La Garganta Poderosa lanzó su portada número 100 con una figura estelar: Lionel Messi. La revista de cultura villera compartió declaraciones del astro argentino a días de su última participación con el seleccionado nacional.
“En ese entonces no podía ni siquiera imaginar hasta dónde me llevarían aquellos pasos iniciales en el barrio”, mencionó Leo, recordando los comienzos en su Rosario natal, donde empezaba a mostrarse como pichón de crack en el fútbol pero no gozaba de los lujos y privilegios actuales que tiene en Barcelona, donde edificó su carrera profesional hace ya 16 años.
Otro de los mensajes concientizadores que el capitán albiceleste dejó en la entrevista fue: “Cuando no hay un conocimiento de la realidad, la opinión no tiene valor, es puro ruido”. Elogió el trabajo social de las cocineras de las ollas populares, los comedores y merenderos que se extienden a lo largo y ancho de Argentina a la distancia: “Me produce un orgullo inmenso ver cómo se involucran, incluso en tiempos tan complicados como los que estamos viviendo”. Y añadió: “Las copas que se levantan este año deberían ser para todas las personas que se implican para ayudar de esa manera”.
Para la Pulga “la educación es la base de todo” en el desarrollo de los jóvenes: “Es imprescindible, para quienes más lo necesitan, preservar todo servicio fundamental en situaciones como esta pandemia; el agua, la electricidad e incluso los alimentos de primera necesidad”. Entre lo más destacado, remarcó: “La desigualdad es uno de los grandes problemas de nuestra sociedad y hay que luchar para corregirla cuanto antes”.
Hubo, lógicamente, una línea para su presente futbolístico. A los 33 años pudo haber perdido algo de explosión física pero absorbió muchos conocimientos tácticos con los que saca provecho en cada encuentro, tanto con el Barça como con la Selección. “Hoy me obsesiona menos el gol, por ejemplo. Y trato de aportar lo máximo para el colectivo”, sentenció.
El rosarino ya había hecho hincapié en la difícil realidad que atraviesa el país. Dejó de lado la algarabía por el debut con triunfo en las Eliminatorias Sudamericanas frente a Ecuador en la Bombonera y delante del micrófono expresó: “Fue un año complicado para todos. Lo que estamos viviendo los argentinos es muy difícil. Lo sentimos mucho al jugar con la Selección y hoy queríamos darle una alegría a la gente con esta victoria, más allá del juego. Es bueno para descomprimir un poco”. Y agregó: “Desde acá le mando mucha fuerza a toda la Argentina porque sé que es un momento muy difícil”.
Tras la última excursión a la altura de La Paz, donde el equipo dirigido por Lionel Scaloni mantuvo el liderazgo de la competición, Messi voló a Barcelona y ya está instalado en su hogar. En el aeropuerto fue recibido por algunos periodistas que le preguntaron si estaba más a gusto jugando con la Albiceleste. Él optó por el silencio.
SEGUÍ LEYENDO: