Justo antes de las Fiestas, Juan Román Riquelme se pasó por la Bombonera para observar de cerca cómo iban los trabajos de drenaje que se están realizando en el césped para evitar que en el futuro el campo del Alberto J. Armando vuelva a inundarse por las lluvias. “Hoy 22 de diciembre estamos acá en el jardín de casa, arreglándolo. Espero que los bosteros pasen una linda fiesta, que disfruten mucho, les mando un beso grande. Felicidades”, fue el mensaje del ídolo xeneize, con mate y termo en mano. Quien replicó su aparición, en Deportivo Español, fue Pablo Migliore.
El arquero de 39 años, que confirmó que volverá a la actividad profesional en el Gallego en la Primera C, se grabó en el campo de juego del estadio España en el que imitó a su ex compañero: “Bueno, estamos acá en el jardín de casa, espero que todos los hinchas de Español estén contentos. Mirá cómo estamos dejando la cancha. La estamos dejando linda, así que bueno, nada. Espero que estén bien, nos estamos viendo, cuídense”.
Muchos seguidores se tomaron con sorna las imágenes que publicó en el que fue el primer día de pretemporada con el plantel del Bajo Flores, que el torneo pasado lo tuvo como colaborador del cuerpo técnico comandado por Juan Chumba (histórico ayudante de Ricardo Caruso Lombardi), pero no se puede pasar por alto la historia con cortocircuitos que Migliore y Riquelme tuvieron en el vestuario de Boca como compañeros.
Hace algún tiempo, el Loco desmintió haber tomado del cuello a Román como se rumoreó en aquel entonces, pero sí admitió que tuvieron un fuerte cruce verbal: “Se corrió la bola de que yo lo había agarrado del cuello después de un partido. Yo si lo llego agarrar del cuello se me borra la cinta y no paro hasta que me lo llevo. Qué lo voy a agarrar del cuello y lo suelto. Hay un momento que cruzo la línea. Lo encaré por otra cosa. Fue una boludez, por un chiste que no me banqué y le marqué mi posición”.
Y precisó: “Antes de andar jugando, yo a los giles como vos los levanto por el aire, no te confundas conmigo. Me respondió que era una joda. Yo le contesté que todo bien, que no pasaba nada, pero que yo no soy un gil. Vos no querés que te jodan, no jodás. Yo no jodo con nadie. Después terminamos bien. Yo no necesito un saludo ni nada de eso. Yo también iba a trabajar”.
Además, tras el episodio de “intoxicación” que tuvo como protagonistas a los colombianos Edwin Cardona y Sebastián Villa, más el peruano Carlos Zambrano, el golero había opinado con crudeza: “A mí me nace un sentimiento de bronca y el hincha de Boca no piensa muy diferente a lo que pienso yo, quedate tranquilo de eso. A mí no me importa la política, quién es el presidente hoy, quién fue el año pasado. Yo soy hincha de Boca, no soy hincha de Riquelme ni de Palermo. No me caso con nadie”
El futbolista que hasta hace poco se subió al ring para boxear en algunos combates, formó parte del plantel xeneize desde 2006 hasta 2008: obtuvo los títulos del Clausura 2006, Recopa Sudamericana 2006 y Libertadores 2007, la última que ganó la institución con un Riquelme en su máximo esplendor.
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