El fútbol argentino es una maquinaria perfecta a la hora de entregar imágenes surrealistas. Y más cuando las barras bravas están metidas en ello. Aún así, lo que se vivió el miércoles por la tarde en Olavarría excede cualquier capacidad de asombro: al término de un partido importante del viejo torneo Federal B, rebautizado ahora Regional (comparable a lo que sería la Primera C en el fútbol metropolitano), los jugadores del equipo local, Racing, se enfrentaron con la barra del club que los habían ido a amenazar, y terminaron corriéndolos por la platea en un hecho absolutamente inédito en el fútbol local. Como dirían los seguidores de las categorías menores, Ascenso argentino, no lo entenderías.
La insólita situación tiene una historia detrás. Racing, que por su popularidad es considerado el Boca de Olavarría, en su obsesión por subir al Federal A armó un equipo con jugadores de renombre del Interior, muchos de una categoría superior al Regional. Pero las cosas no le están saliendo muy bien y está último en su grupo. Sin triunfos hasta el momento, recibía a Embajadores, club fundado y presidido por Fernando Tero Di Carlo, aquel centro delantero de los 90 que se cansó de hacer goles en Estudiantes de La Plata, Huracán, San Martín de Tucumán y Lanús entre otros equipos. Y al comienzo parecía que la suerte podía cambiar porque apenas iniciado el segundo tiempo, Matías Lozano saltó más alto que nadie tras un córner y le dio la ventaja al equipo local.
Pero a partir de ahí, Embajadores se adueñó del partido y el clima en el estadio empezó a ponerse espeso. Hasta que en la última jugada del match, en el sexto minuto de descuento, llegó el empate y el final del encuentro. Los jugadores de Racing se fueron rápido hacia el vestuario y los barras creyeron que era el momento de actuar: saltaron de la popular a la platea y de allí trataron de dirigirse hacia el vestuario en medio de gritos amenazantes. Varios futbolistas sabiendo que estaban sus familiares en ese sector salieron a calmar la situación pero fue en vano: los barras quisieron pasar de los dichos al hecho y los players no se quedaron atrás y terminaron corriéndolos por la platea con dos de ellos, Franco Janson (hermano de Lucas, el delantero de Vélez) y Luciano Rojas como abanderados de la resistencia.
Todo lo sucedido quedó registrado por el canal local Verte TV e Infobae habló con Cristian Gallego, director de deportes de la emisora y comentarista del partido en cuestión, quién contó cómo se sucedieron los hechos. “El clima estaba pesado porque Racing se armó para ascender. Había unas 1500 personas en la cancha y sólo 26 policías pero ninguno en la zona de la platea techada, donde siempre van los familiares de los futbolistas. Y cuando los barras, que serán unos 15, pasaron hacia allí y los jugadores se enteraron, temiendo por alguna agresión a sus seres queridos salieron a poner paños fríos pero ocurrió lo contrario, porque los barras estaban muy exaltados y no sólo por el resultado sino también por el propio estado de ellos. Acá corre bastante el alcohol y las drogas y además tienen de rehenes a los dirigentes del club, porque Olavarría es una ciudad chica donde todos se conocen, por eso si un dirigente se planta le rayan el auto o cosas peores. Cómo será el tema que no hubo denuncia, no detuvieron a nadie y cuando terminó la pelea, los barras, volvieron a saltar, pasaron un alambrado y se fueron sin problemas. Es la primera vez que yo veo algo así en una cancha y con mi compañero no salíamos de nuestro asombro. Yo estaba haciendo una nota y tuve que cortar todo porque la situación nos superó por completo. Da mucha bronca que Olavarría sea noticia por esto”.
Tal como aseguró el editor de deportes de Verte TV, Infobae pudo corroborar que no hubo detenidos ni actuación policial. El torneo es organizado por el Consejo Federal y se juega con ambas hinchadas con la aprobación del Aprevide, el órgano de Seguridad Deportiva de la Provincia de Buenos Aires. Pero para el próximo partido de visitante que será el lunes a las 17 horas frente a Ferro Carril Sud, los hinchas de Racing no podrán ir y la información es que cuando deba jugar el siguiente de local, nada menos que el clásico frente a Estudiantes, deberá hacerlo puertas cerradas.
SEGUIR LEYENDO: