Julián Álvarez fue uno de los héroes de la tarde del domingo. El talentos delantero fue la gran figura en el triunfo de River en el Superclásico contra Boca disputado en el Monumental y confirmó su gran presente que lo llevó a la selección argentina.
“Nos faltó un gol más para que fuera acorde con lo que resultó el partido”, explicó en diálogo con TNT Sports el cordobés de 21 años, luego de marcar los dos tantos de la victoria del Millonario. Sin embargo, su destino parecía premeditado.
La sorpresa la dio Claudio Gorgerino, presidente comunal de Calchín, el pueblo en el que creció el nuevo ídolo de La Banda. El funcionario reveló en una entrevista brindada a Super Deportivo (Radio Villa Trinidad) una charla íntima que había tenido con el delantero horas antes del crucial encuentro. “Le dije que lo busque a Rojo que lo iba a hacer expulsar y que sea mas egoísta: que la primera que tenga le pegué al arco y le apunte a la cabeza a Rossi, que iba a hacer gol”, confesó el funcionario.
“Le escribí para desearle mucha suerte y además le dije dos cosas. Primero: que le hable al árbitro y le recuerde la manera en que le había pegado Marcos Rojo en el clásico de la Copa Argentina; porque lo había marcado todo y al día siguiente no se podía mover. Le comenté que le iba a ir fuerte de nuevo, que lo siga buscando que lo iba a hacer expulsar, porque el estaba muy rápido y el era muy calentón”, continuó Gorgerino con sus detalles en la entrevista radial. Y concluyó: “Yo lo conozco de muy chiquito a Julián y sabía que podía hacer lo que después termino haciendo. Siento mucho orgullo, por lo que hizo”.
Conforme con su producción, el goleador analizó las acciones que lo tuvieron como principal protagonista en Núñez: “En el primer gol ni mire al arco, solamente enganché y le pegué desde el borde del área y se metió arriba”, describió luego de su tarde soñada.
Álvarez venía de convertir en el Superclásico anterior por octavos de final de la Copa Argentina, cuando empataron 1 a 1 y Boca terminó pasando por penales, por lo que con las dos conquistas de ayer alcanzó a dos ídolos de ambos clubes en eso de anotar tres tantos en dos enfrentamientos consecutivos. La última vez había sido para Martín Palermo, hoy entrenador de Aldosivi, en 1999; pero previamente, en 1978, más de 20 años antes, lo había logrado Norberto “Beto” Alonso para los “millonarios”.
“Volver a jugar con público después de tanto tiempo en el Monumental fue una gran alegría, y haberle ganado a Boca fue un premio para todos”, destacó la figura que se sumará al seleccionado argentino para afrontar la triple fecha de las Eliminatorias. “Y en lo personal terminé muy contento, por la gente, por el equipo y por mí”, concluyó el goleador.
SEGUIR LEYENDO