“Se habilita en forma excepcional la posibilidad de que los clubes de fútbol asociados a la AFA y los/las futbolistas celebren contratos de trabajo por un plazo mínimo de 6 (seis) meses. Dichos contratos deberán suscribirse en el mes de julio de 2020 y tener como fecha de finalización el 31 de diciembre del 2020, como mínimo”. El acuerdo entre las asociaciones les dio el empujón que les faltaba a las dirigencias de los clubes para avanzar en las negociaciones por la renovación de los contratos de los futbolistas.
El Consejo de Fútbol de Boca, a la espera de la confirmación del retorno de la actividad, aguardaba por una señal de este tipo para resolver cuestiones del futuro inmediato. Mientras Jorge Amor Ameal busca recursos para cubrir los salarios del plantel profesional, Juan Román Riquelme y Miguel Ángel Russo se mantienen en contacto permanente para delinear el grupo para el segundo semestre de 2020.
Cada caso es un mundo aparte.
Carlos Tevez: ya anunció que pretende continuar y retirarse con la camiseta de Boca. Ameal aseguró una y otra vez que no habrá inconvenientes para ponerse de acuerdo en la extensión de su contrato y los números. El Apache fue vital en el sprint final del equipo de Russo y la conquista de la Superliga. Su gran anhelo es levantar la Copa Libertadores una vez más. Ofertas desde el exterior no le faltarán, pero en los próximos días habrá contactos entre su representante y Riquelme para que continúe siendo el capitán.
Mauro Zárate: tenía una cláusula de renovación automática por cumplir determinado porcentaje de partidos disputados, pero no llegó y su futuro quedó en veremos. Es del gusto de la dirigencia y el cuerpo técnico: la idea es que siga. Durante la cuarentena declaró que su deseo es retirarse en Boca y solamente deberán afinar el lápiz para la rúbrica.
Marcos Díaz: su préstamo de 18 meses expira el mes que viene. Lo sigue el Leganés de España pero manifestó su intención de continuar en la ribera. Su continuidad está sujeta a lo que suceda con Esteban Andrada (puede llegar a ser vendido a Europa) y Agustín Rossi, que volverá al club después de su préstamo en Lanús. Si este último busca rodaje en otro equipo, crecerán las chances de permanencia de Díaz.
Junior Alonso: Boca no está en condiciones de hacer uso de su opción de compra, está valuado en 3.500.000 euros. Russo quiere contarlo en el plantel y, a priori, la única alternativa es a través de la adquisición de al menos un porcentaje de su ficha. Su cesión finaliza en junio y el paraguayo tiene contrato con el Lille francés hasta mediados de 2021. Ameal habló de una posible renovación del préstamo, aunque los europeos exigirían un cargo elevado teniendo en cuenta que dentro de un año quedaría libre.
Franco Soldano: todavía no hubo contactos con su representante, pero Boca no pondría los 5 millones de dólares correspondientes a su opción de compra. El delantero que pertenece al Olympiakos podría llegar a renovar por seis meses para terminar de disputar la Libertadores y después el club evaluaría su situación y negociaría con la entidad griega otro monto, ya que el que está fijado actualmente fue acoardado con la dirigencia de Daniel Angelici.
Leonardo Jara: Russo pidió retenerlo en el plantel a principios de año y fue utilizado como recambio. El entrenador lo tiene en cuenta pero la delicada situación económica lo ubica en la cuerda floja. ¿Las alternativas? Renovarle por seis meses o que quede en libertad.
Nahuel Molina: todo parece indicar que el lateral derecho de 22 años se despedirá en las próximas semanas. No hubo nuevas comunicaciones entre su representante y la dirigencia y el acuerdo parece cada vez más lejano. Su agente pretende un número considerable en su salario teniendo en cuenta que el mismo estuvo congelado durante los últimos cuatro años más allá de la inflación y su crecimiento profesional. Desde el club entienden que está especulando con la chance de marcharse libre.
Al margen de estos jugadores que formaron parte del plantel en el último semestre, Boca también deberá resolver las situaciones de los que regresarán: Gonzalo Maroni, Walter Bou, Mateo Retegui, el mencionado Agustín Rossi y Lucas Olaza, con futuro incierto en Celta de Vigo.
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