Jaque en la red: Argentina debuta en la Primera Olimpíada de Ajedrez On Line, que convocó a 163 países

El COVID-19 cambió el escenario de juego: de presencial a virtual. El equipo argentino, con todos integrantes Sub 23, jugará las partidas desde su casa

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La Olimpíada se disputa cada dos años; esta vez, la tecnología evitará la suspensión por la pandemia
La Olimpíada se disputa cada dos años; esta vez, la tecnología evitará la suspensión por la pandemia

Este viernes un equipo argentino conformado por seis menores de 23 años (tres varones y tres mujeres) jugará por primera vez un certamen internacional a través de Internet organizado por la FIDE (la Federación Internacional de Ajedrez, según sus siglas francesas). Se trata de la primera edición de la olimpíada On Line, una competencia que reúne a 163 países en la que los jugadores de cada nación disputarán sus partidas frente a una pantalla digital desde la comodidad de sus hogares. Toda una novedad que fue adaptada frente a los actuales tiempos de pandemia y de aislamiento social preventivo.

La formación oficial del conjunto argentino la integran 12 jugadores, seis de los cuales actuarán en condición de titulares, y otros seis como suplentes, ellos son: Alan Pichot (representante de la federación Metropolitana), Pablo Acosta (federación argentina), María Campos (Metropolitana), Guadalupe Besso (UOM- San Luis), Lucas Coro (Metropolitana), Anapaola Borda Rodas (Villa Martelli), Francisco Muñoz (Asociación Rosarina), Francisco Varacalli (Metropolitana), Guadalupe Encina (Federación del Sur Gran Bs.As.), Valeria Bank (Metropolitana), Tomás Kapitanchuk (Sur Gran Bs.As.) y Candela Francisco Guecamburu (Martelli).

Alan Pichot, el gran maestro más joven del historial del ajedrez argentino (obtuvo el título a los 17 años, 2 meses y 21 días, en Bilbao en 2015), y actual N°1 del ranking local, será la principal figura del equipo aunque su participación estará más vinculada con la dirección técnica del plantel.

“Voy a ocupar el rol en teoría pero no en los papeles, porque el reglamento especifica que un jugador no puede hacer las veces de capitán. La oferta me pareció interesante porque no se trata de ser entrenador del equipo; eso no me hubiera gustado” contó el joven gran maestro, hincha de Boca y que ayer, cumplió 22 años. Y agregó: “Ya tuvimos algunas charlas con el equipo al que le trasmití, sobre la base de mi experiencia, lo que significa jugar un torneo On Line atípico y con ritmo de ajedrez rápido. Acá en esta olimpíada, a diferencia de las presenciales, el rol del capitán durante las partidas es más de observador que de protagonista. Ni siquiera podemos decidir una propuesta de empate; acá cada jugador es responsable y sin consultas deberá determinar si ofrece un empate o si acepta la propuesta de su rival”.

Por último Pichot se refirió a su función en el armado del equipo (la selección de los tres varones y tres mujeres para cada match y disponer quienes quedarán afuera). “Tal vez eso sea lo más complejo, decidir quién entra y quién sale, pero todo dependerá del nivel que cada uno vaya demostrando en cada juego. La prioridad es que todos ganen experiencia, sabemos que no estamos para ganar el certamen pero es una buena posibilidad para mostrarse frente a rivales que son muy superiores”

¿Y no vas a jugar ninguna partida?

Dependerá de los jugadores o rivales, si alguno está caído anímicamente o el rival que esté enfrente presente una formación muy dura; tal vez entonces, juegue alguna partida.

Si bien desde 1999 el Comité Olímpico Internacional considera al ajedrez como un deporte, su práctica aún no integra el programa oficial del COI. Sin embargo, desde hace casi un siglo, la FIDE se ocupa de organizar de manera bianual su propia competencia olímpica; al comienzo bautizada como Copa de las Naciones (en el período 1927-1939) y más tarde llamada Olimpíadas de Ajedrez (a partir de 1950).

Estos certámenes se tratan de una especie de Mundial de seleccionados que reúne a la mayoría de las 190 naciones miembros de la FIDE; cada país envía a sus mejores representantes, sus equipos masculinos y femeninos que convierten a la prueba en la principal competencia por equipos del calendario de la federación.

