Uno de los partidos de la fecha en la Premier League tuvo lugar en el estadio de Londres: West Ham dio el golpe y bajó de la cima del certamen al Chelsea, que no pudo sostener la ventaja de un gol en dos oportunidades. El argentino Manuel Lanzini convirtió -de penal- el primer tanto de los Hammers, que achicaron la brecha con el tope de la tabla y se mantienen firmes en zona de clasificación a la próxima Champions League.
El brasileño Thiago Silva abrió la cuenta para los Blues al minuto 28 con un cabezazo letal, pero al rato respondió Lanzini con una pena máxima insólita: el arquero francés Edouard Mendy retuvo demasiado el balón en sus pies, se dejó presionar por Jarrod Bowen y le cometió infracción dentro del área. El ex River no falló e igualó. Sin embargo, a los vestuarios se irían arriba en el tanteador los conducidos por el alemán Thomas Tuchel, gracias a un tiro formidable de Mason Mount sobre el cierre.
El entrenador escocés David Moyes arengó a los suyos para prevalecer en el complemento y su charla técnica dio frutos. Al minuto 56 Bowen ensayó un zurdazo implacable que hizo estéril la estirada del guardameta rival y más tarde tuvo el tercero luego del desborde de Michail Antonio. El desnivel se produciría en el epílogo, por medio de un extraño remate de Arthur Masuaku que pareció desviarse en un oponente y descolocar a un Mendy que tuvo una jornada olvidable.
De esta manera, los Hammers se acomodaron en la clasificación de la Premier League y marchan cuartos con serias aspiraciones a las copas internacionales de la siguiente temporada. Chelsea, que dejó escapar la chance de perpetuar su liderazgo (Liverpool derrotó sobre la hora al Wolverhampton y lo superó, mientras que Manchester City venció al Watford y es único puntero), tendrá que reponerse el próximo fin de semana contra el Leeds United de Marcelo Bielsa en Stamford Bridge. Por su parte, West Ham contará con la posibilidad de reafirmar su gran presente como visitante del Burnley, uno de los conjuntos que marchan en la zona de descenso.
Formaciones:
Estadio: Londres
Árbitro: Andre Marriner
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