Finalmente, Agustín Pichot se decidió, y a horas del cierre de la lista presentó su candidatura y será quien lidere a los países del Hemisferio Sur y de Sudamérica en la elección que se llevará a cabo en forma electrónica –debido a la pandemia– el próximo domingo 26 de abril.
Serán 51 los votos que decidirán los destinos del rugby mundial y el que mayor cantidad de ellos consiga, por mayoría simple, será quien se quedará con el cargo de Presidente por los próximos cuatro años.
Los resultados de la elección se conocerán recién dos semanas después, más precisamente el martes 12 de mayo, a través de una reunión virtual del Consejo de World Rugby.
La Presidencia, una costumbre europea
La historia indica que desde hace 25 años, allá por 1995, cuando se conformó la primera lista para la elección de la Presidencia de la International Rugby Board (IRB), los que quedaron a cargo siempre fueron dirigentes europeos. Vale recordar entonces al galés Vernon Pugh quien comandó los destinos del rugby desde 1995 a 2002; para luego cederle su lugar al irlandés Syd Millar quien lo hizo desde 2003 a 2007. Posteriormente el francés Bernard Lapasset fue quien quedó a cargo al regir los destinos de la entidad madre del rugby desde el 2007 al 2015, y cederle el trono actual al inglés Bill Beaumont, quien asumió en 2016 y termina su mandato este año. Ahora va por la reelección.
Justamente quien fuera su vicepresidente en el último período, el argentino Agustín Pichot, es quien estará a la cabeza de la lista que lo enfrentará.
La grieta de los últimos tiempos y una decisión que apoya a los más débiles
En el último año, Agustín Pichot trabajó para unificar criterios e intentó armar un plan de trabajo que incluía a los seleccionados de Tier 2 y les daba posibilidades concretas de crecer a los más débiles. La idea del argentino fue siempre trabajar todos juntos para hacer crecer el deporte. De esa forma presentó ante las autoridades a cargo su plan estratégico para darle la oportunidad de mejorar el nivel a los países que estaban en un segundo escalafón. A partir de entonces la grieta comenzó a agrandarse, y tras varios desencuentros con el inglés Beaumont decidió priorizar su pensamiento y en la tarde de hoy confirmó que se presentará encabezando su propia lista y será oponente para esta ocasión.
Recordemos que en la última elección hubo una sola lista consensuada, y para esta oportunidad el dirigente argentino que intentó liderar el proyecto de Liga Mundial con ascensos y descensos, hizo que los miembros de los países de Europa no vieran con buenos ojos esta idea -no los favorecía claramente- y decidieran apoyar a Beaumond en forma unánime. Tras ese cortocircuito se forzó el desenlace, y aunque hubo algún intento de acercamiento para buscar mejorar la situación e integrar a los seleccionados de menor jerarquía, nada de eso ocurrió y finalmente se transformó en un tema sin retorno.
Los votos, la paridad actual y quienes apoyarían a cada uno hasta ahora
Los votos de cada uno de los países y regiones que componen World Rugby son calificados y tienen un valor de entre uno y tres unidades depende la Unión y la Región a la que representan. La cantidad total de esos votos suman 51, por lo cual el candidato que reúna al menos 26 de ellos se alzará con la victoria.
El dirigente argentino se apoya en el Hemisferio Sur, Sanzaar y Sudamérica, mientras que el Inglés lo hace básicamente en los países europeos y Japón.
De esta forma Agustín Pichot contaría hasta el momento con los votos de cada uno de los países que participan del Rugby Championship, que suman tres cada uno; es decir Argentina, Australia, Nueva Zelanda y Sudáfrica. A eso le sumaría dos votos de las regiones de Oceanía, África, Asia y Sudamérica y por último se agregaría uno más de Georgia y otro de Uruguay, con quien Pichot mantiene una gran relación, por lo cual el total hasta ahora sería de 22 votos.
Por el lado del actual Presidente, el inglés Bill Beaumont; contaría con los tres votos de los seleccionados que juegan el Torneo Seis Naciones, es decir: Escocia, Francia, Gales, Inglaterra, Irlanda e Italia, sumado a los dos votos de los países de Europa y a Japón, quien ya fuera del Súper Rugby, se decidió a apoyar al actual Presidente.
En busca de los votos que quedan y quienes definirán la elección
Los países que aún parecen no haber determinado su voto o al menos no lo tienen 100% decidido son Canadá, Fiji, Rumania, Samoa y Norteamérica, quienes poseen dos votos cada uno. Por último habría que agregar a Estados Unidos que suma un voto.
Entrando en las especulaciones, por el lado de Pichot se debería sumar a Fiji y Samoa, dos de los seleccionados que se beneficiarían con el proyecto presentado por el dirigente argentino. Se sabe que Rumania estaría del lado europeo con lo cual quedaría por verse que sucede con Canadá y Nortemérica (que serán sin duda cuatro votos decisivos) y por último Estados Unidos que a pesar de contar con uno solo podría aliarse a la región y definir la cuestión para uno u otro lado.
Desde las dos listas se trabaja a fondo tratando de conseguir afianzar los votos seguros y conseguir los que sin duda serán determinantes para saber quién será el próximo Presidente del Rugby Mundial. Si el inglés que irá por la reelección tratando de mantener todo como está con el predominio de los europeos al mando como desde hace 25 años o el argentino que intentará dar el batacazo e introducir un cambio profundo a un sistema que parece tener siempre a los mismos seleccionados con un beneficio extra por sobre los demás.
El 12 de mayo en Irlanda cuando se haga el recuento de sufragios de cada país y región se sabrá cómo terminará esta historia y quien será el encargado de decidir los destinos de la pelota ovalada por los próximos cuatro años.
Mientras tanto las negociaciones de uno y otro lado, a pesar de la pandemia, están a la orden del día en busca de conseguir dar vuelta un voto o conseguir lo que les falta para quedarse con el trono deseado.
Habrá que esperar un mes más para saber quien será el Presidente. Si otra vez Europa con Beamount a la cabeza seguirá manejando el rugby mundial o Agustín Pichot logrará lo que nadie pudo hasta ahora.