El 30 de junio de 1994, en el hotel Four Seasons de Dallas, se informó lo que se había confirmado dos días antes en un laboratorio de Boston, ciudad en la que la Selección había superado por 2-1 a Nigeria por la segunda fecha de grupos: Diego Armando Maradona había dado positivo en efedrina en un examen de antidoping y había sido expulsado de la Copa del Mundo de Estados Unidos.
En un salón del lujoso alojamiento, Joseph Blatter y Julio Grondona brindaron una conferencia de prensa para reafirmar lo que ya se sabía pero que el público argentino no quería escuchar. Horas más tarde, el propio Diego brindaba una entrevista, quizá la más icónica de las miles que dio el Diez a lo largo de su vida, en la que no solo aseguraba que no había consumido la sustancia detectada en su sangre, sino que dejaba una frase que resuena hasta el día de hoy: “Me cortaron las piernas”.
Claro que para que esas imágenes recorran el mundo tuvo que haber un medio que la transmitiese y un periodista que haya realizado la nota. Y ese fue Adrián Paenza, quien a más de 25 años de uno de los días más tristes para el fútbol argentino, dio detalles del detrás de escena que derivó en aquella pieza audiovisual de Pelusa al borde del llanto frente a un micrófono y una cámara.
“A Diego lo conozco desde que tenía 15 o 16 años, por lo que la relación con él fue una construcción. Lo conozco desde un lugar diferente, no solamente como jugador. En un momento determinado cuando canal 13 y el 11 se disputan la transmisión de los partidos, la cuestión era quién iba a contratar a Diego. Finalmente, quedó en manos del 13 y le dicen que elija qué periodista quería que lo acompañara en el Mundial. Entonces, cuando apareció la noticia del doping, yo había arreglado con Marcos Franchi, el representante, para hacerle una nota a Diego porque estaba todo el país pendiente”, comenzó su relato el legendario periodista y matemático en diálogo con el podcast Hola! Qué tal, cómo estás? que conduce el basquetbolista Nicolás Laprovittola.
Claro que antes de continuar con el relato, Paenza quiso dejar en claro que la declaración expulsada por el astro de Villa Fiorito fue puramente una genialidad del propio Maradona: “Ninguna pregunta que le hice merecía que el diga ‘me cortaron las piernas’, o sea, yo no le hice la gran pregunta y él contestó de esa forma. Creo que si me hubiese quedado en silencio, él lo habría dicho igual. No me quiero quedar con el crédito de la frase, que fue toda de él”.
Luego, prosiguió con el desgarrador relato: “Hacer la entrevista fue muy complejo porque era una situación muy delicada. Había logrado que Franchi me llevara a la habitación donde él estaba, pasando por entre todos los guardias. El hotel de Dallas era un gran cilindro en el que afuera había cinco mil periodista. Parecía un aeropuerto, faltaban los aviones. Era una locura. Y Marcos me vino a buscar, me llevó atravesando toda esa nube de periodistas y la seguridad y me llevó al piso que tenía alquilado el seleccionado argentino. Llegamos y cuando se abrió la puerta, estaba Diego en penumbras sentado en una posición de Buda en un sillón grande. Cuando Diego me vio, se levantó, me vino a abrazar y se puso a llorar de una manera que me hizo llorar a mi también, cómo si se hubiera muerto un hijo. La sensación fue esa. Y él me decía ‘yo no me drogué, yo no me drogué’. Yo todavía no se bien lo que pasó, no puedo decir ni para un lado ni para el otro. Nunca entendí bien qué pasó, pero si puedo garantizar que yo lo vi entrenar”.
Pese a conseguir ese momento exclusivo junto al ’10′ del equipo dirigido por Alfio Basile, la irrupción de Julio Grondona en el lugar casi imposibilita que la entrevista se llevara a cabo. “Después, entró Grondona y me dijo ‘¿qué estás haciendo vos acá?’. Y Diego le dijo ‘A usted qué le importa lo que está haciendo. Adrian es mi amigo y se queda acá. Usted ya me echó, no soy más del seleccionado’. Yo me iba a ir y ahí Marcos me dijo que vaya a su habitación y espere ahí. Ahí fue cuando decidieron hacer la nota, subió el camerama y preparamos todo. Vino Diego e hicimos la nota”, detalló.
Tras explicar el dolor sentido tanto por él como por sus colegas, que una vez transmitidas las imágenes se trasladó a todos los hinchas albicelestes, Paenza concluyó: “La nota se hizo así porque Diego quiso y la hizo él, sino no hubiese ocurrido nada”.
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