Instituto logró lo que parecía imposible. Después de estar 2-1 abajo en las finales de la Liga Nacional de Básquet, dio vuelta la serie y se consagró por primera vez en su historia como campeón de la máxima categoría del básquet argentino. En una definición atrapante, que tuvo a Martín Cuello como el héroe, los cordobeses ganaron 85-84 en los últimos segundos de un juego que quedará en la historia de la competición.
Como se esperaba, fue un encuentro cerrado desde el comienzo. Los locales tuvieron a Juan Brussino como una de las banderas en el ataque. Otro que sumó para La Fusión fue Eric Anderson Jr, el más valioso de la temporada regular y que también fue clave para que los santiagueños lleguen a la final del torneo.
El otro que mostró credenciales en el inicio fue Cuello, que acabó con 11 puntos en el primer período que terminó 25-23 a favor de Quimsa. Ya en el segundo cuarto, el que apareció para los visitantes fue Nicolás Romano: el experimentado ex San Lorenzo entre tantos equipos sacó la cara por La Gloria y fue la carta en ataque para los de Lucas Victoriano. Un triple de Thomas -no estuvo tan influyente como en otros juegos de la serie- sobre la chicharra cerró la primera etapa con un 47-46 para los locales.
Al igual que ocurrió con los primeros dos parciales, el tercer fue mano a mano. Pero Instituto estuvo más lúcido en ataque y mostró toda su voracidad defensiva, la misma que lo llevó a jugar la definición. Whelan tuvo un valioso aporte en los primeros minutos del cuarto con 7 puntos y Romano volvió a sumar para el 71-64 a favor de los cordobeses con el que cerró el tercer período.
El último cuarto estuvo casi guionado para los libros de la historia de la Liga Nacional. Cuando parecía que la visita se alejaba -sacó máxima de nueve puntos (83-74) con una triple de Copello-, apareció el amor propio del conjunto de Sebastián González para igualar las acciones y llevar el duelo a un final atrapante. Cuando restaban 4.8 segundos en el reloj, Rey Terry anotó dos libres que le dieron ventaja de uno a La Fusión (84-83).}
En el siguiente ataque, Cuello tomó el balón y se dirigió camino al aro. El propio número 24 de Quimsa le hizo falta. El número 44 convirtió los dos tiros desde la línea -Instituto estuvo perfecto en esa estadística en toda la noche con 19/19- para poner al frente a su equipo. Con menos de 2 segundos, los locales no pudieron intentar un disparo y la Gloria hizo historia en Santiago del Estero.
“Mi objetivo era poder llegar a la final con el club que tanto lo viene buscando. Y sobre todo, ganar un título. Lo logramos de una manera increíble”, comentó Cuello después del juego y antes de haber sido elegido como el Jugador Más Valioso de las finales 2022. Locu terminó el encuentro con 21 puntos, 6 rebotes y 3 asistencias. Hay que recordar que el oriundo de Ramos Mejía fue clave en el segundo punto de la serie, que también se jugó en el hogar de Quimsa, y en el que acabó como el goleador con 30 puntos.
“Fuimos los dos mejores equipos de la temporada. Pero nosotros tuvimos muchos problemas. Durante gran parte de la temporada no pudimos completar el plantel, solo tuvimos a Tony (Vicens Morey) como extranjero, pero es uno más. Fue consagratorio ganarlo acá, y sobre todo de visitante en un quinto juego”, sumó el alero de Instituto.
Otro de lo que habló tras la consagración fue Lucas Victoriano, que ahora ganó su primer título de liga como entrenador después de haberlo hecho en su etapa como jugador en Olimpia de Venado Tuerto antes de irse a jugar al Real Madrid.
“Nunca claudicamos, más allá de todos los problemas que tuvimos durante la temporada, este equipo siempre trabajó por esto. Fue un equipo muy trabajador, ellos nunca pusieron excusas. Y hoy el partido se jugó como nosotros queríamos, en ataque y en defensa”, dijo el ex base de la Generación Dorada.
“Hoy había que ganar acá, y tuvieron la personalidad y la valentía para lograrlo”, cerró.
Este título 2021-2022 para Instituto le puso un broche de oro a una década en la que el club se propuso llegar a lo más alto del básquet argentino. Después de lograr el ascenso al TNA en 2012, tres años más tarde se coronó en dicha categoría y llegó a la elite. Tras alcanzar las semifinales en años consecutivos (2018-2019), la campaña pasada se quedó con el Súper 20 y ahora coronó un título que espera ser fundacional para la institución, su coach y varios de estos jugadores que ahora buscarán llenarse de más gloria. Como su apodo lo dice.
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