Una de las esperanzas del podio se amparó en la presentación de Francisco Verón. El púgil de José León Suárez había tenido un gran debut ante el sueco Adam Chartoi y en su segundo combate enfrentó a Euri Cedeno Martínez, un dominicano que había quedado en el quinto lugar en los Juegos Panamericanos de Lima.
Durante el primer round el argentino intentó adueñarse del ring con una derecha potente que le hizo temblar las piernas a su oponente. El remisero de la pandemia quería continuar con su camino hacia la gloria y sus puños llegaban al destino deseado. Sin embargo, las tarjetas favorecieron al caribeño.
El segundo capítulo fue de más medición, aunque Cedeno expuso su izquierda para que el argentino sufra el cansancio y la velocidad del dominicano. Además, Martínez se mostraba extremadamente mañoso con algunos golpes bajos y otros fuera de término, dado que en ambos casos el moreno sorprendió con dos jabs luego del sonido de la campana.
Las ilusiones de Verón recayeron sobre la visión de los jueces. Pero en el tercer parcial la paridad se resolvió por los reflejos del caribeño. El 3-2 definitivo demostró que la pelea fue muy pareja y el fallo dividido dejó a Euri Cedeno Martínez a dos combates de la gloria.
“Me voy conforme, porque creo que hice una buena actuación, pero no se me pudo dar. Me tenía que cuidar un poco más. Hice mucho sacrificio para terminar mi ciclo amateur y ahora me voy a enfocar en el boxeo profesional”, dijo el bonaerense en zona mixta.
Bebu había llegado a la capital japonesa después de una destacada actuación en el Torneo Internacional de Boxeo de Estambul, donde obtuvo la medalla dorada. Pero en el país del sol naciente no consiguió el objetivo de subirse al podio, algo que Argentina no consigue desde los Juegos Olímpicos de Atlanta 1996, cuando Pablo Chacón alcanzó la presea de bronce.
Al boxeo argentino le queda una sola representante. Se trata de Dayana Sánchez, quien fue invitada para participar del certamen olímpico dentro de la categoría de 60 kilos. Como la canadiense Mandy Bujold ganó una demanda para concursar en los JJ.OO de Tokio, el organismo decidió invitar mayor cantidad de boxeadoras para cubrir las plazas vacantes. Una de ellas recayó en la mayor de las hermanas Sánchez.
La apuntada Bujold “había apelado la decisión del IOC Boxing Task Force (BTF) de, a la hora de evaluar los criterios de clasificación a los Juegos, considerar sólo las competencias de 2018 y 2019, cuando la canadiense no pudo competir porque estaba embarazada”. El Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) falló a su favor y la boxeadora canadiense no sólo consiguió el cupo para Tokio sino que también posibilitó que Sánchez, por decisión del COI, obtuviera su ansiada clasificación. La cordobesa, medalla de plata en los Juegos Panamericanos Lima 2019, asomaba en la posición 25 del ranking mundial y tercera en el escalafón de América.
SEGUIR LEYENDO