Tal como venía haciendo en estas semanas de fechas conmemorativas simbólicas de los mundiales de fútbol, Diego Armando Maradona no dejó pasar la chance de hacer un descargo por el trigésimo aniversario de la final entre Argentina y Alemania en Italia 90. “El video que a uno no le gustaría subir nunca”, según el Diez.
El compacto muestra la acción entre el conjunto dirigido por Carlos Salvador Bilardo, que defendía el título, y el de Franz Beckenbauer, que se impuso a falta de 5 minutos con el tanto de penal de Andreas Brehme, luego de la polémica infracción adentro del área sancionada por el mexicano Edgardo Codesal.
“Este es el video que a uno le gustaría no subir nunca. Los alemanes llegaron enteros. Y nosotros jugamos en llantas. No hacía falta que nos robaran, como nos robaron. A mis compañeros, les pido disculpas. Porque el maltrato que sufrieron durante todo el mundial, fue por mi culpa. Y todo lo que me tocó vivir a mí, después, fue por ganar partidos que no debía ganar. Pero si eso sirvió para hacerlos felices, volvería a hacerlo”, sentenció Maradona.
En diálogo con Infobae, a tres décadas de aquella noche entre argentinos y alemanes, el juez azteca declaró: “A Maradona lo considero un gran jugador, pero como persona es una de las peores que conocí. En esa oportunidad siempre traté de tranquilizarlo, le pedía que hiciera lo que mejor sabía, que es jugar. Cuando se cantaba el himno traté de calmarlo por sus insultos hacia los tifosi italianos, pero solo recibí un destrato. Es más, cuando lo expulsé a Monzón, me dijo cosas que pudieron haber hecho que le mostrara la tarjeta roja a él. ‘Nosotros sabíamos que esto iba ser un robo, la FIFA te mandó para que no ganáramos’, me gritó”. A su vez, al consultarte por la jugada del penal, afirmó que hoy volvería a cobrar lo mismo.
Diego había disfrutado al publicar días atrás algunos partidos del Mundial 86 y el camino hasta el decisivo en el 90. Ayer, más allá del dolor, no quiso dejar inadvertido el aniversario 30 de aquella batalla épica que terminó en manos de los europeos. Demostró que la herida continúa abierta y que todavía cree que a Argentina le quitaron la Copa del Mundo.
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