Una vez más, la barra brava de River Plate quedó en el ojo de la tormenta. La Policía de la Ciudad detuvo a 253 integrantes de la facción oficial de la barra del Millonario, muchos de los cuales habían sido incorporados al derecho de admisión días atrás, por los delitos de “desobediencia, atentado y resistencia a la autoridad”.
El operativo que la Policía llevó a cabo a través del Departamento de Conductas Ilícitas de la Dirección de Eventos Deportivos, en conjunto con la Fiscalía Especializada en Eventos Deportivos a cargo de la Doctora Celsa Ramírez e integrantes del Cuerpo de Investigaciones Judiciales, se concretó en las inmediaciones del estadio Antonio Vespucio Liberti, en la previa del partido entre River Plate con Argentinos Juniors por la Copa de la Liga Profesional.
El grupo estaba comandado por Caverna Godoy, líder de la facción oficial de la barra. Cuando los efectivos subieron a los micros para realizar una requisa, 50 de los integrantes intentaron escapar, presumiblemente porque habían sido sumados a la lista de Tribuna Segura. Al ser perseguidos por la Policía, se desarrolló un enfrentamiento, en el que fueron reducidos y quedaron detenidos en la zona de Cantilo y General Paz.
“Estos barras tenían derecho de admisión y por investigaciones previas sabíamos que iban a presentarse en el estadio. Gracias al accionar de la Policía de la Ciudad, el CIJ y la fiscal Celsa Ramírez pudimos detenerlos y ponerlos a disposición de la Justicia. Trabajamos para que las familias estén en las canchas y los barras afuera”, aseguró Marcelo D’Alessandro, ministro de Justicia y Seguridad de CABA.
El pasado 4 de abril, el Ministerio de Seguridad porteño les aplicó el derecho de admisión a 319 barras de River de la oficial y la disidente, acusados de asociación ilícita. Entre ellos está Sebastián Alberto Sohar Tejada, el encargado de tirar las bengalas marinas de una tribuna a la otra en el Superclásico, accionar que no terminó en una tragedia de milagro. Todos recibieron la prohibición de ingresar a los estadios por plazos que varían entre los seis meses y los cuatro años.
Al mismo tiempo, Jorge Brito, presidente del club de Núñez, celebró la decisión. “Me comprometí a trabajar para que la familia siga yendo a la cancha y a los violentos los queremos muy lejos de River. Estas personas no le suman a River y junto a toda mi comisión directiva trabajaremos para que no tengan ningún lugar, los queremos lejos, muy lejos del club. Muchas veces nos preguntan por qué somos el único club sin bombos y sin banderas, y la respuesta es fácil: si el bombo lo toca un violento, seguiremos sin bombos, si la bandera la lleva un violento, seguiremos sin banderas”, subrayó con énfasis. “Y si aparecen otros, también serán expulsados del Monumental y del club, queremos que las familias puedan disfrutar tranquilas alentando a su equipo en la cancha, ese es nuestro objetivo”, concluyó.
En los últimos partidos, los barras, de un lado y del otro, buscaron vulnerar el derecho de admisión en grupos más pequeños, de hasta 10, para no llamar la atención de la seguridad. Esta vez, la barra oficial intentó dejar a la vista una demostración de poder, y 253 integrantes terminaron detenidos.
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