Las mujeres ocupan cada vez mayor cantidad de espacios de poder en el comando de los clubes. Un claro ejemplo de ello es lo que sucedió en River Plate con la conformación de la nueva comisión directiva, la cual tiene a Jorge Brito a la cabeza.
Mediante una medida impulsada por Rodolfo D’Onofrio antes del cierre de su mandato, quedó estipulado el cupo femenino obligatorio del 20 por ciento en todos los órganos de gobierno del club y el protocolo de actuación para la prevención e intervención ante situaciones de discriminación y/o violencia de género.
Tras poco más de un mes en sus nuevos cargos, Infobae dialogó con las cinco mujeres que asumieron como vocales titulares en el Millonario: Carolina Avalis, Clara D’Onofrio, Gabriela Cenoz, Marcela Mallet y Verónica Villar. Cómo nació su amor por los colores y cuándo hicieron el clic para querer ingresar a la política del club.
- ¿Cómo nació su vínculo con River?
Carolina Avalis: Mi papá quería llamarme Ubalda Matilde. Podría decir que desde antes de nacer ya tenía vínculo con River, incluso viviendo a más de 1200 km del Monumental. Nos traía a la cancha para los partidos importantes a mis hermanas y a mí . También, cada vez que viajábamos de vacaciones a Buenos Aires, pasábamos al menos a tomar un café si es que no era época de partidos.
Clara D’Onofrio: Desde que nací que respiro fútbol y River en mi casa. Me acuerdo de ver los partidos en casa, y como vivíamos cerca, ver el cartel de la Sivori donde anunciaban el gol. Mi primer partido fue la final de la Libertadores del 96, y de ahí no paré de ir de local.
Gabriela Cenoz: Empecé a ir a la cancha a los 16 años, mi primer partido fue un River-Racing en el que ganamos 4 a 3. ¡Tremendo!. Nunca más dejé de ir. Local, visitante, al interior o exterior, dentro de las posibilidades económicas, siempre River era el mejor plan para el fin de semana.
Marcela Mallet: Cuando con mi familia nos mudamos a Belgrano decidimos asociarnos a River ya que concurríamos a ver partidos, pero no éramos socios. El 18/5/1994 nos asociamos y comenzamos a utilizar las instalaciones haciendo deportes y actividades sociales.
Verónica Villar: No sé cómo nació, de toda la vida, desde que tengo uso de razón soy hincha de River. El club es mi casa, mi familia. Es un refugio, es en el lugar donde no existe otra cosa que no sea River.
- ¿Por qué decidió entrar en la política de River?
Carolina Avalis: Cuando me vine a estudiar a Buenos Aires empecé a ir sola a la cancha. Con las ganas de sentirme cerca de mi familia y de estar conectada con personas que tuvieran los mismos anhelos blancos y rojos que yo. De inmediato me hice amigos. Todos hombres, claro. Y naturalmente, casi sin quererlo, estuve formando parte de una agrupación política. Y sí, en ese entonces era la única mujer.
Ellos me llevaron a conocer todas las canchas, en esa época podíamos ir de visitante y la consigna era: “vestite como un varón”. Siempre me cuidaban entre todos. El camino político dentro de River fue duro, no voy a negarlo. Era chica, del interior y mujer, características que no deberían influir, pero la realidad muchas veces se aleja de lo que se supone natural: la igualdad.
Los primeros años el único lugar al que podía acceder era el de decorar salones y el de vender rifas. A los varones, por supuesto... Y no podía ni opinar ni participar de ninguna otra actividad de manera formal, porque era un espacio de hombres y nunca habría sido tomado en cuenta lo que tuviera para aportar. Muchos años después, ya con bastante evolución y aprendizaje encima por parte de todos, en la primera gestión de Rodolfo, me encontré ocupando lugares en donde pude desarrollarme y en efecto, pude demostrar con trabajo y esfuerzo el valor que puedo aportar al club. Eso me llevó a ser Representante de Socios y tener el enorme honor de ser hoy en día, Vocal Titular del club de mis amores.
