Jaguares XV ganó la final de la Super Liga Sudamericana de Rugby (SLAR) y se consagró campeón el sábado tras derrotar 36-28 a Peñarol Rugby en el estadio Charrúa de Montevideo. De esta manera, consiguió el trofeo de forma invicta y con 12 victorias en esa misma cantidad de encuentros. Final de un torneo que exigió mucho tanto en lo físico como en lo mental, ya que los jugadores tuvieron que permanecer en burbuja por casi tres meses y jugaron los diez partidos de la zona de grupos cada 4 días. La primera etapa del campeonato fue en Chile y la segunda en Montevideo, Uruguay. ¿Sirve este nivel de competitividad para el rugby argentino? ¿Cómo se seguirá frente a los desafíos que impone la pandemia? Infobae dialogó con Francisco Rubio, gerente de de la Unión Argentina de Rugby, quien destaca los aspectos positivos de la Liga Sudamericana para la UAR y para Sudamérica Rugby, además de anunciar los pasos a seguir tras la experiencia que acaba de culminar.
-¿Qué es lo positivo de haber podido jugar la Liga Sudamericana?
- Lo importante es que empezamos a jugar, estamos en una situación donde no hay nadie en este momento, por lo menos en Sudamérica. Eso para nosotros es muy positivo. Hay regiones del país en donde no se juega hace más de un año y otros que ya han jugado, la situación es muy dispar. Por eso repito, lo mejor es haber empezado. Veníamos planeando esto desde el 2018, yo en ese momento estaba en Sudamérica Rugby, y lo que siempre te piden World Rugby y SANZAAR es el desarrollo a largo plazo del jugador. Entonces es como que nosotros teníamos muy buen nivel en Los Pumas y en Jaguares pero había un espacio muy grande en la etapa intermedia que seria entre los clubes y la franquicia profesional. Nosotros tenemos hechos controles físicos a los jugadores que venían de los clubes y que para estar a nivel de Jaguares tardaban entre doce y dieciocho meses. Eso impulsó a que se genere este nivel intermedio que lo tienen todos los países de élite del mundo. Justo nos agarró en el peor momento, por la pandemia, pero la idea es trabajar con los chicos para que logren dar el salto con mayores condiciones. Comparo mucho esto con lo que es la universidad, uno no sale de estudiar y entra directo al mejor estudio, haces pasantías, después un trabajo junior y así te preparás. Para nosotros es la plataforma ideal.
-¿Cómo pensás que va a ser la SLAR en el futuro?
-Como todo campeonato necesita un tiempo de maduración. Super Rugby nació como Top10 y después fue agregando equipos y evolucionando. Nosotros recién estamos en un primer año de competencia que podríamos decir que es un tanto irregular, no es normal estar dos meses y medio en una burbuja en dos países. Es un gran esfuerzo que están haciendo, el futuro va a ser con los equipos yendo y viniendo, con local y visitante, estamos apuntando a crecer.
-¿Qué es lo positivo para los staff técnicos?
-Estamos desarrollando entre tres y cuatro entrenadores por equipo, de los cuales el 80% son argentinos (Selknam, Olimpia Lions, Peñarol, Cafeteros y Jaguares XV tienen entrenadores argentinos) antes no podíamos, no teníamos una plataforma para poder trabajar y seguir entrenadores. Antes, al igual que los jugadores, saltaban de un club amateur a un seleccionado. Ahora pueden desarrollarse, aprender a manejar planteles, llevar y traer equipos, preparar partidos internaciones y pueden dedicar el tiempo necesario con mejores herramientas.
-¿Cómo se puede ayudar a las otras uniones sudamericanas a seguir creciendo?
