Una vez consumado el título de Copa de la Liga en Córdoba, Sebastián Battaglia respiró hondo y agradeció a su círculo íntimo. A los jugadores por el esfuerzo, a los amigos y a la familia, que siempre estuvo a su lado pese a ciertos nubarrones que llevaron a hacer dudar sobre su continuidad. Un apoyo constante fue el de su esposa, Betina Kazun, quien lo acompañó a lo largo de toda su carrera como futbolista y hoy sigue a su lado en la faceta de entrenador.
La pareja del santafesino es experta y no solamente mantiene la salud espiritual del DT por obligación marital. Betina es counselor especializada en desarrollo personal y fuente de consulta diaria para el entrenador xeneize. A un día de la consagración del equipo ante Tigre, ella compartió una publicación en las redes sociales con la que hizo referencia al esfuerzo del cuerpo técnico comandado por su esposo.
La fábula de “Las ranas en la crema”, escrita por Jorge Bucay, fue la que empleó la esposa de Sebastián Battaglia para recrear la vivencia de Battaglia en el último semestre a cargo de Boca. La misma relata la historia de dos anfibios que caen en una taza de la consistencia cremosa y comienzan a patalear en busca de salir de la misma. Una de ellas, viendo que no tendría chances de salir a flote, decide dejar de esforzarse y se ahoga. La otra, creyendo que su destino sería idéntico, opta por seguir esforzándose hasta el final hasta el último aliento, sin esperar que convertiría la crema en manteca y podría saltar del tazón.
“Felicitaciones Seba Battaglia y cuerpo técnico, un ejemplo de lucha y perseverancia!! Frente a todos!”, fue el mensaje final acompañado por una serie de fotos del DT junto a su ayudante de campo Juan Krupoviesa y propiamente la familia Battaglia posando en el campo de juego del estadio cordobés.
LA FÁBULA QUE COMPARTIÓ LA ESPOSA DE BATTAGLIA:
“🐸🐸LAS RANAS EN LA CREMA
🐸Había una vez dos ranas que cayeron en un recipiente de crema.
🐸Inmediatamente sintieron que se hundían, era imposible nadar en esa masa espesa como arenas movedizas.
🐸Al principio las dos patalearon en la crema para llegar al borde del recipiente, pero era inútil, solo conseguían chapotear en el mismo lugar y hundirse.
🐸Sintieron que cada vez era más difícil salir a la superficie a respirar.
🐸Una de ellas dijo en voz alta: -”No puedo más. Es imposible salir de aquí, esta materia no es para nadar. Ya que voy a morir no veo para qué prolongar este dolor. No entiendo qué sentido tiene morir agotada por este esfuerzo inútil”
Y dicho esto, dejó de patalear y se hundió con rapidez. Siendo literalmente tragada por el espeso líquido blanco.
🐸La otra rana, quizás más persistente, o quizás más tozuda, se dijo: -”No hay caso! Nada se puede hacer para avanzar en esta cosa. Sin embargo, ya que la muerte me llega, prefiero luchar hasta mi último aliento. No quisiera morir un segundo antes de que llegue mi hora”.
🐸Y siguió pataleando y chapoteando siempre en el mismo lugar, sin avanzar un centímetro. Horas y horas!
🐸Y de pronto… de tanto patalear y agitar, agitar y patalear…La crema se transformó en manteca. La rana sorprendida dio un salto, y patinando llegó hasta el borde del pote….
Felicitaciones @sebabattaglia y cuerpo técnico, un ejemplo de lucha y perseverancia!! Frente a todos!”.
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