesa chica de la COSAT, cosa que antes no pasaba. Eso es un potencial que tenemos nosotros, lo que nos posiciona diferente hacia el afuera a nivel institucional. Por la calidad de los torneos realizados saben que en la Asociación hay gente que trabaja muy bien en producción. La Copa Davis salió redondita, el challenger del TCA se hizo de un día para otro, eso demuestra para el afuera que somos muy creíbles, que podemos organizar eventos muy bien organizados y con producción propia”.

- ¿Por qué pensás que no hubo una lista opositora? ¿No llegaron a juntar la gente o ustedes lo hicieron demasiado bien?

- Nosotros, realmente, hicimos muy bien las cosas. Estuvimos siempre cerca de los clubes y de las federaciones, además, yo creo que la defensa que hicimos del tenis hacia la autoridad nacional y las provinciales, por la vuelta del tenis, fue muy buena. Creo que ellos se dieron cuenta de nuestro compromiso y nosotros somos, socialmente, muy presentes con los clubes. A pesar de ser gobierno, los seguimos recorriendo, les abrimos el juego a todos y sabemos que todos tienen que participar.

“Nuestro desafío es hacer que continúe creciendo el tenis en Argentina -continúa Agustín-, sobre todo, en lo que tiene que ver con menores e incrementar la masa societaria. Ya tenemos más de 9.000 socios y queremos ir por más. Otro de los objetivos importantes es lograr el Centro Nacional de tenis, algo que teníamos encaminado antes de la pandemia. Tenemos que plantearnos objetivos y cumplirlos, como lo hacíamos cuando éramos jugadores, porque es muy difícil trabajar sin objetivos, sin metas que cumplir. Y me tengo mucha confianza, porque creo mucho en mi equipo de trabajo, porque no soy yo solo y, por eso, cuando uno tiene un muy buen equipo de trabajo atrás se siente con confianza, respaldado, y eso es lo que lo que no te hace tener miedo a posibles situaciones que se te presenten”.

Calleri junto a David Nalbandian
Calleri junto a David Nalbandian disputando la Copa Davis

- José Luis Clerc los confrontó en una elección, Daniel Orsanic dijo abiertamente que apoyaba a otra lista, ¿trabajarían con ellos si existirá esa posibilidad?

- Con Orsanic las cosas quedaron más o menos a la vista de todos y estamos bien. Cada vez que nos vemos, nos saludamos, charlamos, no hay problema. A Batata no lo volví a ver, no me lo he podido cruzar, pero no creo que sea un problema una elección democrática. Cada uno tenía su punto de vista y la gente decidió. ¿Trabajar juntos con ellos? Sí, pueden sumarse, no hay ningún problema, por supuesto, siguiendo los lineamientos que nosotros tenemos como Consejo Directivo.

Ya de cara a los próximos cuatro años y pensando en lo hecho, Calleri ensaya una reflexión a la hora de apoyar la cabeza en la almohada. “Me acuesto satisfecho de haber logrado el objetivo de poder lograr que la Asociación haya dejado ser deficitaria, un logro muy importante. Y podría decirte que ganar la Copa Davis es un sueño para estos cuatro años, pero pienso que para que eso ocurra, primero hay que invertir abajo, que haya más chicos jugando y para eso es fundamental poder tener al tenis en las escuelas. Y uno más, un objetivo histórico, de siempre, que venimos planteando desde cuando yo jugaba, plasmar un Centro Nacional de Tenis. Todas las federaciones importantes la tienen, nosotros aún no. Esos son los sueños que me gustaría haber logrado el día que me tenga que ir”.

SEGUIR LEYENDO:

Guardar