No bien asumió la dirigencia de Jorge Amor Ameal en Boca hubo un intento por diferenciarse de la gestión anterior. Y qué mejor idea que modificar su templo, quizás el símbolo y sello característico de la institución. La Bombonera, que justamente este año cumplió 80 años.
Sobre el cierre de 2020 es oportuno repasar el cambio estructural que atravesó el estadio Alberto J. Armando desde enero a diciembre, que contó con aproximadamente 20 nuevas obras, algunas de las cuales todavía están en proceso. La proyección para el futuro con el Master Plan impulsado por el Departamento de Obras está a cargo de Carlos Navarro.
Fue uno de los debates más candentes durante la campaña electoral de fines de 2019 entre las listas y los socios: cuál será el futuro de la mítica cancha que tiene reconocimiento a nivel mundial. Para la dirigencia entrante nunca hubo dudas respecto a la mudanza, es decir, no se barajó como opción. Y el mismo diseño de remodelación que se empleó antes de las elecciones de 2015 (en las que Ameal perdió con Angelici) se sostuvo con el tiempo. Bombonera 360 es el proyecto que, a largo plazo, mantendrá al emblemático recinto en el lugar al que siempre perteneció con mejoras sustanciales y fundamentalmente su ampliación.
Todos los cambios impulsados por la directiva pueden dividirse en tres segmentos: estética, optimización de la visión y reacomodamiento para la ampliación.
En lo que respecta al primer ítem se procedió a pintar la parte externa e interna de la Bombonera con un plan que le generó costo cero al club. El golpe de vista de los hinchas (hasta marzo, cuando se decretó la pandemia del coronavirus y se imposibilitó la concurrencia de público a los estadios) cambió radicalmente respecto al avejentado azul y amarillo que tenía anteriormente. Los trabajos se llevaron a cabo en la fachada y también en el interior con las tribunas cabeceras norte y sur. Como detalle extra se modificaron las 5.200 antiguas butacas celestes de la Platea L que desentonaban con el resto del estadio. Próximamente ese sector contará con una ampliación.
Esta última obra mencionada fue una de los movimientos de reestructuración de asientos que le permite ahora a la cancha de Boca contar con un aforo de 54.300 espectadores (hasta el año pasado contaba con 51.200). Y con el plan intensivo propuesto para el primer trimestre de 2021 se apunta a llegar a los 58.000 de capacidad.
Con la redistribución de asientos en el sector M de la Platea Media se ganaron 233 lugares, mientras que con la remoción de 533 butacas de la Platea K se obtuvo espacio en un sitio que a mediano plazo será popular por completo.
¿Más? Se colocaron 168 butacas en palcos abiertos y también se construyeron 12 palcos nuevos en la Platea Media para darles lugar a 120 hinchas más. En tanto, se llevó a cabo un reordenamiento de los espacios destinados a los sponsors en las gargantas de las tres bandejas para limpiarlas y que se vean de azul y amarillo, sin publicidades; y se refaccionaron integralmente los 89 baños de todos los sectores del estadio. En este momento se trabaja en la unidad de control operativo y la sala central de monitoreo con cámaras y pantallas. Se aplicará la última tecnología para que la Bombonera cuente con “la mejor del país”.
En cuanto a la visión, se retiraron los acrílicos que dificultaban el campo visual de los hinchas que se ubican en la Alta Sur (donde antiguamente iban los visitantes y en la actualidad los socios adherentes) y los vidrios templados de la Platea L (donde se hizo un foso en el que se ubican los efectivos de seguridad). Además, se quitaron los alambrados verticales y horizontales que se apostaban en la Media Sur. En un futuro no muy lejano, la idea (europea) es también remover los tejidos de atrás de los arcos, todo un desafío para la dirigencia y los fanáticos.
Claro está, lo que más desvela al simpatizante xeneize es cuándo se tirarán abajo los palcos para abrir camino a la construcción de las nuevas plateas del sector este que completarán el anillo de forma simétrica. Los contratiempos generados por el COVID-19 no hicieron más que atrasar las tratativas por las compras de las dos medias manzanas separadas del estadio por la calle Dr. del Valle Iberlucea. Y la crisis económica del país tampoco ayuda a la cuestión.
Es posible que se avance en las negociaciones con los propietarios de las viviendas aledañas durante esta gestión de Ameal y que las obras recién tengan fecha de inicio para el próximo mandato presidencial que arrancará en 2023. El denominado Master Plan de Bombonera 360 contempla un estadio que albergará a casi 80 mil personas.
GALERÍA DE IMÁGENES DE LA BOMBONERA
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