Inesperadamente, en los planes de Miguel Ángel Russo apareció un nombre de cara al encuentro de hoy (19:20 en la Bombonera) ante Lanús por la cuarta jornada de la Zona 4 de la Copa de la Liga Profesional: Renzo Giampaoli. El defensor central surgió como alternativa potable para cubrir un puesto en la zaga central tras la baja de otro joven como Gastón Ávila, quien volvió a dar positivo de COVID-19 en las últimas horas y fue dado de baja para el choque ante el Granate.
Giampaoli nació hace 20 años en la pequeña localidad de Bombal, situada a menos de 100 kilómetros de Rosario, Santa Fe. Formado en la cantera xeneize, le llegó la oportunidad de mostrar sus condiciones en la última pretemporada realizada durante la pandemia, en la que lo acompañaron otras jóvenes promesas como Agustín Lastra, Agustín Sandez, Enzo Roldán, Alan Varela, Cristian Medina, Aaron Molinas y Exequiel Zeballos. De todas formas frecuentaba algunas prácticas con la Primera desde 2019.
Capitán en la Reserva dirigida por Sebastián Battaglia, a Infobae le describieron a esta joya azul y oro como un defensor central “muy rápido y de enorme técnica” pese a su gran altura (1,88). “Mucho más técnico que físico”, fue el dato aportado sobre un futbolista que igualmente mejoró el desarrollo muscular en el último tiempo por su delgada contextura. En las menores supo saborear las mieles del éxito con títulos en su categoría (2000).
Desde que el Xeneize vendió a Leonardo Balerdi al fútbol europeo y más tarde Santiago Ramos Mingo se marchó al Barcelona de España a través de la patria potestad (Boca mantiene un litigio legal por esta cuestión), el nuevo apuntado en las inferiores boquenses fue Giampa.
Con el segundo equipo hace notar su liderazgo más a través del juego que por la comunicación, prioriza el orden y tiene buena salida con los pies. En la gran mayoría de sus actuaciones trabajó como primer marcador central, por lo que en caso de ser utilizado por Russo, sería el peruano Carlos Zambrano el que se movería como número 6.
Aunque todavía no sumó minutos oficiales en Primera División, Russo lo tiene muy en cuenta detrás de las principales alternativas en ese sector dentro del plantel: Lisandro López, Carlos Izquierdoz, Zambrano y Ávila. De hecho el cuerpo técnico lo siguió de cerca en los amistosos previos al reinicio de la actividad oficial contra Argentinos Juniors, Estudiantes de Río Cuarto y Barracas Central, más allá de ser habitué en las prácticas de fútbol y entrenamientos semanales.
Es cierto que el DT alistará una alineación con varios suplentes y recambio teniendo como referencia el choque copero de la próxima semana ante Inter de Porto Alegre (miércoles 25/11 en Brasil) por la ida de los octavos de final de la Libertadores, pero también que Boca necesita sumar de a tres esta tarde noche para reacomodarse en la zona del torneo doméstico tras la caída ante Talleres de Córdoba que lo dejó segundo. Con Izquierdoz suspendido, la duda en el fondo está entre Lisandro López y el santafesino que pide pista para acompañar a Zambrano.
El pasado 15 de septiembre firmó su primer contrato profesional con el Consejo de Fútbol, junto a sus compañeros Pablo Gerzel (también categoría 2000) y Juan Ignacio Baiardino (1999). A poco más de dos meses de haber rubricado su vínculo formal, le llegaría el turno de hacer lo mismo en su primera planilla. Está a disposición de Russo (forma parte de la lista de concentrados) y sueña con el estreno en la Bombonera.
SEGUÍ LEYENDO: