A casi un mes de la muerte de Diego Maradona (se cumple el viernes 25), Ana, una de las hermanas del Diez, hizo su primera aparición pública (hasta el momento, sólo había expresado sus diferencias con sus sobrinas Dalma y Gianinna). Y eligió un lugar especial para hacerlo: la localidad de Esquina, Corrientes, su ciudad natal y la de Chitoro y Doña Tota, sus padres.
Ana estuvo acompañada por Matías Morla, ex abogado del astro. Hubo Benítez, intendente de la ciudad, los recibió en su despacho y luego estuvieron presentes en el acto en el que se descubrió una placa que dejó oficialmente inaugurada la avenida Costanera Diego Armando Maradona. La hermana del ex futbolista recibió en manos del Intendente las partidas de nacimiento de Don Diego y Doña Tota. La avenida está en obra y Benítez confirmó que en los primeros meses de 2021 estará terminada. Además, sorprendió a Ana con el anuncio de una escultura que estará en el inicio de la avenida y dónde se podrá ver a Diego junto a sus padres. Morla, en el rol de titular de Sattvica, la empresa que tiene la marca de Diego, fue quien entregó la documentación para el uso sin lucro de la imagen de Diego en Esquina.
El evento continuó con “Las diez del 10″, la cruzada solidaria que inició Diego en plena pandemia, y que en la figura de sus hermana y de Morla recorrerá el país. Ambos entregaron juguetes a los niños de la ciudad y distintos presentes a representantes de merenderos de la zona.
Ana se emocionó hasta las lágrimas con un video que recorrió la infancia de ella en Corrientes y fotos inéditas de Diego en sus visitas a la ciudad, en la que solía disfrutar de uno de sus grandes pasatiempos: la pesca deportiva. El intendente además declaró “hijo dilecto” de Esquina a Pelusa, un reconocimiento que fue acompañado con un video inédito, en el que Diego nombra a la ciudad como “la mejor del mundo”.
Los discursos estuvieron a cargo de los representantes del ex capitán de la selección argentina, con la que fue campeón en el Mundial de México 1986. “Diego siempre preguntaba si el pueblo lo iba a querer para siempre y lo que estamos viviendo en Esquina es una muestra de eso. Les agradezco con el alma el amor que siempre tuvieron para mi hermano, nunca lo voy a olvidar”, dijo Ana. “Yo voy a seguir con su legado y su deseo que era el de estar siempre con quienes necesitan”, subrayó su ex apoderado. En el final del acto irrumpió el chamamé desde los parlantes. Y se oyó un sapucai colectivo que llegó al cielo para que lo escuche Maradona.
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