A falta de cinco fechas para cumplir sus 1.000 carreras en la Fórmula 1, Ferrari removió su casa y ahora tiene una nueva cúpula en lo técnico. Es otra medida luego de la reestructuración que se anunció la semana pasada. Se trata de un triunvirato que estaría a cargo de esa área y donde ya no tendrá injerencia Mattia Binotto, el todavía director del equipo. Ahora la atención de las dos SF1000 quedaría en manos de un grupo de ingenieros que buscarían salvar los honores de la Scuderia en 2020. Suena extraño, pero en un campeonato donde Mercedes y el inglés Lewis Hamilton ampliaron su dominio, el máximo objetivo de la escuadra de Maranello es alcanzar el subcampeonato en el Mundial de Constructores donde hoy marcha cuarto.
En los cuatro Grandes Premios corridos los pilotos ferraristas, el alemán Sebastian Vettel y el monegasco Charles Leclerc, no tuvieron la real performance que pretendieron. Al toque que tuvieron entre ellos en la segunda carrera de Austria donde ambos abandonaron, se sumaron los siguientes resultados:
Vettel (13º puesto en el torneo): 10º, 6º y 10º.
Leclerc (5º lugar en el certamen): 2º, 11º y 3º. Cabe recordar que su último podio en Silverstone, fue por la rotura de la goma delantera izquierda del finlandés Valtteri Bottas (Mercedes).
Para intentar remediar el panorama, la novedad en el equipo apunta a que Binotto se pueda focalizar en el aspecto deportivo y en otros temas. Él también se mantuvo como cabeza en lo técnico porque es ingeniero, conoce ese puesto desde hace años y hasta fue el jefe de los motores. De esta forma se busca que la cadena de mando esté más ordenada y mejorar el rendimiento de sus autos.
La decisión es correcta en función de una mejor división de trabajo. No se pone en duda la capacidad de Binotto como técnico, pero quedó demostrado que él no puede estar encima de todo. Por eso en la reestructuración del equipo que se anunció la semana pasada se informó la creación del departamento de desarrollo de rendimiento a cargo del ingeniero Enrico Cardile.
“Ya no soy director técnico, solo soy un líder de equipo. Hay muchas tareas en la gestión de una empresa, no hay forma de hacerlas todas al mismo tiempo. Recientemente cambiamos nuestra organización técnica en Maranello. Tuvimos que hacer eso. Necesitamos personas responsables de cada área. Creo que lo hemos logrado”, afirmó Binotto en diálogo con Motorsport.
“Hemos hecho cambios en la parte técnica para acelerar el diseño y el desarrollo en lo que a prestaciones se refiere. Es necesario hacer este cambio de dirección para definir líneas claras de responsabilidad y procesos de trabajo, al mismo tiempo que se reafirma la fe de la empresa en su reserva de talento técnico”, sostuvo Binotto la semana pasada cuando se anunció la reestructuración del equipo. “El departamento de Enrico Cardile se basará en la experiencia de Rory Byrne e ingenieros reconocidos como David Sánchez. Será la base para el desarrollo del auto”.
“Creemos que la gente de Ferrari está al más alto nivel y no tenemos que envidiar a nuestros rivales en este sentido, pero necesitamos hacer un cambio decisivo, elevando el listón en términos de responsabilidad para los jefes de departamento”, destacó Binotto. “Hoy no somos competitivos, pero estoy seguro de que podemos revertirlo”, confió el ingeniero en charla con Autosport.
Por ahora no hubo confirmación oficial, pero como indicó Mattia, la base en la toma de decisiones para los trabajos sobre los monopostos rojos sería responsabilidad de un grupo de trabajo que hoy encabezan el italiano Enrico Cardile, el histórico sudafricano Rory Byrne y el francés David Sánchez
¿Quiénes son los ingenieros que buscarían revivir a Ferrari?
Cardile se graduó con la especialidad aeronáutica y, cuando se recibió en 2002, su tesis se basó en el túnel de viento de Ferrari. En 2003 trabajó en la Universidad de Pisa y colaboró con Ferrari en un proyecto de innovación aerodinámica. En 2005 fue contratado por la firma de Maranello.
Fue responsable del diseño en la versión de carrera de la Ferrari Gran Turismo 458 Italia GT2 y GT3 y 488 GTE y GT3, coches que dominaron en sus respectivos campeonatos. También en sus clases lograron victorias en las 24 Horas de Le Mans y de Daytona. Además, en sus divisionales ganaron títulos mundiales del Campeonato Mundial de Endurance (WEC por su sigla en inglés), la categoría más importante del mundo en carreras de larga duración.
En 2016, Cardile se sumó a la gestión deportiva general y gerente de proyecto de autos. En 2019, cuando Binotto fue nombrado director del equipo, se convirtió en jefe de aerodinámica y gerente de proyectos de vehículos.
Byrne es el más conocido de los tres por su exitosa trayectoria. Llegó a Ferrari en 1996 de la mano de Michael Schumacher. Ambos trabajaron juntos en Benetton, equipo con el que el alemán logró el bicampeonato en 1994 y 1995. Luego también alcanzaron la gloria en la Scuderia, que logró once títulos entre 1999 y 2004, cinco de Pilotos y seis de Constructores.
Al terminar la temporada 2006 y con el primer retiro de Schumi, Byrne también dio un paso al costado, pero no del todo. Siguió como consultor del equipo de Maranello. En 2012 se involucró en el auto con el que el español Fernando Alonso peleó la corona hasta la última fecha. Aunque también participó de un fiasco como el coche de 2014. Luego siguió con su asesoramiento externo. Ahora con 76 años volvió a estar más cerca del equipo y aportará de lleno toda su experiencia.
