10 perlitas de los enfrentamientos entre River Plate y Colón: del debut de Ramón Díaz al nacimiento de una pesadilla del Millonario

Roberto Perfumo se instaló en la galería de los mejores futbolistas argentinos de todos los tiempos. Su velocidad, sentido de la oportunidad y rapidez mental fueron algunos de los atributos que generaron que muchas veces fuera elegido como el número 2 más destacado del país. Por sus condiciones, era natural que se quedara en el fondo, sin desprenderse demasiado en ataque, como apoyo de sus compañeros, sobre todo en los exitosos períodos de Racing y River, donde le tocó compartir zaga con jugadores de notable vocación ofensiva como lo fueron Alfio Basile y Daniel Passarella, respectivamente. Por eso es natural que haya convertido apenas 18 goles en 317 partidos por torneos de AFA. El último de ellos fue en la noche del 6 de enero de 1978 en cancha de Huracán, donde los Millonarios hacían de local por las remodelaciones del estadio Monumental por el Mundial ‘78. El cuadro dirigido por Ángel Labruna superó a Colón por 5-0, con un equipo conformado por tres grandes figuras y otros futbolistas de escaso recorrido con esa camiseta: Fillol; Zeballos, Perfumo, Amorone, Raffaelli; Coudannes, Pitarch, Alonso, Commisso; Seppaquercia y Coscia.

El campeonato Metropolitano de 1978 fue muy extenso y quedó en el recuerdo por el título logrado por Quilmes y por haberse interrumpido para la disputa del campeonato mundial que ganó Argentina. River tenía un excelente plantel, aunque varias de sus figuras no pudieron estar en la primera parte del certamen, concentradas por César Menotti en busca del gran objetivo. En la segunda fecha viajó a Santa Fe para visitar a Colón y a la media hora ya estaba en ventaja de 2-0 por las conquistas de Alonso y Marchetti. Lejos de sentirse superado, Colón ajustó las marcas, se fue al ataque y consiguió una histórica goleada por 5-2 con tantos de Villarruel (2), Aricó, Luñiz y Di Meola.

Ramón Ángel Díaz ha sido uno de los más imponentes goleadores argentinos de los últimos 50 años. Con el paso de los años le fue agregando aplomo y tranquilidad para la definición a su tremenda velocidad, que fue lo primero que impactó cuando hizo su aparición. Y fue justamente Colón de Santa Fe el rival ante el que hizo su debut oficial el 13 de agosto de 1978 en cancha de Huracán con una victoria por 1-0. El equipo titular, con el entrenador Ángel Labruna incluido, se encontraba de gira por Europa y por ello bajo la conducción de Norberto Yácono, en el torneo local se presentaba un cuadro alternativo. El Pelado jugó como número 10, que era su posición habitual, hasta que pocos meses más tarde, en una práctica de la selección juvenil, César Menotti lo ubicó como delantero centro, dejando la posición de volante creativo a un tal Diego Maradona, con quien Díaz formó una dupla letal.

En septiembre de 1980 River Plate era indiscutiblemente el mejor equipo del fútbol argentino y lo había refrendado con resultados, ya que era el tricampeón vigente. En la segunda fecha del torneo Nacional, donde iba a intentar, sin éxito, el récord de cuatro coronas consecutivas visitó a Colón. La derrota por una 1-0 fue sorpresiva, no tanto por la visita a ese estadio, siempre riesgoso, sino porque el cuadro santafesino no atravesaba un buen momento. Pero lo que quedó en el recuerdo es que el autor de la única conquista de aquella tarde, marcó su primer gol oficial en torneos de AFA y con el paso de los años se iba a convertir en una pesadilla para el club de Núñez con las camisetas de Velez Sarsfield y Boca Juniors: Jorge Comas.

El tremendo impacto que provocó en el fútbol local el pase de Maradona a Boca Juniors, retumbó un poco más en el estadio Monumental. River contaba con un plantel desbordante de estrellas, pero su presidente, Rafael Aragón Cabrera, sintió la necesidad de salir a competirle a su tradicional adversario, con una contratación acorde. No había muchos futbolistas que pudieran igualar lo que significaba Diego y uno de ellos era, sin dudas, Mario Alberto Kempes. Tras varias negociaciones, el Matador llegó a Buenos Aires y pocos días más tarde debutó con la banda roja. Fue el domingo 15 de marzo, en una goleada por 4-0 ante Colón en el estadio Monumental, donde marcó dos tantos, uno de ellos de penal. Hubo que esperar varios meses para observar su mejor versión, que apreció en el Nacional, donde fue el autor del gol del título ante Ferro Carril Oeste.