Clara D’Onofrio: Hace 8 años que vengo trabajando en el mundo River desde la Fundación River Plate, y si podía seguir aportando mi conocimiento y ganas a River, bienvenido sea.
Gabriela Cenoz: Empecé a militar casi sin darme cuenta, con amigas y amigos de tribuna. Formamos primero la agrupación Todo x River, de manera informal. Hacíamos la revista Desde El Tablón, que salía todos los partidos de local. El primer gran evento en el que participamos fue la caravana de los 100 años. Más tarde nos constituimos oficialmente como Caravana Monumental, y desde allí fuimos creciendo políticamente, ocupando espacios de gestión y trabajando siempre por un club mejor.
Marcela Mallet: En realidad se fue dando a través del tiempo, y de mis ganas de ayudar. Mis hijos hacían taekwondo y el gimnasio donde realizaban la actividad necesitaba un arreglo urgente. Así comencé, logrando que se arreglara ese piso. Se fueron sumando otras necesidades y terminé dentro de una Subcomisión, teniendo responsabilidades. El tiempo y mis ganas de ayudar hicieron mi “carrera política”.
Verónica Villar: En el 2011, cuando River estuvo en su peor momento, entendí que la única manera de poder ayudar era involucrándome y no desde atrás de una computadora. Para cambiar las cosas había que trabajar y desde adentro.
- Si bien actualmente forma parte de la Comisión Directiva, ¿qué otra función cumple dentro del club?
Carolina Avalis: Vengo de ser vicepresidente del área de RRPP.
Clara D’Onofrio: Desde hace 8 años que estoy en Fundación River Plate, donde empecé como vocal, después secretaria y tome la presidencia hace 3 años. Trabajo codo a codo con el equipo y diariamente buscamos fomentar los valores del deporte en niños, niñas y jóvenes en contextos vulnerables.
Gabriela Cenoz: Actualmente soy presidenta del Fútbol Femenino. Llevamos ya 8 años gestionando el área y ha tenido un crecimiento exponencial tanto puertas adentro de la Institución como afuera a nivel deporte en general. La profesionalización del fútbol femenino exige jerarquizarlo y ese avance debe acompañarse con políticas de todo tipo para mantener la grandeza de River en todos los espacios.
Marcela Mallet: Soy Presidenta de la Comisión de Actividades Sociales, llevo adelante las Gimnasias Recreativas para los socios a partir de 16 años, el Centro de Iniciación Deportiva para socios de 3 a 12 años, y la Colonia de Verano e invierno.
Verónica Villar: Actualmente estoy a cargo del Departamento social, donde vengo trabajando los últimos 7 años.
- ¿Cuán importante es que clubes como River les den espacio a las mujeres?
Carolina Avalis: Inmenso. Siendo River uno de los clubes más importantes de América, tiene mucha trascendencia todo lo que sucede aquí. Marcar tendencia y poner sobre la mesa temas tan claves como abrir espacios y oportunidades para que las mujeres podamos desarrollarnos y aportar valor, demuestra que es posible trabajar por la igualdad y empezar a romper de a poco y en conjunto las barreras estructurales que nos siguen atravesando, como la del machismo. Ojalá sirva de inspiración para que otros clubes puedan correrse de lo que “siempre se hizo” porque estaba establecido por mandatos sociales.
Clara D’Onofrio: Sin duda que lo que River haga en cualquier contexto es de una trascendencia enorme. Hay que saber usar esa fuerza y esa responsabilidad.
Gabriela Cenoz: Es muy importante porque River es enorme, y ser reconocidas en espacios de poder, como lo son las comisiones directivas, implica y representa un compromiso del club para con el género femenino. Particularmente creo que las mujeres aportamos un plus en la gestión, porque solemos tener miradas diferentes a las de los hombres. Entonces, cuando trabajamos en conjunto, las decisiones terminan teniendo una visión más abarcativa e integral.
