En el primer partido con la selección argentina de 2021, en una noche especial por los homenajes en continuado a Maradona, Lionel Messi no pudo tener una jornada plenamente satisfactoria. Es que el combinado nacional igualó 1-1 como local ante Chile por Eliminatorias, en un encuentro en el que contó con mayor cantidad de situaciones de gol, pero en el que le costó la elaboración de juego.
El capitán, de 33 años, hizo lo imposible por romper la igualdad, pero no logró vulnerar a Claudio Bravo, con quien mantuvo un intenso duelo personal. Sólo lo consiguió de penal, a los 23 minutos, tras la infracción de Marián a Lautaro Martínez que advirtió el VAR. Allí, cara a cara con su ex compañero del Barcelona, definió con un toque suave y efectivo, a la izquierda del guardameta.
El punta se golpeó el pecho y elevó sus dedos al cielo. Tras el cotejo, confirmó que la dedicatoria iba para Maradona, fallecido el pasado 25 de noviembre y quien fuera su entrenador en el Mundial de Sudáfrica 2010. “Era especial, por ser el primero sin él, queríamos representar a la Selección como siempre lo hizo él, dejando todo. Hay que seguir”, dijo el fantasista.
El rosarino dispuso de dos tiros libres a los que les sacó lustre, pero no consiguió introducir en el arco. En el primero, a los 45 minutos de la etapa inicial, su envío viajó hacia el ángulo y Bravo la sacó con una volada estética e impactante. El segundo se dio a los 35′ del complemento: su caricia de zurda depositó el balón en el ángulo superior izquierdo de Bravo. El ruido del travesaño impidió el grito sagrado.
En el epílogo, otra vez se topó dos veces con Bravo. A los 41, Messi se movió en diagonal y remató al primer palo. El arquero adivinó y rechazó abajo. Y a los 42, el intento de Leo fue al segundo palo, pero sin tanta potencia. El chileno se arrojó, plástico, para la foto. Ya tras el encuentro, el Pulga se quedó conversando un rato sobre el césped con su ex compañero, que no le permitió cerrar la noche en Santiago del Estero con una victoria.
A pesar de que Argentina no logró la victoria, Messi no se marchó disconforme con el rendimiento del equipo. Y optó por dar vuelta rápido la página pensando en el cruce del martes ante Colombia en Barranquilla. La Selección quedó segunda en la tabla de posiciones con 11 unidades, una menos que Brasil, el líder, y dos más que Ecuador, precisamente el rival de este viernes de la Verdeamarela.
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