Una bandera robada, audios con amenazas y el riesgo de una batalla en el Obelisco: la impensada guerra entre barras de Racing y Deportivo Cali

Los ultras colombianos pasaron por el Cilindro y se llevaron un trapo de “Los pibes de Racing”, que hicieron la denuncia, pero también advirtieron que, si no aparece, irán a recuperarlo al banderazo que La Amenaza Verde realizará este miércoles en el centro porteño

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La bandera de la barra oficial de Racing que desapareció del Cilindro
La bandera de la barra oficial de Racing que desapareció del Cilindro

Una bandera, un banderazo y mucha tensión. Así podría llamarse la obra de teatro que están montando las barras de Deportivo Cali y Racing y que tiene en alerta a toda la Seguridad en la Ciudad de Buenos Aires. Porque los violentos del equipo colombiano piensan reunirse mañana en el Obelisco a las tres de la tarde como previa al partido clave contra Boca del jueves por la Copa Libertadores. Y porque la ex Guardia Imperial ahora llamada Los Pibes de Racing amenaza con ir en masa a buscarlos para recuperar una bandera robada la semana pasada del Cilindro de Avellaneda, en la previa al partido entre la Academia y Melgar por la Copa Sudamericana. El caso está judicializado por la propia barra de Racing, que se presentó en Avellaneda en la UFI 4 a cargo del doctor Mario Prieto para denunciar la sustracción del trapo y también en la Fiscalía Nacional número 8 con asiento en la Ciudad, cuyo titular es Leonel Gómez Barbarella, para que tome cartas en el asunto. Si no fuera verdad, sería surrealista. Pero esto está sucediendo ahora en la Argentina.

Todo comenzó el miércoles pasado cuando en horas del mediodía y con la excusa de querer conocer la cancha, un grupo de colombianos logró franquear el ingreso al Cilindro. En realidad está la sospecha de que fueron ayudados, ya que la barra de Deportivo Cali tenía una relación muy cercana a la vieja Guardia Imperial que lideraban los hermanos Escobar. Allí ya estaban colgadas varias banderas entre ellas las del grupo de Burzaco, que forma parte de Los Pibes de Racing. La desataron del alambrado, la guardaron en un bolso y se la llevaron. Y al otro día apareció un video en las redes sociales donde los colombianos se ufanaban de lo realizado y desafiaban a sus rivales de la Academia.

Al instante, el periodista partidario del club de Avellaneda, Leandro Adonio Belli dio con un audio del jefe de los violentos de Racing, Leandro Paredes, en los que amenaza con encontrarlos y liquidarlos. Pero además de llevar la guerra al terreno virtual, la barra fue al terreno judicial: denunció el hecho en la Comisaría Primera de Avellaneda y tomó intervención la recientemente creada fiscalía específica de violencia en el fútbol de la departamental Lanús-Avellaneda, a cargo del doctor Mario Prieto, que inició las investigaciones.

Mientras, la barra de Racing hacía averiguaciones por su parte. Y dos días atrás tuvieron el dato de que los colombianos y la bandera estaban en un hotel de la zona de Once, en la avenida Corrientes al 2500. Entonces un particular llamado José Biscaro se presentó ante la Comisaría Vecinal 3 A que queda en Lavalle al 2600, a metros de donde supuestamente estaba el botín sustraído, para avisar y que la recuperen. Los policías dieron aviso a la Justicia e intervino el fiscal Gómez Barbarella quien dispuso la intervención de una brigada para que haga tareas encubiertas en la zona donde estaría la bandera. El tema es que cuando fueron al edificio en cuestión no había nada. Y la barra que estaba en varios autos en los alrededores se fue frustrada y juntando más bronca.

Con este panorama Los Pibes de Racing volvieron a amenazar a los integrantes del Frente Radical Verdiblanco de Deportivo Cali con ir a por todo en el banderazo. Y del otro lado respondieron con otro audio también obtenido por el periodista partidario Adonio Belli ratificando la convocatoria a una batalla a todo o nada en el Obelisco: “No les tenemos miedo. Nos vemos en el Obelisco, nos vemos en La Bombonera, nos vemos donde quieran. Estamos listos, estamos activos. Ya perdieron, locas”, se escucha en la respuesta viralizada. Por eso la preocupación es máxima. Y mientras en la fiscalía de Avellaneda dicen tener datos de dos domicilios más donde podría estar el “trapo” de Burzaco para hallarlo antes que todo estalle, la Seguridad está armando un operativo especial en el Obelisco para que nada pase. Una bandera, un banderazo y una guerra. El combo que pinta a la perfección la violencia en el fútbol en toda Latinoamérica.

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