Terminada la final del Reducido de la Primera Nacional en la que Barracas Central superó por penales a Quilmes (tras igualar 0-0), en la que pudo conseguir el segundo ascenso a la Liga Profesional, los jugadores del Guapo brindaron sus testimonios con una alegría exultante, ya que consiguieron un hito para el equipo del sur porteño. Uno de ellos fue Iván Tapia, hijo del presidente de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), Claudio “Chiqui” Tapia.
Fue grande el desahogo luego de un campeonato extenso, que en el caso de Barracas se sumaron cuatro partidos extra, la final por el torneo que perdió ante Tigre, los dos contra Almirante Brown en las semifinales del Reducido y el partido decisivo por el Reducido ante el Cervecero.
“Es el día más feliz de mi vida, por lo menos en lo deportivo. Nosotros la pasamos muy mal, sufrimos mucho. En mi caso personal la he pasado muy mal y he tenido un año muy difícil. Nosotros nos callamos ante las críticas y demostramos en la cancha, todos los partidos y hoy es el fruto de un año larguísimo”, comenzó Tapia en diálogo con TyC Sports.
“Esto es para mi viejo, mi vieja”, apuntó primero en su dedicatoria, pero hubo una especial: “también se lo dedico a un amigo, Ricardo, que se la pasó hablando mal de este club, de que este equipo ganaba porque estaba arreglado. La debe estar pasando mal ahora”, disparó en clara referencia a Caruso Lombardi.
El entrenador fue uno de los más críticos del club que preside otro hijo del “Chiqui” Tapia, Matías, por las polémicas decisiones arbitrales que tuvo a favor en el torneo regular. La controversia del DT con el club porteño viene desde diciembre de 2020 cuando dirigía a Belgrano de Córdoba y perdió con Barracas Central con un gol en el minuto 95, en un cotejo que terminó en escándalo, con acusaciones cruzadas.
“Se la pasó hablando boludeces, cosas malas, espero que mi amigo Ricardo no esté tan enojado. Nos vivieron criticando por cosas que no eran. Demostramos que Barracas es el mejor”, concluyó el capitán.
“RICARDO hay muchos, ¿apellido ? Con huevos hay pocos. La final, normal, lo anterior para llegar, tristísimo para el fútbol argentino. Muchos lame botas, yo no. Igual felicitaciones BARRACAS, se dio lo esperado. Ivan ¿por qué no jugaste las finales (pechito frío)? Gracias papá, ja”, devolvió Caruso en su cuenta de Twitter.
El partido jugado en la cancha de Racing fue intenso en la primera mitad, con jugadas para ambos lados sin tener un trámite vertiginoso. En el complemento el juego entró en una meseta y no hubo jugadas de peligro. En los últimos minutos no arriesgaron y ambos conjuntos se conformaron con definir el pleito con lo penales.
En la definición desde los doce pasos, Barracas Central fue más certero y convirtió sus cinco tantos, mientras que Quilmes marcó cuatro y erró el último a cargo de Rafael Barrios.
El Guapo había sido el mejor en la Zona B, logró el pase a la final ante Tigre, en la que perdió por la mínima diferencia en la cancha de Banfield. Luego pasó a las semifinales del Reducido donde eliminó a Almirante Brown.
El equipo porteño solo logró una vez el ascenso a Primera, en 1919, instancias en las que se consagró en Intermedia. Disputó 15 temporadas hasta que en 1934 se concretó la fusión de la Liga Profesional con la Asociación Amateurs y debió pasar a la Segunda División desde 1935. Desde ese momento estuvo en el Ascenso, hasta que luego de 88 años consiguió el esperado pase a la máxima categoría.
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