Lejos de aquel joven que tuvo algunos excesos y que hasta admitió en su biografía autorizada problemas con el alcohol que logró superar, hoy Kimi-Matias Räikkönen disfruta de su vida familiar junto a su mujer y sus dos hijos (el varón, Robin ya empezó con el karting). Es uno de los corredores de Fórmula 1 que mejor la pasa en esta pausa por la pandemia de coronavirus. Se lo ve distendido y muy feliz en las redes sociales, herramientas que desde un par de años empezó a usar. Antes de comenzar con la actividad que volverá el 5 de julio con el Gran Premio de Austria, el actual piloto de Alfa Romeo y último campeón con Ferrari aceptó hablar con Infobae. Hizo una excepción porque no suele dar entrevistas.
Iceman, como se lo conoce al finlandés, tiene 40 años (nació el 17/10/1979) y en este 2020 arrancará con su tercera década en la Máxima donde comenzó en 2001. Sorprendió en esa temporada con el humilde equipo Sauber y en 2002 lo fichó McLaren. Fue vencedor con la escuadra inglesa y peleó los campeonatos de 2003 y 2005 en los que fue subcampeón. En 2007 se mudó a Maranello y obtuvo el título con la Scuderia. Fue cuando superó a los corredores de su ex equipo, el inglés Lewis Hamilton y el español Fernando Alonso, quienes llegaron por delante suyo en el campeonato a la definición.
Luego tuvo dos años de ausencia en 2010 y 2011 cuando compitió sin éxito en el Mundial de Rally y probó suerte en la NASCAR estadounidense. En 2012 retornó a la F-1 con Lotus, que no era una de las mejores escuadras. Sin embargo no le costó su vuelta, llegó a vencer y hasta completó el podio de ese certamen. Junto con el recordado Niki Lauda, son los únicos campeones que se ausentaron dos años, regresaron y fueron ganadores. Aunque el austríaco tuvo el plus de haber estado inactivo en ese período, retornar y lograr su tercer título en 1984.
Kimi, por su buen desempeño con Lotus en 2012 y 2013, en 2014 volvió a Ferrari donde estuvo hasta 2018. En 2019 pasó a Alfa Romeo, que es el equipo satélite de la Scuderia. El vínculo con su actual escuadra vence a fin de año. Para tener una referencia de su extensa trayectoria en la categoría, en sus comienzos corrió contra el holandés Jos Verstappen y hoy tiene enfrente a su hijo, Max Verstappen. Por sus casi dos décadas en la categoría, tiene mucho para contar.
-¿Este es su último año en la Fórmula 1?
-Siempre he dicho que haré esta temporada y luego decidiré. Si este año sigo disfrutando de las carreras, continuaré, si no, me retiraré.
-Más allá de sus dos años de ausencia, ¿cómo hizo para estar 18 temporadas en la F-1?
-Es muy simple, me encanta correr. Realmente no me importa todo el resto, las entrevistas y todo eso, pero realmente me gusta la sensación de correr de rueda en rueda. Extrañaba ese sentimiento y por eso volví.
-¿Qué fue lo más le costó cuando pasó al rally? ¿Qué le pareció el automovilismo en los Estados Unidos?
-En el rally, tal vez el adaptarme las hojas de ruta con las notas. En cuanto a los Estados Unidos, me gustó la competición, fue muy divertida.
En Monza 2018, Kimi hizo la pole positions (mejor tiempo clasificatorio) y batió el récord en el circuito italiano de Juan Pablo Montoya en 2004, con un registro de 1m19s119. El escandinavo fue 406/1000 más rápido que el colombiano, que 14 años antes lo logró con un motor V10 a combustión de más de 900 caballos, potencia similar a la que arrojan los actuales V6 híbridos (a combustión y eléctrico). Räikkönen, en ese giro, en las rectas superó de forma holgada los 300 km/h y alcanzó el promedio de vuelta más rápido de la historia de la Máxima con 263,587 km/h.
-¿Qué se siente al conducir un auto de F-1 a más 300 km/h?
-Es un sentimiento bastante normal, lo he hecho la mayor parte de mi vida. Es divertido, especialmente cuando estás llegando al límite.
-La definición del campeonato de 2007 fue dramática ¿Cómo recuerda esa carrera en Brasil?
-La carrera en sí no fue tan notable para mí. No sentí mucha presión, ya que no era muy probable que ganara el título sin antes vencer en la carrera (lo consiguió). Tuve un buen comienzo, una competencia bastante tranquila y todos en el equipo hicieron un gran trabajo. Hicimos lo que teníamos que hacer. Por supuesto que fue una gran felicidad. Corrimos para ganar el título y lo hicimos.
El finlandés además es el único de todos los corredores del presente plantel de la F-1 que corrió con tres tipos de motores: V10 (2001 a 2005), V8 (2006 a 2013) y V6 híbridos (2014 al presente). Por ende conoció diversos tipos de tecnologías y desarrollos.
-Corrió con motores V10, V8 y V6 ¿Cuál es su etapa favorita?
-Realmente no me importa. Cada fórmula del motor tiene sus características y depende de los corredores aprovecharla al máximo.
De una personalidad particular, con pocas palabras, pero concreto a la hora de responder, muchas veces rompió los esquemas en el ambiente de la F-1. Por ejemplo el día de su debut en Australia en 2001 lo despertaron para ir al circuito y sin estar ansioso por esa instancia pidió dormir un poco más. O hasta también reveló en su biografía (“El desconocido Kimi Räikkönen”) que en 2012 estuvo 16 días seguidos de fiesta antes de la carrera en España, algo que no le impidió ser tercero.
-En algunos podios se lo vio muy serio, como en Brasil 2018 ¿Eso es parte de su personalidad?
-Es difícil saberlo, soy solo yo y reacciono como lo siento en ese momento. No tiene sentido fingir o ser falso.
-Si organizara una fiesta, ¿a qué pilotos de F-1 de hoy invitaría?
-¡No creo que invitaría a muchos! Probablemente sólo invitaría a mis amigos (uno de ellos es Sebastian Vettel).
Iceman es muy popular en la F-1. En 2017 su abandono en España hizo llorar a un pequeño fanático suyo que estaba en la tribuna. Fue captado por las cámaras televisivas y luego lo invitaron a los boxes de Ferrari. El niño conoció a su ídolo y no lo pudo creer. Hoy Kimi sigue siendo uno de los más buscados por la gente a la hora de una foto o autógrafo. Es que a sus cuatro décadas se mantiene vigente y no desentonó en su primer año en Alfa Romeo, un equipo poco competitivo, donde en 2019 terminó 12º en el campeonato entre 20 competidores.
En la Máxima consiguió un total de 21 triunfos, 103 podios, 18 poles positions y 46 récords de vueltas. Disputó un total de 312 Grandes Premios y está a 10 de Rubens Barrichello, el que más carreras largó en los 70 años de la Máxima. Hasta ahora en la reducida temporada 2020 están confirmadas ocho competencias. Si se agregan eventos, es posible que el nórdico supere al brasileño.
-Este año puede ser el piloto con más carreras en la historia ¿Está pendiente de esa estadística o no le da importancia?
-Realmente no me importan mucho. Al final no es lo que me hará feliz o no acerca de mis años en la Fórmula 1. Creo que hay muchas más cosas que recordaré de mi campaña que la cantidad de carreras que he hecho.
-¿Qué le cambiaría a esta Fórmula 1?
-En verdad no importa, ya que no depende de nosotros, los pilotos, el cambiar las reglas. Al final, podemos conducir cualquier automóvil que haya sido construido para nosotros y tenemos que adaptarnos a él e intentar ir lo más rápido posible.
-El día que ya no corra, ¿cree que extrañará la F-1?
-No lo creo. Hay buenas personas en la categoría y con ellas me mantendré en contacto, pero eso es todo. He pasado muchos años en este ambiente y, cuando elija parar, estoy seguro de que encontraré muchas cosas para mantenerme ocupado.
De eso no hay dudas. A Kimi Räikkönen se lo ve muy entretenido y feliz con los suyos. Dejó en claro que su familia es lo más importante y que hay vida después la F-1.
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