Este año estaba programado para el 6 de agosto la apertura de la 44ª Olimpíada de Ajedrez en Moscú, pero las actuales condiciones sanitarias patearon el tablero; la suspensión de los Juegos Olímpicos Tokio 2020 junto con las sugerencias de la Organización Mundial de la Salud (OMS) que recomendó no llevar a cabo el certamen de Moscú por el alto riesgo de contagios que ocasionaría la reunión de más de 2000 ajedrecistas en un ámbito cerrado, impulsaron al presidente de la FIDE, el ruso Arkady Dvorkovich a la suspensión y postergación hasta 2021 de la competencia presencial, y aprovechar el calendario deportivo para el lanzamiento de la 1ª Olimpíada On Line. Un paliativo para que los ajedrecistas mantuvieran el ritmo de competencia, y un laboratorio de pruebas para los organizadores y futuras regulaciones de certámenes vía Internet.

El equipo argentino que participará de la competencia
El equipo argentino que participará de la competencia

Por eso, el pasado 25 de julio, la FIDE lanzó esta original edición On Line, que en sus primera etapas clasificatorias tuvo por protagonistas a los equipos de las naciones con menor poder ajedrecístico. El armado del programa de juego dividió al torneo en cinco grupos de países preclasificados de mayor a menor, en este orden: Top, y grupos 2, 3, 4 y 5; la Argentina fue ubicada en el segundo pelotón de mayor fuerza debido al ranking de sus históricas actuaciones (tres subcampeonatos olímpicos, en 1950, 1952 y 1954; dos terceros puestos en 1958 y 1962, y organizador de la Copa de Naciones 1939 y la Olimpíada de 1978).

En esta ocasión, la FIDE adaptada a los tiempos modernos de igualdad de género y con el fin de estimular la base de la pirámide de ajedrecistas, estableció que cada nación debería presentar un equipo mixto con 6 integrantes: dos varones y dos mujeres de categoría libre y dos representantes Sub23, uno masculino y otra femenina. Extrañamente, en una decisión unilateral no consensuada y controversial, los dirigentes de Argentina decidieron convocar un equipo con todos sus integrantes menores de 23 años.

En su sitio oficial, la Federación Argentina de Ajedrez (FADA) argumentó: “Es la primera vez que se juega esta Olimpíada Online y se hará en un formato Rapid. Evidentemente es un evento de gran importancia, pero que a la vez, no es completamente comparable a la Olimpíada tradicional. Hay una pregunta que siempre nos hacemos desde la dirigencia; ¿Cuándo es razonable dar lugar a nuestros jóvenes valores, para apostar con fuerza al desarrollo futuro? A esta Federación Argentina de Ajedrez, le gusta tomar posiciones de vanguardia, apostando, cuando es posible, al desarrollo de nuestras promesas”.

Los argumentos del comunicado, acaso actúan como un maquillaje en la trama de la controvertida decisión: las desavenencias de los dirigentes con sus ajedrecistas de élite; de manera particular con el tradicional equipo femenino (autodenominadas Damas Olímpicas; integrado desde hace una década por las cinco mejores mujeres del ranking local), y de manera general con el conjunto masculino (un grupo de 5 jugadores que representó al país en las últimas cuatro olimpíadas). Así los diez mejores ajedrecistas, hombres y mujeres, del país fueron ninguneados por su dirigencia.

“Todo fue un poco raro; la inmensa mayoría de países van con sus mejores jugadores, y yo (tiene 22 años) quedé en el medio de esta decisión complicada porque no existe un reglamento que la avale”, confesó Alan Pichot.

En cuanto a las regulaciones de una prueba presencial transformada ahora para Internet, tienen un gran número de diferencias; un factor esencial es el tiempo de juego.

La 1ª Olimpíada de Ajedrez On Line se desarrollará bajo el ritmo de juego rápido; cada jugador contará en cada partida con 15 minutos para alcanzar la victoria, el empate o la derrota. Además, con cada movimiento realizado en el tablero cada ajedrecista recibirá un adicional de 5 segundos, lo que le permitirá acumular cada 12 movimientos (12x5=60), un minuto más de reflexión en su reloj.

Con este sistema de ajedrez rápido (cada duelo puede extenderse aproximadamente entre 40 o 45 minutos) permitiendo que puedan disputarse hasta tres matches por día, y dado que se tratan de zonas conformadas por 10 naciones (se enfrentan todos contra todos), bastarán sólo tres jornadas para que cada país se mida con sus nueve rivales, y así alcanzar la definición de cada grupo.

Como integrante del Grupo 2 en la Zona E, Argentina hará su debut mañana a las 13 horas de Buenos Aires. Su rival de la 1ª rueda será Escocia, luego, desde las 14 jugará con Inglaterra, y una hora más tarde ante Hungría. Justamente Inglaterra y Hungría son dos de los más poderosos equipos de las 10 naciones que integran el grupo.

Al día siguiente, los argentinos tendrán por rivales a los representes de: Bolivia, Costa Rica y México, y cerrarán su actuación el domingo, con otros tres enfrentamientos: Ecuador, Colombia y Montenegro.

El grupo 2 lo integran en total 50 países, divididos en 5 zonas (A, B, C, D y E), de las que sólo los tres mejores clasificados de cada grupo (15 en total) accederán a la siguiente etapa, al cuadro Top o principal. Allí los aguardarán otras 25 naciones preclasificadas, por lo que los 40 países (25+15) serán divididos en cuatro grupos de 10 equipos cada uno. Nuevamente, sólo los 3 mejores equipos de cada grupo pasarán a la siguiente etapa (en una rueda preliminar se enfrentarán los segundos contra los terceros; los cuatro primeros accederán directamente), y a partir de allí, los 8 mejores conjuntos disputarán por eliminación directa Cuartos, Semifinal y Final, respectivamente, de ésta particular competencia.

Uno de los principales cuidados de la organización apuntó al control de “los tramposos del ajedrez”. Es que desde la llegada de la tecnología al mundo del ajedrez, los programas o aplicaciones se convirtieron en los verdaderos reyes del juego y en el gran temor de los maestros; hoy la mayoría de los algoritmos de ajedrez pueden vencer a casi el 99% de sus jugadores; los aficionados no tienen ninguna chance de ganarle a una máquina.

Argentina decidió participar con un equipo Sub 23, aunque no se trataba de un requisito de la competencia
Argentina decidió participar con un equipo Sub 23, aunque no se trataba de un requisito de la competencia

Esto sin duda despertó la práctica desleal y en varias plataformas de juego por Internet se detectaron tramposos que efectuaban sus movimientos asistidos por las recomendaciones del celular o la computadora. Sucedió en varios países del mundo, incluso la Argentina. La práctica desleal incluso desalentó a las grandes figuras del ajedrez mundial de participar en torneos On Line en algunas de las plataformas más populares, dado que en varias ocasiones fueron superados por aficionados que sin ranking ni experiencia, de pronto efectuaban las mejores jugadas, las que comparadas horas más tarde eran idénticas a las sugerencias que efectuaban los mejores programas.

Pese a todo, en las etapas iniciales de la flamante Olimpíada On Line ya se registraron casos de deshonestos. Integrantes de los equipos de Malí, Brunei, Hong Kong y Nicaragua recibieron como castigo la pérdida del punto de sus partidas tras comprobarse la similitud de sus jugadas con las recomendaciones efectuadas por los algoritmos.

Consultado sobre el trabajo de control que existe en esta competencia, el árbitro internacional argentino, Leandro Plotinsky, integrante de la Comisión de Árbitros de la FIDE, contó: “Se tomaron muchos recaudos para la organización del certamen, desde equiparar a los grupos con fuerza de juego similares hasta de los distintos husos horarios. No sería justo que un equipo juegue a las 15 horas y el otro, en otra parte del planeta tenga que hacerlo a las 3 de la madrugada. Pero donde más hincapié se realizó fue en achicar el margen de maniobras para que nadie saque provecho de poder jugar haciendo trampas. Por eso se les pidió a los participantes que media hora antes del comienzo de las partidas deberán conectarse con el servidor de juego (el sitio Chess.com, el más popular de Internet con más de 41 millones de miembros, fue elegido por la FIDE para que se disputen todas las partidas) y practicar un zoom con los árbitros con quienes deberán compartir sus pantallas, eliminándose de esta manera la posibilidad de un montaje de un programa abierto en un sector de la pantalla para asistirse durante el juego. Ante una inquietud o sospecha, los árbitros están autorizados para interrumpir la partida y solicitar una inspección de la sala, por lo que el jugador deberá con su cámara realizar un paneo de la habitación dónde se encuentra”.

¿Existen muchas recomendaciones para evitar cualquier suspicacia?