Marcela Mallet: Es muy importante ya que River ha reivindicado, puso de manifiesto y le dio valor al trabajo que realizamos muchas mujeres en las diferentes áreas. Por lo general, en los deportes federados, somos muchas socias las que llevamos adelante todo el trabajo de coordinar el papeleo con las Federaciones, los padres, los deportistas, organizando los viajes para las diferentes competencias, etc. En todas las áreas que tiene River hay una gran cantidad de socias que ayudan y coordinan “silenciosamente” para que todo funcione.
Actualmente, las 5 vocales que integramos la HCD somos mujeres de trabajo en diferentes áreas del club. Cada una de nosotras llegamos a este lugar desde una gestión realizada a lo largo de los años.
Verónica Villar: siendo el club más importante de la Argentina, es un ejemplo que River le dé el lugar a las mujeres.
- ¿Por qué cree que otros clubes del fútbol argentino no se animan a dar ese paso?
Carolina Avalis: Todos estamos atravesando procesos de cambios y aprendizajes. Los tiempos de las personas no son iguales. También hay otras variables como el miedo a lo desconocido, el temor a perder poder, a tener más competencia… pero en el fondo, si miramos para adentro, esas cosas no dejan de ser inseguridades. Si ponemos el club por encima de las personas, deberían entonces evolucionar las políticas de los mismos al ritmo que se mueve la sociedad, o acaso ¿no somos un reflejo de la sociedad? Confío en que más temprano que tarde se irá dando el cambio, en todos los clubes, pero entiendo que los procesos no son iguales para todos.
Clara D’Onofrio: Desconozco la composición de otros clubes, pero ojalá le den participación a gente que pueda sumar, sea hombre o mujer. Cuando se suma gente capaz y con ganas de hacer cambios es un bien para todos.
Gabriela Cenoz: Creo que se le teme a lo desconocido, pero principalmente porque los espacios que ocupamos hoy las mujeres inevitablemente son espacios que han perdido los hombres, entonces hay mucha resistencia. De todos modos, considero que de a poco se van haciendo a la idea y que cuando logren cuantificar los beneficios de incorporar mujeres en todos los ámbitos, no estaremos hablando de cupo sino de paridad.
Marcela Mallet: River es pionero en muchos aspectos. Este es uno de esos casos. En plena pandemia las socias logramos que se aprobara el “cupo femenino”. Trabajamos unidas por un bien común y por un derecho que no se venía considerando a la hora de presentar las listas de candidatos. River mostró el camino y seguramente otros clubes tomarán el ejemplo. Las socias tenemos la misma capacidad y el mismo derecho a ser candidatas que un socio. En la última votación de diciembre todas las listas cumplieron con lo establecido. Es un gran logro institucional.
Verónica Villar: En un ámbito tan vinculado al hombre creo que todavía les da miedo dar lugar a las mujeres, pero esperamos que pronto todos los clubes se sumen a esta iniciativa y den el lugar que se merecen por capacidad y gestión sin mirar el género de las personas.
- ¿Siente que el fútbol sigue siendo un ambiente machista?
Carolina Avalis: Todos fuimos criados en el machismo. Yo misma lo fui. Tenemos internalizadas muchísimas ideas y costumbres que tienen que ver con un modelo en donde el que decide es el hombre. Tomar distancia, poder verlo, entenderlo y desarmarlo para volverse a amar con nuevas bases lleva no sólo tiempo sino trabajo y voluntad. Hay que deconstruirse para volver a construirse. Todos tenemos que hacerlo, y es un aprendizaje que lo debemos hacer en conjunto. No se trata de acusar, se trata de comprender y acompañar.