En tanto que Sánchez llegó a La Rossa en 2012 por pedido de Pat Fry (otro ingeniero de renombre). Se formó en la Escuela Nacional Superior de Mecánica y Aerodinámica de Francia. En 2005 se integró al área de aerodinámica de Renault, año en el que Alonso obtuvo el primero de sus dos campeonatos. En 2007 se fue a McLaren, escudería con la que Hamilton plasmó en 2008 el primero de sus seis campeonatos. En el team británico, llegó a ser responsable de aerodinámica.
Ya en Ferrari, en 2017 también pasó a ser la cabeza en el área aerodinámica y su trabajo se notó. La SF70-H de ese año, donde hubo un cambio drástico en los autos, fue muy competitiva. Incluso Vettel terminó la primera parte de temporada como líder del certamen. También el monoplaza de 2018 mostró un buen nivel en el inicio de ese ejercicio, pero luego fueron superados otra vez por Mercedes y Hamilton, ganador de tres de cuatro carreras en 2020 y sólido líder del campeonato.
En tanto que se plantean dos interrogantes cuyas respuestas ayudan a entender el por qué de los cambios que tuvo Ferrari.
¿Llega a tiempo esta reestructuración?
No. La reorganización debió hacerse antes. Incluso a mediados del año pasado para encarar de mejor forma 2020. Se hubiese armado una estructura de trabajo más sólida, donde cada especialista tenga la real participación y decisión sobre su área. Pero más vale tarde que nunca. Este rearmado es un comienzo y tener a cada parte en su lugar les permitirá trabajar de forma más ordenada.
¿Podrá Byrne revivir a Ferrari?
Que sea un veterano no quita su idoneidad. Su capacidad quedó demostrada en los años dorados donde el equipo brilló con Schumacher. Cuenta con mucha experiencia y si su aporte no fuese valioso, no se hubiese desempeñado como consultor externo. Sumado otra vez de forma permanente, habrá un tema clave: los celos internos. Si Cardile entiende que tener a Byrne de su lado no es una molestia, sino un fuerte refuerzo, formarán un buen equipo para mejorar a los coches rojos. El fierro caliente que agarran es tan fuerte como gloria que podrían ganar se alinean sus talentos para encontrar un auto óptimo en Maranello.
Con el desarrollo de los autos congelado hasta 2021, Byrne puede ser determinante para trabajar en el coche para la venidera temporada. También, preparar con tiempo el terreno para el gran cambio de reglamento que se viene para 2022 con los nuevos monopostos. Si Cardile, Byrne y Sánchez tiran juntos para el mismo lado, los tifosis podrían empezar a ilusionarse, pero a largo tiempo. Cabe recordar que el presidente Fiat Chrysler Automobiles (grupo empresario que integra Ferrari), John Elkann, dijo la semana pasada que “que no espera ver al equipo ganador hasta 2022…”
Con la reestructuración de su equipo Ferrari aspira a asegurar un mayor empuje en el desarrollo de prestaciones. Tendrá una cadena de mando más centrada y sencilla, que les den a los directores de cada departamento las herramientas necesarias para mejorar las tareas y por ende conseguir buenos resultados.
El resto de áreas principales se mantienen sin cambios. Enrico Gualtieri seguirá siendo el responsable de motores, Laurent Mekies será el director deportivo y Simone Resta continúa a cargo del departamento de chasis.
En el presente ejercicio la SF1000 no cuenta con un buen motor ni chasis. Respecto del impulsor, hoy entrega unos 60/70 caballos menos que en 2019 cuando fueron denunciados por Red Bull por supuestas irregularidades en el flujo de combustible. Luego de cuatro fechas el rendimiento de sus autos deja mucho que desear y con este cambio en la cabeza técnica buscan revertir el panorama.
Mal clima con Vettel
Después de Silverstone el alemán se quejó de forma dura sobre las prestaciones de las Ferrari. Más allá del papelón del último fin de semana, donde el cuatro veces campeón se puso a meter mano en su auto –como si fuese un mecánico- la F-1 en su Instagram oficial publicó un video donde se expuso una extraña situación entre Sebastian y Binotto. Se trató de un diálogo por la radio donde el germano no le respondió al director del equipo…
MB: “Hola Seb, Mattia… Carrera dura hoy. Sabemos que fue un fin de semana duro, pero dentro de una semana estamos de vuelta acá y lo haremos mejor”.
SV: (sin respuesta).
Luego Vettel le confirma a otra persona que la radio funcionaba bien. Y agregó:
SV: “Sí, fue una carrera dura. Tenía muy poca confianza en el auto. Básicamente, similar a la clasificación. Luchando vuelta por vuelta. Probé muchas cosas, pero nada realmente fue un gran avance. Bien hecho del otro lado. Bien hecho Charles (Leclerc) y… buena parada en boxes, chicos”.
Más allá de esta reestructuración y que Binotto ya no esté a cargo del área técnica, lo del germano ya es un hecho consumado y estas son sus últimas carreras con Ferrari. En 2021 estaría en Aston Martin, que ingresará a la Máxima tomando el lugar de Racing Point.
Ferrari metió el cambio en una de las dos áreas más importantes de un de equipo: la técnica. En lo deportivo sus pilotos hacen lo que pueden y esperan que pronto lleguen las mejoras en sus autos. Lograr un salto de calidad en los monopostos rojos es el gran desafío para Cardile y Sánchez. El veterano Byrne viene con toda la mística de los años gloriosos con Schumacher. Hoy se vive la antítesis de estos tiempos donde la Scuderia tiene como objetivo el subcampeonato de Constructores.
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