Sí, por supuesto. Por ejemplo que la computadora esté ubicada frente a una pared y que el jugador tenga una ventana o puerta en su espalda. También es importante que la cámara tenga una imagen clara y que el rostro del jugador esté iluminado para observar con nitidez el movimiento de sus ojos; los jugadores tienen prohibido acercar sus rostros a la pantalla porque eso impediría saber con exactitud hacia donde apunta su mirada. Por eso también se elimina el uso de gorras o de auriculares, dado que a través ellos, un tercero que sigue el juego en directo desde otra habitación podría ofrecerle algún tipo de ayuda con el dictado de jugadas. Y, obviamente, durante la partida los jugadores no pueden abandonar sus puestos ni siquiera para ir al baño.

Es evidente que hay un gran temor por el uso de tecnología

Sí, sin dudas. Los ajedrecistas tienen prohibido tener cualquier tipo de dispositivo electrónico en la habitación donde disputan su partida.

Y qué sucede con las desconexiones durante uno de los juegos

Es un verdadero problema; muchos países sufren cortes continuos, por ejemplo Venezuela y China están a la cabeza. La reglamentación es clara y establece la pérdida inmediata del punto. Por eso estuve asesorando a los integrantes del equipo argentino para que las conexiones no sean a través de wi-fi sino que utilicen el cable de red; es más seguro. También, en los casos de confianza con sus vecinos, si estos tienen una buena red, de poder tener su contraseña y habilitar también esa red en caso de un corte imprevisto de luz.

Es una pena lo que sucede. Tanto con las trampas como con las conexiones de Internet, ambas son las mayores dificultades que afronta el torneo; es imposible que además de la tensión del juego uno tenga que estar preocupado porque se te puede cortar Internet o tu rival te esté haciendo trampas. Tampoco nos ayuda el tema de la cuarentena o aislamiento, porque de lo contrario podríamos reunirnos todo el equipo en un mismo salón y jugar cada uno su partida. Creo que algunos países de África consiguieron reunir a todo sus integrantes en una sala, y eso sería bárbaro de no existir la cuarentena”, agregó Pichot.

Hace 96 años, en 1924, por iniciativa del francés Pierre Vincent y el inglés Leonard Rees fueron cursadas las invitaciones para la realización del 1er Congreso de la Fedération Internationale des Échecs, en París. Aunque la verdadera excusa era aprovechar la edición de los 8° Juegos Olímpicos de la era moderna, en la capital francesa para solicitar al Comité Olímpico la inclusión del ajedrez en su programa de actividades; la falta de documentación que avalara que los ajedrecistas actuaban como deportistas amateurs (la mayoría de ellos jugaban torneos con premios en dinero) impidió el avance de las negociaciones.

Frente a esa situación, aquel grupo de dirigentes y ajedrecistas de 15 naciones, entre los que estaba el argentino Roberto Grau (dirigente, ajedrecista y periodista), junto a Weltjens (de Bélgica), Smith (por Canadá y EE.UU.), el Conde de Peñalver (España), Tschepurnoff (Finlandia), Vincent (Francia), Rawlins (Gran Bretaña), Rueb (Holanda), Abonyi (Hungría), Marusi (Italia), Toubin (Polonia), Gudju (Rumania), Nicolet (Suiza), Skalička (Checoslovaquia) y Ovadia (Yugoslavia) tomaron la decisión de la creación del organismo rector del ajedrez mundial y firmar el acta de fundación de la FIDE, el 20 de julio de 1924.

De manera paralela, se organizó el “Torneo de Aficionados de Ajedrez” la primera competencia colectiva en la historia de esta actividad, una especie de olimpíada oficiosa que tuvo por vencedor al equipo de Checoslovaquia (Argentina finalizó 5ª), y al letón, Hermanis Matisosn en la prueba individual consagrado como Primer Campeón Mundial Aficionado. Recién, tres años más tarde, en Londres 1927, se disputó la 1ª Olimpíada oficial, llamada Copa de las Naciones que reunió a 16 países y 70 jugadores. Hungría fue campeón, y Argentina ocupó la 12ª posición.

Desde entonces y salvo el período de la Segunda Guerra Mundial, las olimpíadas de ajedrez se disputaron cada dos años; la última edición en 2018, en Batumi (Georgia) con 180 naciones y más de 2000 ajedrecistas entre los equipos masculinos y femeninos, los que tomaron cuenta de la prueba.

Ahora, en 2020, los tiempos actuales de pandemia por el Covid19 sacudieron el tablero y obligaron su reinvención; con la creación de la 1ª Olimpíada de ajedrez On Line se sostuvo el espíritu de una tradición. Acaso, una apuesta pasajera pero que, si consigue poner en jaque a los tramposos, se vuelva en el disparador de una nueva Era: La aldea global del ajedrez.

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