La temporada de 1997 fue muy auspiciosa para River, ya que logró los dos títulos locales en disputa más la última edición de la Supercopa, aunque no pudo retener la Copa Libertadores. En el Clausura arrancó muy bien y estaba en la cima de las posiciones hasta que dos goleadas consecutivas lo alejaron de la punta. Primero cayó 4-1 con Estudiantes en el Monumental y una semana más tarde debía visitar a Colón en Santa Fe, que era el nuevo líder. Y como tal dio una verdadera lección de fútbol, produciendo una de las derrotas más duras que sufrió Ramón Díaz como entrenador Millonario, al triunfar por 5-1. Dos de los futbolistas más relevantes de los Sabaleros fueron las figuras de aquella tarde, señalando dos y tres goles respectivamente: Cristian Castillo y Marcelo Saralegui. Sin embargo, esa fue la última derrota de River en el campeonato, donde se repuso y terminó siendo campeón una fecha antes del final.

El Apertura 1997 fue un campeonato que quedó en el recuerdo por la pelea por el título entre River y Boca, con record de puntos sumados por ambos en torneos cortos. A falta de dos fechas, los Millonarios recibían a Colón con tres unidades de ventaja sobre su adversario que debía visitar en Salta a Gimnasia y Tiro. Fue un domingo de gran emoción, con cambios en el score, pero finalmente ambos triunfaron y dejaron la definición para la jornada final. Pero el hecho que quedó por siempre en la memoria se dio a los cinco minutos de juego en el Monumental, cuando Enzo Francescoli abrió el marcador con un estupendo golpe de cabeza, ya que ese fue su último gol oficial. En total señaló 137 en 237 encuentros oficiales con la camiseta de la banda roja.

El 4 de marzo de 1998 es una fecha muy especial en la historia de Colón, ya que ese día disputó por primera vez un partido por la Copa Libertadores. En su estadio recibió a River Plate en la apertura del grupo 5, que compartieron con los equipos peruanos Alianza Lima y Sporting Cristal. Fue un partido muy disputado, donde los Millonarios se impusieron por 2-1 con tantos de Celso Ayala, Marcelo Escudero y Juan Pablo Sorín en contra. Luego ambos equipos avanzarían hacia los octavos de final. Dirigidos por Daniel Córdoba, los once Sabaleros que jugaron por primera vez el máximo torneo continental fueron: Leonardo Díaz; Hugo Ibarra, Luis Medero, Héctor Rodríguez Peña, Dante Unali; Marcelo Saralegui, Claudio Marini, Diego Castagno Suárez, Rodolfo Aquino; Cristian Castillo, Esteban Fuertes.

En diciembre de 1989 Reinaldo Merlo dejó de ser el técnico de River de manera sorpresiva, ya que estaba en el primer puesto de las posiciones, pero renunció porque la dirigencia que lo había llevado perdió las elecciones a manos de Alfredo Dávicce. Siguió su carrera como entrenador por varios equipos, con el punto más alto en la consagración de Racing en 2001, luego de 35 años de sequía en títulos locales, pero siempre con el anhelo de regresar al club de Núñez. Y el hecho finalmente se concretó, casi 15 años después, en septiembre de 2005. El primer partido oficial fue ante un buen equipo de Colón que dirigía el Tata Martino en cancha de Velez, donde consiguió una festejada victoria 3-2, luego de estar perdiendo por 2-0. Pese a la sonrisa inicial, el equipo no logró ser protagonista, nunca peleó el título del Apertura (que quedó en manos de Boca) y su ciclo se extinguió en forma repentina en enero de 2006, luego de una discusión con Marcelo Gallardo, tras el estreno en el torneo de verano ante Independiente en Mar del Plata.

El 10 de agosto de 2008 fue el debut para Colón y River en el Apertura. El partido finalizó igualado 1-1 en Santa Fe con goles Alejandro Capurro para el local y el uruguayo Robert Flores para el visitante. Ambos venían de realidades opuestas en el campeonato anterior, ya que los Millonarios habían sido campeones con Diego Simeone como entrenador y los Sabaleros zafaron de la promoción venciendo en la última fecha a Racing, que si debió disputar esa instancia, y salvarse, ante Belgrano. Lo que nadie podía pensar es que aquel cotejo inaugural del Apertura 2008 sería el primer escalón de un certamen que fue una verdadera pesadilla para la institución de Núñez, ya que finalizó en el último puesto, como triste preámbulo del descenso que llegaría un par de temporadas más tarde.

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