Clara D’Onofrio: Yo no lo siento machista, distinto es que es un ambiente acostumbrado al hombre. Pero en River hace muchos años que está Sandra Rossi en el plantel y convive de la mejor manera. Yo he viajado muchas veces con el equipo y siempre me han hecho el lugar y sentirme cómoda.
Gabriela Cenoz: Claro que sigue siendo machista. Que algunas tengamos la posibilidad de participar no significa que no lo sea. Cuando empecé a ir a la cancha éramos 5 mujeres cada 100 hombres, hoy el porcentaje ronda el 35 por ciento; y la participación también ha aumentado considerablemente. Ese crecimiento, sumado a todo el cambio estructural del último tiempo y a que las mujeres ya no nos dedicamos exclusivamente al ámbito privado del hogar, irá de a poco rompiendo con el machismo imperante y dándole paso a un fútbol más inclusivo.
Marcela Mallet: Es cuestión de cambio de paradigma y entender que los deportes no son “para hombres o para mujeres”. El fútbol es un deporte, que es practicado por todos los géneros.
La realidad es cambiante, y hay que adaptarse. Con paciencia, trabajo y educación, en poco tiempo, podremos lograr ese cambio de mentalidad.
Verónica Villar: Sí. No en todos los clubes, pero en muchos aspectos sigue siendo un ambiente machista, me pasó de ir a una cancha y que no tenga baño para mujeres.
- ¿Qué sintieron el día que asumieron como vocales?
Carolina Avalis: Una mezcla enorme de emociones. Alegría por lo que estaba viviendo, pero una parte de mí sigue creyendo que es un sueño y que en algún momento voy a despertar. También un orgullo que no me entra en el cuerpo y algo de nostalgia, porque me hubiera gustado poder compartirlo con mi familia, que vive en el Sur y no pudo estar presente.
De todas maneras mi papá ya se encargó de contar en todo Allen (Río Negro) que su hija menor es directiva de River. Y sí, la casi Ubalda Matilde estaba predestinada a vivir por River Plate.
Clara D’Onofrio: Era un día de mezcla de emociones, ya que era la despedida de mi papá después de tantos años de estar presidiendo River y comenzaba un nuevo camino para mí.
Me da orgullo lo que hizo mi papá estos 8 años, y haberlo podido acompañar de cerca en su recorrido. Trabajamos en conjunto en lo que respecta a Fundación y haber podido sumar un granito de arena a la grandeza de River es de orgullo, felicidad. Papá hizo su gran recorrido y yo haré el mío. Cada uno con su estilo y sus maneras, pero siempre con los mismos valores que son los que me inculcaron en casa.
Gabriela Cenoz: El día que asumimos no pude estar, porque me encontraba con el plantel del fútbol femenino en un torneo en Brasil. Para recibir mi diploma subieron una gran amiga y compañera de gestión y mi hija. Lo vi por las redes sociales del club y la emoción fue enorme, no pude estar mejor representada. Ser vocal de la Comisión Directiva de River es un orgullo enorme, pero no implica más trabajo porque el compromiso con la gestión es el mismo; sólo que ahora tengo el reconocimiento formal por todo lo que he trabajado estos años. El impulso constante es la pasión que sentimos por estos colores, es tiempo de seguir creciendo y motivando a más mujeres a involucrarse en la política del club porque, como mencioné antes, aportando nuestra visión hacemos la diferencia.
Marcela Mallet: Fue un momento maravilloso. Para mí es un gran honor y responsabilidad. Estoy muy orgullosa de haber llegado a la Honorable Comisión Directiva y representar a miles de socias que confían en nuestra gestión.
Verónica Villar: Orgullo, felicidad plena, una sensación que no se puede explicar con palabras.
Vale destacar que ellas no son las únicas mujeres que forman parte de la actual Comisión Directiva de River Plate. Gabriela Rodríguez y Paula Clementi aparecen como vocales suplentes, Ana Paterno y Susana Gil como fiscalizadoras titulares, y Silvia Cortés como fiscalizadora suplente.
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