-World Rugby y Sudamérica están haciendo un gran trabajo de capacitación en todos los países. Hay un grupo de trabajo de profesionales de alto rendimiento que están abocados a trabajar directamente con las uniones, y estas están muy compenetradas para desarrollarse. Por ejemplo, yo miro Olimpia Lions (equipo de Paraguay) que tiene un equipo con mayoría argentinos, uno podría pensar que de esa manera no crece el rugby en el país, pero yo estoy convencido de que el rugby necesita visibilidad, y he visto en las redes que este torneo con la buena actuación del equipo tuvo mucha repercusión. Hay gente que no sabe lo que es el deporte y al tener un equipo que representa la región, que a su vez tuvo un éxito que es haber llegado a las semifinales, logra un efecto de inercia que impulsa todo el rugby paraguayo, seguramente el año que viene va a haber más paraguayos y mejor nivel. Hay que empezar a generar este movimiento. No hay soluciones inmediatas, esto es año a año.
-¿Te sorprendió el nivel de los equipos que actuaron?
-Creo que los equipos fueron creciendo a medida que se jugaron los partidos. Como en todos lados hubo muchos cambios, Brasil cambió la dirigencia en la confederación y eso bien o mal repercute en la organización y para mi influyó en el juego. Necesitan un tiempo para estabilizarse y relanzarse. Tuvieron un proceso que lograron muchos éxitos con buenos resultados. Ellos priorizaron al jugador de Brasil, trabajaron mucho para prepararse para la clasificación al mundial. Selknam (Chile) tuvo un juego de menor a mayor. Estos equipos no tuvieron pretemporada, no jugaron amistosos previos al torneo. Creo que la primera etapa fue de adaptación, distinto con Jaguares XV, nosotros tenemos un sistema de alto rendimiento hace 10 años, el que entra al equipo lo hace como en un tren en movimiento, no digo que sea fácil, pero no es desde cero. Hubo chicos en los otros equipos que se conocieron directamente en Chile, no es fácil. Recién al final se empezaron a ver partidos más parejos, más competitivos con respecto a nosotros.
-¿Qué crees que hay que hacer para mejorar el campeonato?
-Es muy importante que después de esta liga sigamos trabajando, no hay que esperar a marzo del año que viene. Este es el puntapié inicial. Durante todo el año hay que trabajar para llegar a afiladísimos al año que viene. Esperemos que en el 2022 podamos hacer un torneo normal y que los equipos puedan llegar con una buena pretemporada, con amistosos, con partidos de ida y vuelta. La realidad es que la modalidad del torneo fue muy exigente, es muy duro jugar cada cuatro días. Es un torneo atípico y pienso que es exitoso al verlo terminar en forma ordenada. También en el futuro se va a poder traer jugadores del exterior, sudafricanos, europeos o isleños, el nivel de estos jugadores ayudaría muchísimo para crecer. Estamos aprendiendo, ahora haremos un balance y veremos qué se puede hacer para mejorar.
-¿Pudieron trabajar con los argentinos que juegan en los otros equipos?
-Tenemos muchos jugadores y la realidad es que no pueden jugar todos en el mismo equipo. Tuvieron la oportunidad de jugar 8 partidos de buen nivel. La realidad es que no podríamos haber visto en juego a todos, hoy pudimos ver jugar a un montón de jugadores que pasaron por Los Pumitas y por las distintas etapas del sistema de la Unión, en otros equipos. Había siete medios scrums argentinos en el torneo. Además jugadores como Felipe Ezcurra (capitán de Jaguares XV) o Sebastián Cancelliere pudieron jugar más cantidad de lo que venían jugando.
-¿Que viene para el futuro para estos jugadores?
-Estamos trabajando con Sudáfrica para poder jugar Currie Cup. El proyecto es trabajar en eso, pero Sudáfrica también tiene sus problemas y estamos haciendo lo mejor que se puede, nada es fácil. La idea sería ir con 30/35 jugadores, Sudáfrica está haciendo lo mejor posible para que se pueda hacer, pero hoy en día no hay nada confirmado. Después juegan los mejores dos de Sudamérica con los dos mejores de Norteamérica para la clasificación al Mundial y nosotros haríamos la preparación para esos partidos. También tenemos un posible partido de Argentina XV reemplazando a Gales que sacó World Rugby la semana pasada. Si todo sale bien estaríamos jugando otros doce partidos de acá a fin de año y si en un año en pandemia llegamos a jugar 20 o 22 partidos creo que nos tenemos que dar como satisfechos, ese es el objetivo de la Unión. Y si pueden volver y jugar en sus clubes mejor.